Dioses y heroes de la mitología. ASI COMENZÓ EL UNIVERSO.

ASI COMENZÓ EL UNIVERSO

En el comienzo solo existía el caos infinito. Del caos surgió GEA, la Madre Tierra, enorme, hermosa y temible, quien como se sentía sola, quiso tener un marido y creó a URANO, el Cielo estrellado, el único que podía abrazarla.

GEA y URANO tuvieron muchos hijos: 12 titanes, 3 cíclopes gigantes y 3 hecatónquiros (monstruos violentos de 50 cabezas y 100 brazos).

URANO temía que sus hijos lo despojaran de su poder sobre el universo, por eso los mantenía encerrados a oscuras, en las profundidades de la Tierra  (en su vientre), lugar llamado Tártaro.

GEA pidió a sus hijos que se enfrentaran con URANO con una hoz mágica fabricada por ella.  El único que se animó fue CRONOS, el menor de los titanes, que era muy malvado y quería tener poder.  Le cortó los genitales con la hoz y los tiró al mar y en ese lugar nació AFRODITA,  la diosa de la belleza y el amor.

URANO condenó a CRONOS a que uno de sus hijos lo destruyera.

CRONOS liberó solo a sus hermanos los Titanes y condenó a los Cíclopes y Hecatonquiros,

URANO no murió, pero perdió el poder y fue CRONOS quien comenzó a reinar sobre el universo.

LOS HIJOS DE CRONOS.

CRONOS se casó con la titán REA y tuvieron 6 hijos, pero para evitar la maldición de su padre URANO, decidió comérselos vivos al nacer.  Primero nació HESTIA, luego, DEMÉTER, HERA, HADES y POSEIDON.  REA, con mucho dolor por lo que había hecho su marido, decide salvar a su 6to bebé y estando embarazada, dijo a CRONOS que tenía que viajar a Creta y, ayudada por GEA, tiene a su hijo ZEUS en una caverna en medio de un bosque.

ZEUS fue cuidado por GEA y en 1 año se convirtió en un dios adulto y poderoso.

GEA tenía un plan para liberarse de CRONOS y con ayuda de REA le hicieron tomar una poción mágica para que devolviera la vida a todos sus hijos.  ZEUS, HESTIA, DEMÉTER, HERA, HADES y POSEIDON fueron a vivir al monte Olimpo.

LA GUERRA DE LOS INMORTALES

ZEUS tenía que destronar a su padre CRONOS con el apoyo de sus hermanos los Titanes.

Comenzó la guerra de los inmortales y durante 10 años lucharon hasta que ZEUS decidió consultar a su sabia abuela GEA, quien le dijo que CRONOS tenía enemigos en el Tártaro (los cíclopes y hecatonquiros) y que ellos lo podrían ayudar.

ZEUS bajó al Tártaro, los liberó y convirtió en sus aliados.  En agradecimiento, los Cíclopes le regalaron a ZEUS 3 armas invencibles: el trueno, el rayo y el relámpago. Le dieron a HADES un casco que lo hacía invisible y a POSEIDON un tridente con el que podría hacer temblar la tierra y el mar.

Lucharon entre sí los seres inmortales sin descanso ni piedad. Los Hecatónquiros arrojaban rocas con sus 100 manos, ZEUS lanzaba rayos, POSEIDON causaba terremotos  y HADES era invisible y podía estar en todos lados.

Los bosques se incendiaron y los océanos hervían.  ZEUS triunfó y CRONOS y sus hermanos los titanes fueron encadenado en el Tártaro custodiados por los Hecatonquiros.

Los dioses sortearon los poderes, a ZEUS le tocó el cielo, a POSEIDON el dominio del mar y a HADES el mundo subterráneo. Pero ZEUS fue el rey de los dioses y gobernó sobre todos los mortales e inmortales.

GEA estaba furiosa porque ZEUS había encerrado a sus hijos en el Tártaro y decidió vengarse.

TIFON, EL HORROR

GEA estaba enfurecida contra ZEUS y los olímpicos.

La diosa HERA, esposa de ZEUS era muy celosa e influenciada por GEA fue a ver a CRONOS para pedirle ayuda para vengarse de su marido. El titán le dio 2 huevos para que los enterrara juntos y le dijo que de ellos iba a nacer el demonio, TIFON, que sería cuidado por GEA.

TIFON era un monstruo alto hasta las estrellas, con brazos tan largos que al extenderlos, con una mano tocaba el extremo este y con la otra el oeste, en lugar de dedos tenía 100 cabezas de dragón, de la cintura para abajo estaba formado por víboras, tenía cabeza humana, cuerpo alado y despedía fuego por los ojos.

Tifón atacó el Olimpo pero los dioses escaparon a Egipto y se convirtieron en animales para no ser descubiertos.

Solo ZEUS y su hija ATENEA, diosa de la sabiduría, se animaron a enfrentarlo, pero ZEUS no pudo fulminarlo con sus rayos y solo logró herirlo con la hoz. El monstruo atacó a ZEUS, le cortó los tendones de los brazos y piernas, inmovilizándolo, luego se arrancó los músculos y tendones y los colocó en una bolsa y se la entregó a su hermana DELFINA (mitad mujer y mitad reptil) para que la custodiara.

HERMES, el dios de los ladrones y su hijo PAN, con su flauta mágica, lograron adormecer a Delfina  le robaron la bolsa.  Le devolvieron los músculos y tendones a ZEUS y las fuerzas para luchar.  Entonces volvió al Olimpo para perseguir a Tifón y, debilitado por sus rayos, el dios le arrojó la montaña más grande y lo aplastó. Tifon quedó bajo el monte Etna y el fuego que emana el volcán es el que sale de sus ojos.

PROMETEO ENFRENTA A ZEUS.

PROMETEO, primo de ZEUS, decidió luchar contra CRONOS. Era valiente y astuto pero amaba a los seres humanos que intentaban sobrevivir con mucho sufrimiento por no tener fuego.  ZEUS, en cambio quería destruirlos.

PROMETEO robó un poco de fuego al dios HEFESTO –hijo de ZEUS, casado con AFRODITA, fabricante de armas para los dioses- y se lo entrega a los hombres, además de enseñarles a usarlo, a construir viviendas, armas, etc. Así, los humanos se sintieron superiores.

ZEUS, furioso, castigó a PROMETEO, lo encadenó a una roca en el Cáucaso y le envió a un águila monstruosa para que le devorar el hígado. Para que el castigo fuera eterno, el órgano volvía a crecer por la noche y el águila lo comía de día. Prometió no liberarlo nunca.

Pasaron milenios y un día Heracles, hijo de Zeus, pasó por allí, mató al águila y liberó a PROMETEO.

ZEUS estaba orgulloso de la hazaña de su hijo pero, para no romper su promesa, le pidió a HEFESTO que fabricara un anillo con el acero de la cadena y parte de la roca a la que había estado atado PROMETEO, éste juró usarlo y no quitárselo jamás.

LA CAJA DE PANDORA

Con el fuego, los hombres vivían libres de males y se habían vuelto peligrosos.  Como ZEUS quería marcar la diferencia entre hombres y dioses, decidió hacerles un regalo maldito.

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