CRISIS DE LO PÚBLICO+ AUSENCIA DE COSTOS AMBIENTALES = IMPACTO DE LA ECONOMÍA TRADICIONAL

CRISIS DE LO PÚBLICO+ AUSENCIA DE COSTOS AMBIENTALES  = IMPACTO DE LA ECONOMÍA TRADICIONAL

Paola Ospina Moreno

El neoliberalismo con su idea productivista, pareciera ser que ha eliminado de la mente de los grandes productores industriales la necesidad por lo recursos naturales, desde un ámbito que no pone en contexto una medida financiera que les permita entender su agotabilidad y la base fundamental  que representa la materia prima como centro de la economía. Esta brecha entre producción y agotabilidad,  conlleva a una crisis de los bienes o recursos públicos,  que es fomentada por la ausencia de costos ambientales y que a modo groso representa el impacto de la economía tradicional.

Para entender la temática debería preguntarse ¿cómo se  le da una valoración social a los bienes ambientales?,”  las carencias de información ambiental se esgrimen para demostrar “que los problemas ambientales son menos significativos e importantes de lo que se anuncia”. Esta es obviamente una posición política que protege los intereses económicos que se ven favorecidos con de la sobreexplotación de los recursos naturales, y que siguen considerando los costos ambientales como una externalidad. La falta de interés por generar mayor cantidad de información, que además sea más confiable, no tiene una explicación neutra. Cuanto menos información se tenga hay menos posibilidades de crear conciencia en la opinión pública y por ende, de repercutir en los estamentos políticos para que se realice una gestión ambiental adecuada.”^[1] Es entonces cuestionable la necesidad de darle un costo a los bienes ambientales desde el punto económico, ya que esto es visto como una perdida a nivel industrial y  manejado por los mismos para causar desinterés desde el enfoque de la población.

Básicamente estas externalidades a nivel social podría medirse en la actualidad por los grandes sobrecostos en la salud, a causa de los efectos  industriales, este valor relativamente mide los efectos, pero no muestra la importancia que debe adjudicársele a su necesidad como base fundamental, no  del crecimiento económico sino del sustento humano. La idea de bienes públicos, que están totalmente desprotegidos y a la  población en general no le importa la equidad, la salud, su permanencia biológica, si no que prácticamente el antropocentrismo ha crecido desde el consumo y el capitalismo arraigado siendo socialmente esto lo único que es compartido, ha sido la mejor herramienta del modelo económico productivista para generar sobreexplotación y contaminación gratis.

“la humanidad no alcanzará la sostenibilidad, la equidad, la armonía ni la felicidad mientras su objetivo económico principal siga siendo la búsqueda del crecimiento industrial, medido por el PNB. Esto no significa que el nuevo objetivo deba ser el crecimiento nulo, pues éste, en principio, también es compatible con la insostenibilidad y la injusticia. lo que sí significa es la restricción progresiva de la actividad económica con limitaciones estrechas de sostenibilidad, y la dirección explicita de dicha actividad por y hacia los valores humanos positivos: el desarrollo personal y la calidad de vida, la participación en la sociedad, la democracia y la justicia, y el control de los resultados económicos en función de dichos objetivos.”^[2]

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