ECONOMÍA EN LOS AÑOS 80´S

LA ECONOMIA EN LOS AÑOS 80

Objetivo general: Conocer y analizar a México y sus reformas durante la década de los 80´s, así como también los cambios importantes que se dieron para tratar de reactivar la economía mexicana y entender ese gran cambio que sufrió el país por el desplome en el precio del petróleo dando un golpe duro en la reservas del país, saber en que consistió la política de los años 80s y sus objetivos así como observar las consecuencias que trajeron esos desequilibrios uno de ellos y muy importante la inminente inflación, esto para reflexionar los cambios que ah tenido a través del tiempo para entender y tener un panorama más amplio de nuestra actualidad.

Desarrollo

Como sabemos, nuestra economía mexicana a sufrido múltiples cambios a través del tiempo y de cada gobierno en turno, pero es innegable los cambios drásticos que se dieron en la década de los 80s, para la economía mexicana 1981 fue un año demasiado critico en el ámbito externo, para empezar, durante esta década de los 80s, la deuda externa contraída por el Estado Mexicano se incremento muy significativamente, las causas que llevaron a nuestro país a tener esa deuda tan elevada fue tanto domesticas como internacionales es decir, el crecimiento de filas burocráticas durante el gobierno de López Portillo, crecimiento que no solo redujo los ingresos del petróleo si no que también genero aun mas deuda para poder cubrir gastos de mantenimiento, y con respecto a las causas internacionales podemos encontrar el decrecimiento del precio del barril de petróleo, ya que como sabemos el petróleo no generaba las ganancia que se esperaban, por otra parte el aumento en las tasas de interés de Estados Unidos hizo que nuestro país pagara año con año mucho dinero por concepto de intereses y no de la deuda en sí. Este aumento de interés perjudico a nuestra economía seriamente, por otra parte en esta misma década México tuvo un periodo de turbulencia no solo económica si no social.

Misma que genero una crisis, en la parte económica tanto Hacienda como Banco de México, de alguna forma buscaban restringir el gasto público para calmar el crecimiento del déficit fiscal además de depreciar el tipo de cambio ya que mostraba una sobrevaluación.

Como ya lo menciones este grupo conformado por la Secretaria de Hacienda y el Banco de México así como el sector privado percibieron que la negativa a depreciar y reducir el precio del petróleo ponía entre dicho la continuación de la expansión de la riqueza petrolera, los desequilibrios macroeconómicos reflejados en el déficit, en la balanza de pagos era insostenibles y de continuar la expansión del gasto sería necesario devaluar el peso, para principios de 1982 ya casi no había reservas en el Banco de México

Expropiación de la Banca

Se puede decir que el 1 de septiembre fue el parteaguas de la crisis, esto sucede cuando el presidente  López Portillo hizo un intento por modificar el rumbo de los acontecimientos, al expropiar la banca comercial privada, este fue un proceso que determino la elección de diversas medidas de política económica que por supuesto modificaron la operación del sistema financiero mexicano, el anuncio lo hizo ya en la parte final de su último informe de gobierno, si nos regresamos tiempo atrás, cuando asume la presidencia López Portillo empieza a asumir las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional, esto para reducirla inflación y ajustar la balanza de pagos, por otra parte también se impusieron topes a los aumentos salariales, limites a la capacidad de endeudamiento externo del país, desde que Portillo asumió toma de posesión, el presiente busco una “reconciliación Nacional” con el sector empresarial, la inestabilidad y las presiones sobre la balanza de pagos provocaron presiones sobre el tipo de cambio, por ende esto causo la aceleración de fuga de capitales y a su vez causo una sobrevaluación del peso, por lo que esta situación fue aprovechada para que empresas e individuos aprovecharan para comprar dólares.

Los cuales estaban muy baratos en términos relativos, y lo que propicio una disminución en las reservas. Durante este mismo año se combino no solo la caída en el precio y demanda del petróleo si no también el alza en la tasa de interés, y un incremento del gasto público por encima de lo presupuestado, Con este anuncio que hizo el presidente López Portillo, los banqueros se sintieron traicionados, ya que como sabemos, la relación entre el gobierno y el sector privado y esos acuerdos de naturaleza económica se tomaban con los banqueros, “los banqueros de esa época eran la voz del sector privado, el grado de influencia que tuvieron empresarios y banqueros en la política económica del país, estuvo respaldada por la secretaría de Hacienda” ^[1]

Un ejemplo de esta toma de decisiones fue la integración del IVA que entro en vigor a principios de 1980, el gobierno negocio con los banqueros y al contar con su apoyo logro implementarlas sin problema alguno, así la nacionalización rompió reglas entre el gobierno y el sector privado, es decir aunque la nacionalización de la banca tuvo un gran impacto económico, no fue comparable con su gran impacto político, el sexenio del presidente López Portillo llego a su fin envuelto no solo de una gran crisis económica sino también una fuerte crisis política, a la larga este descontento que se dio entre el sector privado y el gobierno generado por la expropiación de la banca tendría graves consecuencias para nuestro país.

Política de ajuste

Nuestra economía estaba en una grave situación, al iniciar el periodo presidencial de Miguel de la Madrid, el esfuerzo que hacia el gobierno por reducir sus propios desequilibrios no tuvieron éxito, ya que si bien el déficit disminuyo en un inicio en 1987 ya se encontraba nuevamente en los mismos niveles que en 1982, Por lo que a partir de esto, los primeros años del gobierno de Miguel de la Madrid  vio intensas actividades políticas de los empresarios, era muy obvio que después de la nacionalización de 1982, el sector privado no confiara totalmente en el nuevo gobierno.

Al tomar la posesión Miguel de la Madrid, propuso medidas que buscaban solucionar la crisis económica, y se estructuraba a partir de una premisa política, “la conciliación con el sector privado”

Para 1985 los sismos que sacudieron a la ciudad de México no solo implicaron pérdidas humanas, llego en un momento de inestabilidad macroeconómica que dificulto la salida rápida del desastre, en un momento en que la excesiva deuda pública había llevado al gobierno a implementar políticas apoyadas por organismos internacionales, enfocadas en reducir la deuda, las políticas sugeridas por organismos Internacionales como el Fondo Monetario internacional implicaron la caída en una recesión, debido a la reducción del gasto público, la inversión y el consumo, la falta de recursos que hubo para hacer frente a la emergencia, la destrucción de la capacidad productiva, la pérdida de vidas por el sismo y la paralización de la ciudad de México, así como la negativa del presidente de la Madrid  de aceptar ayuda internacional, agravaron la situación.

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