Cultura Maya

CULTURA MAYA

SU ORIGEN

La arquitectura de los mayas es tan característica como la griega, romana o gótica. Tiene variaciones locales; pero fundamentalmente es de una naturaleza única.

Se ha sugerido que la choza de paja maya, con su techo fuertemente inclinado de dos aguas, era el prototipo de los edificios de arcos de piedra voladizos lo que puede tener sus visos de probabilidad. La choza de paja de la gente del pueblo, idéntica durante dos mil años, es rectangular, con los extremos redondos, y mide 6.70 metros de largo por 3.65 metros de ancho.

Las paredes están hechas de palos recubiertos de lodo o de piedra sin labrar, y no pasan de 2.20 metros de alto. Sobre ellas descansa una armazón de palos que se levanta a otros 3.50 a 4.50 metros. Estos sostienen el techo de paja de dos aguas, fuertemente inclinado.

En las pinturas murales y decoraciones de fachadas de la época Clásica se ven reproducidas estas casas de la gente del pueblo, y los cimientos mismos de una casa se han encontrado en uno de los pisos más antiguos del palacio de Uaxactún.

La semejanza entre las casas techadas de paja y los edificios de piedra, es notable, especialmente si se observa desde el interior. Este parecido sugiere que el declive de los techos de paja dio lugar en un principio a la idea del techo de bóveda de piedras saledizas.

Los materiales para las construcciones de piedra se encontraban en la mayor abundancia, en forma de material muy fácil de trabajar: la piedra caliza que, al quemarla, proporciona la cal y existen muchos depósitos de grava, que empleaban en la mezcla.

Dada la gran inteligencia y el profundo fervor religioso de los antiguos mayas, era inevitable que crearan su propia arquitectura religiosa. Fuera de las atenciones de su economía interna, no tenían otra actividad que consumiera tanto su tiempo y energías sobrantes como la arquitectura.

Para entender un poco la evolución del arte y de la arquitectura de los mayas es conveniente observar los períodos por los que ha atravesado su desarrollo y las diferentes formas de expresión en sus construcciones.

La civilización maya atraviesa por los siguientes períodos que irán enmarcando su

origen, desarrollo, apogeo y decadencia y que abarca del 500 a.C. al 1450 d.C.:

a) Período formativo.- 500 A.C. a 325 D.C Equivale al preclásico superior; período dependiente sobre todo de sus vecinos los olmecas que se suponían más antiguos

b) Período Clásico.- Del 325 D.C. al 925 D.C. Tiene tres vertientes:

- Clásico temprano: en el que aparecen los primeros rasgos típicos de lo maya. Construcciones de templos con arco dovelado y el culto al tiempo (estelas)

- Floreciente.- Se desarrolla la arquitectura, la pintura, la escultura, la cerámica, las artes menores, la lapidaria, astronomía, matemáticas y escritura jeroglífica.

- Colapso.- Resiente la influencia de pueblos extraños

c) Período mexicano 975 al 1200 d.C. Influencias e invasiones de pueblos provenientes del altiplano central de habla náhuatl y cultura tolteca dirigidos por Kukulkán que es lo mismo que Quetzalcóatl.

d) Absorción mexicana.- 1300 1540. Mezcla de familias náhuatl y tolteca con mayas que marca su decadencia. Época caracterizada por la división.

La arquitectura maya inicia desde el formativo sin liberarse de influencias extrañas. El edificio E-VII-Sub de Uaxactún cerca de Tikal pertenece a esta época. Este edificio es de mampostería conserva su recubrimiento y sus mascarones de estuco. Las pequeñas escaleras gemelas adosadas a los taludes del basamento y los grandes mascarones de tendencia olmecoide son arcaicos. Ángulos redondeados, gruesas molduras salientes y plataforma a dos niveles distintos que sostenían un templo de troncos y palmas. Arte tributario

En el clásico aparece el elemento característico de la arquitectura maya. El arco corbelado o en saledizo. Complementario a este están las cresterías y columnas que junto con las terrazas superpuestas se combinan para originar los diferentes modos de expresión de la arquitectura maya.

ESTILO PETEN.- Los edificios se levantan a base de terrazas escalonadas con cuerpos en talud y esquinas remetidas; escalinatas que sobresalen de la fachada del edificio; frecuente decoración de mascarones estucados; predominio del macizo sobre el vano, muros gruesos y cuartos estrechos; cresterías de gran altura apoyadas sobre el muro posterior de los templos; fachadas con decoración de estuco. A este estilo pertenecen construcciones como las de Tikal y Piedras Negras.

El templo I de Tikal es entre todos el de proporciones más esbeltas por el juego de molduras y quiebres que apuntan hacia arriba reforzando el impulso vertical de la construcción se caracteriza por: proporciones de los cuerpos escalonados; rítmica disposición de molduras y entre calles con planos entrantes y salientes; empinada escalinata que impulsa hacia arriba el templo prolongada por la alta crestería y planos inclinados.

Para techar crean la forma de arco saledizo cuya sección remata en forma trapezoidal (arco falso) en el que no existe la pieza clave y cuyas dos mitades son totalmente independientes. En consecuencia se reduce al mínimo el espacio interior en palacios y corredores que no reciben luz más que de la puerta principal. Arquitectura escultórica.

ESTILO PALENQUE.- Sus elementos son los siguientes: basamentos de cuerpos verticales, escalinatas limitadas por alfardas; templos con dos cuartos o crujías de las cuales el posterior es el santuario, cresterías apoyadas en el muro central; fachadas con pisos paralelos a las bóvedas y decoradas con figuras estucadas, predominio del vano sobre el macizo. A este estilo pertenecen ciudades como Palenque, Copán, Yaxchilán, Bonampak.

El templo 22 de Copán en torno a la ancha puerta de comunicación con el fondo encierra el más espléndido y mejor conservado enmarcamiento esculpido que se conoce en estas ciudad: dos corpulentos gigantes quienes, de acuerdo con la mitología maya sostenían los ángulos del universo y apoyando una rodilla en unas enormes calaveras que subrayan el desnivel del aposento posterior alzan en vilo a un fantástico monstruo bicéfalo al que sostienen de las quijadas. Este monstruo se transforma en la parte superior del marco en una caprichosa sucesión de volutas que adoptan la forma de “S”.

Siendo astrónomos por excelencia, buscaban dejar constancia de sus estudios como el hecho de colocar en dos

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