Cultura Maya
Enviado por kevinprado • 12 de Enero de 2014 • 1.822 Palabras (8 Páginas) • 344 Visitas
CULTURA MAYA
HISTORIA DEL ARTE
XOXOTLA HAMDAN IXCHEL
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Ubicación temporal y espacial
Protoneolítico 2000 a.C. – Postclásico tardío 1517 d.C.
Iniciaron su desarrollo cultural en el sureste de México y parte de Centroamérica, desplegó su cultura en un territorio de casi 400 mil kilómetros cuadrados.
El área maya se ha divido para su estudio en tres principales zonas:
La zona norte: Comprende los estados de Yucatán y la mayor parte de Campeche y Quintana Roo. La zona norte es una baja y extensa planicie calcárea que se eleva suavemente sobre el nivel del mar, de suelos semiáridos y pedregosos, con lluvias escasas y vegetación de chaparral. La porosidad de los suelos ha permitido la rápida filtración del agua de lluvia y la formación de drenaje subterráneo. Esta filtración ha provocado que el techo de los depósitos se haya derrumbado en algunas partes, de manera que han aflorado en forma de bocas naturales o cenotes. Los grupos humanos se establecieron habitualmente en la proximidad de los cenotes, que constituyen la principal fuente de agua dulce.
La zona central: Se extiende desde la laguna de Tupilco, en Tabasco, hasta el río Ulúa, en Honduras; incluye parte de Tabasco y Chiapas, el sur de Campeche y de Quintana Roo, Belice, el Petén guatemalteco y las tierras adyacentes al este y al oeste, así como la porción occidental de Honduras. Aunque son tierras bajas en su mayor parte, hay lomeríos y serranías suaves con espesa vegetación tropical, sabanas, zonas pantanosas y planicies costeras. Hacia el sur, se encuentran numerosos ríos de amplio caudal, lagos y lagunas; el suelo es más fértil y la precipitación pluvial abundante.
La zona sur: Abarca la parte más elevada de la tierra maya y los litorales del Pacífico, a partir de Chiapas, Guatemala y la porción occidental del Salvador. Tiene suelos de origen volcánico en las cordilleras elevadas y bosques de coníferas; la llanura costera es de tierras cálidas y fértiles. Los mayas obtuvieron de esa zona, caracterizada por importantes recursos minerales, dos materiales muy apreciados: el jade y la obsidiana.
Política
El desarrollo de la escritura en la sociedad maya es uno de sus rasgos culturales más sobresalientes, que la distingue del resto de los pueblos que habitaron la América precolombina. En los textos jeroglíficos se registraron los sucesos históricos que marcaron la vida política de las dinastías gobernantes de los estados de la zona central.
Los registros epigráficos dan el siglo I d.C. como fecha de la fundación de las primeras dinastías, que identifican con los llamados glifos emblema, muy numerosos. Cada pequeño estado tenía su propio emblema y genealogía, en general basada en un antepasado divino, que era, a la vez, el protector de la dinastía reinante y de la ciudad. A los soberanos, para diferenciarlos de los nobles, se les llamaba k’uhul ajaw, o “rey divino”, título que denotaba su parentesco con el antepasado fundador de la dinastía y con la deidad protectora.
Cada estado maya poseía su propia dinastía gobernante y un territorio más o menos definido bajo su control. Esto quiere decir que, en las guerras, los territorios conquistados no siempre se anexaban al del vencedor, sino que seguían existiendo como estados autónomos, a diferencia del centro de México, donde se desarrolló una unidad política hegemónica que centralizaba el poder y controlaba a los estados conquistados. Por ello, la historia de los mayas debe entenderse como una compleja red de relaciones personales y familiares establecidas entre dinastías residentes en cada ciudad y en continua competencia. Se conoce la existencia de al menos cincuenta ciudades autónomas con su propio k’uhul ajaw, las cuales establecieron vínculos que iban desde alianzas políticas y comerciales hasta alianzas por motivos de guerra.
Economía
La sociedad maya surgió a partir de grupos de cazadores, pescadores y recolectores que se alimentaban de animales, raíces, frutas y tubérculos. La aparición de la agricultura generó la posibilidad de contar con una base alimenticia estable y permanente, y modificó radicalmente las expectativas de vida de los habitantes de la región. El sistema agrícola más antiguo y sencillo que se conoce es la milpa, en el que el terreno se limpia y se quema para la siembra. La práctica de este y otros sistemas agrícolas, generó la necesidad de contar con un calendario para determinar la mejor época de siembra y cosecha, así como a estudiar detalladamente el entorno. El conocimiento sobre el medio ambiente que algunos dirigentes comenzaron a acumular sirvió para fortalecer su poder, ya que fueron vistos como intermediarios con fuerzas divinas. Por ello desde los primeros tiempos, la práctica agrícola se unió al ritual y a una concepción mítica del mundo y del universo. La diversidad geográfica de la región maya obligó a sus habitantes a buscar otras alternativas de producción, complementarias de la milpa, que sólo podía ser practicada en terrenos altos y con buen drenaje. En las tierras que se inundaban, conocidas como “bajas”, en la península de Yucatán, fue necesario desarrollar otras técnicas de cultivo, como la canalización de los terrenos para permitir la salida del agua y poder sembrarlos, o la construcción de campos artificiales hechos de tierra mezclada con lodo, que sobresalían del área inundada. El mejoramiento de las técnicas agrícolas permitió incrementar la capacidad de producción de alimentos y, por tanto, el sustento para poblaciones cada vez mayores.
El comercio. Existía una organización comercial entre los mayas y relaciones de intercambio con la Costa del Golfo, el Altiplano Central y hacia el sur, hasta el Golfo de Honduras. Existían mercados establecidos en centros comerciales que al mismo tiempo eran ciudades importantes, a las que afluían comerciantes y peregrinos con el fin de rendir
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