El Dia Mas Glorioso De Mexico, Renuncia De Porfirio Diaz A La Presidencia

‘’El día mas glorioso de México’’

El 25 de mayo de 1911, Porfirio Díaz renunció a la presidencia. El 31 de mayo de 1911, el ex presidente abordó el barco ‘’Ipiranga’’ rumbo a París, donde murió exiliado.

La mañana del 24 de mayo 1911, el Diario del Hogar anunciaba que ese mismo día el general Porfirio Díaz iba a entregar su renuncia a la Presidencia de la República. Terminaba la pax porfiriana. Aunque se trataba de un rumor no confirmado, una multitud abandonó sus ocupaciones y se agolpó frente a la Cámara de Diputados. El porfiriato, efectivamente, parecía haber terminado. La Cámara de Diputados no tenía noticia alguna de la supuesta renuncia del dictador; cuando los legisladores discutían, dos gritos dominaron la parte alta del recinto: ‘’¡Renuncia, renuncia!’’ y ‘’¡Viva Madero!’’.

Algo parecido a la locura de desató. Una marejada humana se lanzó hacia la casa de Porfirio Díaz. Fue tal el número de personas que se unió al tumulto que la calle parecía una olla exprés a punto de estallar. Alertada por los gritos, una compañía del batallón de zapatadores avanzó con las armas terciadas y choco violentamente contra los manifestadores. La muchedumbre secuestraba tranvías y recorría la ciudad gritando: ‘’¡Viva Madero!’’. Desde todos los puntos del centro surgían reportes de muertos y heridos. Nada parecía detener, sin embargo, la furia desatada; hasta las 10 de la noche, en que un aguacero dispersó a la gente.

Si Porfirio Díaz dudaba aún de la conveniencia de entregar su renuncia, los acontecimientos del 24 de mayo terminaron por convencerlo. El jueves 25, a las tres de la tarde, puso en manos de la Cámara de Diputados ‘’ el poder que le había confiado el pueblo’’. En el recinto legislativo, en medio de un silencio solemne, el diputado Villada y Cardoso dió lectura al documento de renuncia de Porfirio Díaz. Las comisiones de Puntos Constitucionales y Gobernación admitieron la renuncia. Se pidió una manifestación de simpatía hacia el general. ‘’¡Viva Díaz!’’ gritaron los diputados. La ciudad que un día antes había pagado su tributo de sangre, se entregó a la fiesta.

De acuerdo con las notas disponibles, aquello fue como el día del triunfo de la independencia, como el día ‘’en que por tercera vez nació México’’.

En la madrugada del 26 de mayo, el general y su esposa, Carmen Romero Rubio, abordaron un mercedes negro. Un tren especial lo aguardaba en la estación del Ferrocarril Interoceánico. Don Porfirio se despidió del reducido grupo de amigos y subordinados que lo acompañaban y abordó el tren con aire estoico. De ese modo comenzaba el éxodo de los Científicos. ‘’Es el día mas glorioso de México’’.

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