Ensayo Sobre La Revolucion Francesa
Enviado por • 12 de Mayo de 2014 • 2.789 Palabras (12 Páginas) • 2.233 Visitas
Una revolución, es un cambio social fundamental en la estructura de poder, puede ser consecuencia de un fracaso de los dirigentes: de excesos, de injusticias, miseria o derrota militar. En 1788, Francia era el estado más poderoso de Europa tenía veintiséis millones de habitantes, acababa de ganar la guerra de América; su prestigio militar y naval no habían sido tan grande jamás, sin embargo Francia rebosaba descontento, y su gobierno había perdido toda autoridad, porque la antigua constitución ya no funcionaba.
Esta revolución significó el triunfo de un pueblo pobre, oprimido y cansado de las injusticias, sobre los privilegios de la nobleza feudal y del estado absolutista, la economía de ese país estaba completamente arruinada los nobles consecuentemente sufrían dramas financieros, el clero no recibía diezmo por parte del pueblo, la burguesía quería acceder cargos públicos, los campesinos estaban cansados del poder feudal.
La sociedad estaba compuesta por tres sectores sociales llamados estados: la iglesia, la nobleza, la burguesía. En 1778, el rey Luis XVI se vio obligado a convocar a la cámara de representantes de la nación, conocida como los Estados Generales, este órgano se convirtió en asamblea constituyente. El 14 de julio de 1789 el pueblo parisino asaltó La Bastilla y retuvo a la familia real en el palacio de las Tullerías. Una vez tomada la Bastilla, el gobernador y otros soldados fueron asesinados cuando ya estaban indefensos. 14 de julio de 1789 había sido, pues, la primera de las grandes “jornadas revolucionarias”.
La revolución se fue extendiendo por ciudades y pueblos, creándose nuevos ayuntamientos que no reconocían otra autoridad que la asamblea nacional constituyente, la insurrección motivada por el descontento popular siguió extendiéndose por toda Francia. La noche del 4 de agosto de 1789, la asamblea constituyente, actuando detrás de los nuevos acontecimientos, suprimió por ley las servidumbres personales (abolición del feudalismo), los diezmos y las justicias señoriales, instaurando la igualdad ante el impuesto, ante penas y en el acceso a cargos públicos.
La revolución se enfrentó duramente con la iglesia católica que pasó a depender del Estado. En 1790 se eliminó la autoridad de la iglesia de imponer impuestos sobre las cosechas, se eliminaron también los privilegios del clero y se confiscaron sus bienes, bajo el antiguo régimen la iglesia era el mayor terrateniente del país, más tarde se promulgó una legislación que convirtió al clero en empleados del estado.
La asamblea nacional constituyente no era sólo un órgano legislativo sino la encargada de redactar una nueva constitución. Luis juró obediencia la nueva constitución francesa en julio de 1790, pero siguió conspirando en contra del gobierno revolucionario; la asamblea ignoraba la necesidad de un reglamento; toleraba el desorden; se exponía a la presión de las tribunas; impedía al rey tomar sus ministros de la asamblea.
El 3 de septiembre de 1791, fue aprobada la primera constitución de la historia de Francia, una nueva organización judicial dio características temporales a todos los magistrados y total independencia de la corona. Al rey sólo le quedó el poder ejecutivo y el derecho de vetar las leyes aprobadas por la asamblea legislativa. La asamblea, por su parte, eliminó todas las barreras comerciales y suprimió las antiguas corporaciones mercantiles y los gremios; en adelante, los individuos que quisieran desarrollar prácticas comerciales necesitarían una licencia, y se abolió el derecho a la huelga.
Por primera vez en la historia de la humanidad se definían por escrito los derechos y obligaciones de gobernantes y gobernados, y se organizaba el poder del estado. En Francia se conservó la monarquía que pasó de absolutista a parlamentaria, aparece una división de poderes: ejecutivo, legislativo y judicial. Bajo la constitución de 1791, Francia funcionaría como una monarquía constitucional; el rey tenía que compartir su poder con la asamblea, pero todavía mantenía el poder de veto y la potestad de elegir a sus ministros.
Mientras tanto, Los ejércitos austriacos obtuvieron varias victorias en los Países Bajos austriacos gracias a ciertos errores del alto mando francés, formado mayoritariamente por monárquicos. Dos potencias absolutistas europeas, Austria y Prusia, se dispusieron a invadir la Francia revolucionaria, lo que hizo que el pueblo francés se convirtiera en un ejército nacional, dispuesto a defender y a difundir el nuevo orden revolucionario por toda Europa.
La Asamblea Legislativa declaró el estado de excepción el 11 de julio, después de que Cerdeña y Prusia se unieran a la guerra contra Francia, se enviaron fuerzas de reserva para aliviar la difícil situación en el frente, y se solicitaron voluntarios de todo el país en la capital. Durante la guerra, la libertad de expresión permitió que el pueblo manifestase su hostilidad hacia la reina María Antonieta y contra y contra Luis XVI, que casi siempre se negaba a firmar leyes propuestas por la asamblea legislativa.
El 10 de agosto de 1792, las masas asaltaron el Palacio de las Tullerías, y la Asamblea Legislativa suspendió las funciones constitucionales del rey, aumentaba la tensión política y social en Francia, así como la amenaza militar de las potencias europeas. El nuevo parlamento elegido ese año abolió la monarquía y proclamó la república, creó también un nuevo calendario, según el cual el año 1792 se convertiría en el año 1 de su nueva era.
El gobierno pasó a depender de la comuna insurreccional, cuando la comuna envió grupos de sicarios a las prisiones, asesinaron a 1.400 víctimas, y pidió a otras ciudades de Francia que hicieran lo mismo, la asamblea no opuso resistencia. Esta situación persistió hasta el 20 de septiembre de 1792, en que se creó un nuevo cuerpo legislativo denominado “Convención”, que de hecho se convirtió en el nuevo gobierno de Francia.
El Rey había sido asesinado el 21 de enero de 1793 en la guillotina, fue condenado a muerte por 387 votos a favor frente a 334 votos en contra, se redactó en 1793 una nueva declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, y una nueva constitución de tipo democrático que reconocía el sufragio universal, el comité de salvación pública cayó bajo el mando de Maximilien Robespierre, con él pretendía erradicar la contrarrevolución, imponer el orden, ganar la guerra contra el Estado austriaco y redactar una constitución que nunca se promulgó. El reinado del terror gobernó durante 3 años desde el año 1792 hasta el año 1795 denominado así por los jacobinos.
El 27 de julio de 1794, ocurrió otra revuelta popular contra Robespierre, apoyada por los moderados que veían peligroso el trayecto de la revolución, cada vez más
...