EL TRABAJO EN EL MUNDO ANTIGUO

EL TRABAJO EN EL MUNDO ANTIGUO

     Desde épocas muy antiguas el trabajo ha formado parte de las necesidades del hombre, el mismo se realizaba sin conocer su concepto y tampoco existían leyes que lo reglamentara, más que las costumbres o normas impuestas por los dueños de tierras, reinados, entre otros. La biblia hace referencia al trabajo en el libro de Génesis, cuando Caín fue castigado por desobediencia a Dios. No era una norma jurídica sino una manera de disciplinar a nuestros padres, no existía legislación sobre la actividad laboral, no se conocía su significado ningún pacto entre trabajador – empleador, tampoco existía una sociedad de consumo, el hombre se dedicaba solo a tomar de la naturaleza lo que necesitaba

      En la época de Grecia, la máxima expresión del trabajo fue caracterizado por la esclavitud, por su nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, el grado de complejización, hizo que se agudizará la lucha de clases. En Atenas durante los siglos IV y V, el 80%  de población ateniense eran esclavos. Este tipo de producción esclavista, trajo consigo una división del trabajo dando lugar a una sociedad mucho más compleja, intensificando la lucha de clases, lo que produjo una ruptura irreversible entre el trabajo manual y el trabajo intelectual.

     Esta situación, dio origen al hombre cuyo único trabajo era “pensar”, dando origen a la filosofía como sustento ideológico del estado. Platón, Aristóteles muestran menosprecio por el trabajo manual, aman la holganza y el trabajo intelectual. El ideal del griego era que con el cultivo de la tierra se formaban mejores ciudadanos y los mejores soldados, solo se ausentaban del trabajo para ir a la Asamblea o a los tribunales donde recibían fichas de asistencia.

     El poco trabajo asalariado se consideraba indigno, el trabajo manual tales como los alfareros, herreros, e incluso los médicos eran mal vistos. A los revendedores se les llamaba “capelos”, aquí se incluían los tenderos, carniceros, pescaderos, taberneros, comerciantes de granos, panaderos y hoteleros. Los pequeños comerciantes tenían fama de estafadores en el peso y las medidas.

      Por lo tanto, para Grecia el trabajo era algo que pertenecía a los esclavos, quienes pertenecían en el último peldaño del escalafón de las clases sociales. El esclavo carecía de un derecho subjetivo a la vida y al trato digno, por lo que estaban obligados a trabajar para sus amos. El estado no se preocupaba por reglamentar el trabajo, sino para garantizar el orden o proteger la propiedad pública. Los oficios se transmitían de padres a hijos. Las mujeres estaban bajo la autoridad patriarcal de los hombres, no salían de sus casas, cocinaban, limpiaban y tejían la ropa de toda la familia. Es decir para los griegos, solo existía el trabajo manual, porque la actividad intelectual  era patrimonio del ocio y amor al conocimiento.

      Por otra parte, el Imperio Romano   libro muchas batallas para ampliar sus territorios, transformaron los prisioneros de guerra en esclavos, eran ellos quienes realizaban  los trabajos más fuertes y eran considerados propiedad de su dueño. Podían ser esclavos de varias maneras: ser prisioneros de guerra, haber contraído deudas o haber nacido de otro esclavo. Los esclavos domésticos solían llevar cuentas y acompañar a su ama a comprar, los esclavos negros el trabajo de sol a sol, por su piel resistente.

       Los esclavos eran vendidos en subastas públicas, los emperadores vencedores se veían beneficiados porque en las batallas morían muchos trabajadores, los cuales eran reemplazados por los vencidos. La esclavitud, dejo mucho desanimo, temor e inseguridad de las poblaciones en riesgo de ser convertidos en esclavos, pues el trabajo forzado y en malas condiciones de millones de personas provocó muchas muertes y esto disminución de la población.

      El trabajo durante esta época se caracterizo porque los romanos no despreciaban el trabajo sino a quienes se veían obligados a trabajar para sobrevivir. La meta de quien trabajaba era siempre reunir un patrimonio para conquistar el ocio, las altas esferas consideraban el trabajo como indigno de los hombres libres. Los comerciantes eran señalados por tener todos los vicios imaginables. Para la clase media el trabajo era su orgullo, aunque siendo minoría, era más rica que la plebe y a veces más rica que los notables.

      Respecto a las clases sociales, la clase media estaba compuesta por libertos que habían encontrado en la producción y el comercio una forma de empezar una dinastía familiar: panaderos, carniceros, vendedores de vino o de ropa. Por su parte la plebe romana estaba compuesta por: quienes viven el día a día, los tenderos y comerciantes pobres sin capital y los ricos comerciantes con un capital ahorrado para comprar al por mayor, sin ser mayorista.

     Otro aspecto resaltante, era que las mujeres podían trabajar en los campos, cuidar el ganado, y en los sitios urbanizados, ejercían diferentes oficios manuales y podían colaborar a sus maridos en sus negocios. Además, realizaban sus labores domesticas,  como elaborar la comida, el abastecer alimentos, la crianza de su descendencia, el cuidado de la casa, entre otros. Además ejercíanotras ocupaciones vinculadas al mundo del ocio, como la copa, la mima, las bailarinas, las prostitutas y las esclavas, su existencia estaba predefinida por el rol que debía cumplir en la sociedad.

El TRABAJO EN LA EDAD MEDIA

     Después de la caída del imperio romano, la Europa Occidental quedo convertida en una sociedad rural,  la tierra en su mayoría paso  a los señores feudales y el resto quedo en manos de campesinos libres. La tierra era trabajada por los siervos (no poseían tierras) quienes  estaban sometidos a sus amos:

• El siervo no podía abandonar el feudo.
• Pertenecían al patrimonio del señor feudal.
• Tenían que dar parte de su producción y trabajar un número de días las tierras del señor.
• A cambio obtenían protección y manutención por parte del señor.

      A finales del siglo XI los grandes avances en la agricultura fueron producto de una ampliación importante de la superficie de los terrenos cultivables generaron un excedente de producción en el campo. De igual manera,  se dio una importante expansión del comercio. A la par de estos procesos, las relaciones sociales comenzaron a cambiar y la servidumbre se relajó. Dicha relación trajo como consecuencia el endeudamiento de los campesinos y los artesanos con los burgueses, hasta convertirse en asalariados.

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