EL CONTROVERTIDO PEYOTE.

EL CONTROVERTIDO PEYOTE.

Lamentablemente en México no tenemos el conocimiento que se debería tener al respecto de esta planta, no tenemos el interés de estudiarlo a fondo más que gente de otros países son los que tienen un conocimiento más a detalle respecto de este. Lo utilizan como medicina, alimento de ornamento o incluso de albergue tiene un sinfín de utilidades, se usa para alucinar muchos creían que era como un símbolo de protección creo que era porque les ayudaba a relajar y no sentir dolor, al momento que estaban bajo los efectos de este.

Para los mexicas es carne de los dioses se le conoce como teonanacal, en México existe la mayor diversidad de alucinógenos el que prevalece es este primordialmente.

Durante la conquista la sociedad se horrorizo ya que para la creencia católica es como satanismo la practica con estos alucinógenos porque alucinan.

El primer análisis completo echo sobre el peyote fue escrito por francisco Hernández un médico particular español y que tardo 5 años recopilando la información que creyó conveniente de botánica, dos botánicos le dieron al peyote y a otras plantas alucinógenas el nombre de las plantas de los dioses por sus usos medicinales y terapéuticos, que ofrecen y por las ceremonias que se les rendían.

El peyote se distribuye del sur de Texas pasando pos san Luis, zacatecas Tamaulipas, nuevo león, este pasa desapercibido ya que se confunde con diferentes tipos de cactus que llevan como nombre común peyote o peyotillo.

Tiene usos que son importantes como en casos de dolores extremos creo que está bien que sea utilizado siempre y cuando sea en bajas porciones si abusamos de este obvio que nos traerá consecuencias muy graves inevitablemente quizá se pueda llegar hasta la muerte, pero ya que las nuevas sociedades solo lo usan para según evadir sus problemas, escapar de este, es ahí cuando no debe de ser aprobado su consumo, las autoridades tener un control más a detalle en cuanto a los cultivos de este ya que no cualquiera debe de tener el recurso para poder tenerlo bajo su propiedad. Solo se debe de tener en cuenta que los pueblos a los que se les tiene permitido el cultivo de este alucinógeno es a ciertos pueblos huicholes, tarahumaras y coras, con el fin de que tienen la creencia de sus dioses no con el de comercializar.

El culto a este es un tesoro antropológico,, por lo que deben duplicarse los esfuerzos por conservarlo aun en nuestras culturas, como ya lo mencionaba antes de uso curativo exclusivamente y sus rituales.

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