Coón Y El Descubrimiento De América

En 1492 un navegante de origen genovés radicado en España y quien llevara por nombre “Cristóbal Colon”, lleno de anhelos mas que de ambición, lucha por lograr la oportunidad de su vida: “Llegar a las Indias” atravesando el hasta ese momento inmenso e inexplorable océano Atlántico, pues él sostiene que las ultimas pronunciaciones hechas por algunos de los emergentes estudiosos de la época son válidas en cuanto al límite de dicho mar, con lo cual el considera que puede entonces hacer uso de esta ruta marítima para llegar a su destino sin tener que bordear todo el continente Africano, tal y como ya lo habían hecho algunos de sus colegas en el reciente pasado; contando con la enorme desventaja de que el viaje era extremadamente largo.

En su ardua y constante solicitud a las diversas autoridades siente como cada día que pasa se ve cada vez mas frustada su tan anhelada campaña, hasta que un día sostiene una conversación con un miembro de la nobleza que como es común sus intereses, aunque no mostrados en sus inicios, siempre son en busca de lograr algún beneficio material.

“El señor Colon”, a como se le dirigían hasta ese momento las demás personas, mediante las influencias ejercidas por su reciente visitante, logra concertar una cita con la en ese momento reina del recien logrado Reino de Castilla y Aragón, en la cual con toda la libertad y franqueza que le era característico, expone a Doña Isabel con argumentos, persuasiones y hasta elogios (citando la reciente recuperación de Granada), que su propuesta no es una fantasía ni mucho menos un imposible.

Los reyes de España al ver que de ser ciertos los planteamientos antes escuchados, los beneficios para la corona serian mas que significativos; contrario a la situación de que los cálculos del navegante fueran erróneos y la aventura no pasara de ser simplemente una campaña mal lograda de otro soñador mas; estos deciden dar el “Si” al extranjero, pero no de forma categórica, puesto que la propuesta formal hecha por este último, no se limita a pedir la aprobación de su viaje, sino que adjunta un pliego de peticiones que le permitan primero que todo convertirse en un miembro de la nobleza (DON), obtener un puesto sobresaliente en los territorios conquistados, sin dejar de lado por supuesto la parte económica, en la cual reclama ser partícipe de las riquezas obtenidas en nombre de la corona.

Sin embargo, después de sostener el correspondiente debate con el rey, este último accede a cumplir todas sus demandas, de verse hecha realidad la gran misión.

Es así como el día 3 de Agosto de 1492, el gran Almirante “Cristóbal Colón” se hace a la mar en busca de las Indias.

Ya pasan 9 semanas y aun nada de tierra; el océano parece infinito y la tripulación empezando por su mas cercano colaborador (El señor Pinzón), arde en desesperación, pero Colon aunque consciente de la realidad, mantiene su convicción

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