Como se da Desarrollo economico de chile

“De vacaciones en Chile”

No hay nada nuevo en decir que históricamente hemos sido mirados en menos a lo largo de la historia, para toda Europa seguimos siendo quizás una tropa de indígenas que buscan algún día el desarrollo que ellos dicen tener. Pero la verdad es que esto podría ser todo esto muy diferente si ellos, los supuestos civilizados, no hubieran llegado a nuestro continente.

Siempre hemos creído, incluyéndome, que lo que vino a “mejorar nuestra raza” han sido los nobles caballeros que llegaron desde España a transmitirnos el conocimiento y la palabra de su rey, pero al ver la historia y hacer funcionar el cerebro, esos tan adorados personajes que llegaban a Chile tales como Diego de Almagro y Pedro de Valdivia, no eran más que hidalgos, incluso presos de su país que venían en una suerte de vacaciones a probar que podían lograr en otras tierras y lamentablemente quedamos en eso. Nos quedamos en seguirlos a ellos, seguir sus condiciones, respetar sus reglas y dejar que avanzaran con su legado… lamentablemente su legado no podía ser el más destacado si tenemos en consideración que no eran los más destacados eruditos de la república Española.

Y así comienza la historia de nuestro Chile querido, que se acostumbró a ser exportador de materias primas y con deuda externa que nos obligara a estar siempre “contra las cuerdas”, en un principio era la exportación de metales a la corona y deudas con el virreinato del Perú, para luego pasar a exportar salitre y cobre  y contraer deudas con el continente europeo.

Todo esto también ocurre teniendo en consideración que hay un proceso de independencia de por medio, que hubo que llevar a cabo con muchos esfuerzos económicos y no exento de problemas. Además el hecho de tener que instaurar nuevamente instituciones para lograr el funcionamiento del país tales como la Hacienda Pública pone en jaque el seguir avanzando y creciendo como país. De hecho, para salir adelante se estableció para los ciudadanos “ayudar con una porción de sus bienes para los gastos ordinarios del Estado; y en sus necesidades extraordinarias y peligros, debe sacrificar lo más estimable para conservar su existencia y libertad.”(Página 21, El ministerio de hacienda y la organización de la República). Todo esto para financiar obras públicas tanto como a las fuerzas armadas que tuvieron que defender desde la campaña de independencia hasta la Guerra del Pacífico, por lo tanto, no era un gasto menor al que estábamos sometidos.

Y, todo esto ¿Por qué?, hay cosas que se repiten hasta hoy en día, deudas externas, poca industrialización, dependencia de la exportación de ciertas materias primas, en general nos conformamos con lo que hacemos y nos quedamos ahí hasta que nos pasa la cuenta y tenemos que buscar otra forma de hacer las cosas (como nos pasó con el salitre, gozamos de bien estar debido a la exportación de este hasta que salieron los alemanes con un salitre sintético y la época se vio frustrada y con ella una economía entera). Y esto en parte porque así nos acostumbramos en los inicios, nos daban órdenes, las seguíamos y pagábamos nuestros impuestos. Una verdadera independencia pienso que hubiera sido dejar en cierta medida las instituciones que nos dejaron heredadas con otros nombre los españoles y empezar a mirar economías y modelos de hacer las cosas como lo fueron Inglaterra y ahora Alemania, en vez de quedarnos con una España que en este minuto de potencia tiene muy poco.  

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