Epidemias Del Siglo Xx

LAS EPIDEMIAS EN EL SIGLO XX Y XXI

Un breve e incompleto repaso de distintas situaciones sanitarias revela que se está muy lejos de controlar las epidemias aunque con los avances científicos y sociales se han mitigado, en parte, las consecuencias

Los avances logrados en salubridad, medicina preventiva, terapéutica, inmunógenos, atención médica y diagnóstico, entre otros, como nunca en la historia de la medicina, no han podido sin embargo librar a la humanidad de las epidemias y el impacto que producen en la comunidad, no solo relacionados con la salud, sino especialmente, con los perfiles socioculturales y económicos.

Existe una asociación muy marcada entre las epidemias ocurridas en los últimos cien años y las situaciones de catástrofe social como guerras, hambru-nas, desastres naturales o modificaciones ambientales, pero a la vez aparecen nuevas situaciones relacionadas con la invasión del hombre a ecosistemas “exóticos”, debido a la expansión territorial extracontinental realizada por las potencias marítimas, proceso comenzado anteriormente, pero que alcanzó pleno desarrollo entre los siglos XIX y XX. En este mismo sentido, se inscribe la introducción humana en ecosistemas desconocidos, pero por motivos comerciales: explotación agrícola y deforesta-ción, emprendimientos hidráulicos y viales, etc.

Los fenómenos sociales y las epidemias han presentado una relación dialéctica, en la cual no es fácil precisar quién condicionó a quien en determinados hechos históricos. Esto fue válido en la Antigüedad, la Edad Media o el Renacimiento, pero a medida que avanzamos en nuestros tiempos, los factores so-cioculturales adquirieron mayor fuerza, de manera que se posicionaron como los condicionantes de la expresión de las mismas. La pandemia de VIH / sida y de dengue son posiblemente los ejemplos más claros.

Un breve e incompleto repaso de distintas situaciones sanitarias nos revela qué estamos lejos de controlarlas. Con los avances en el campo científico y social, se han mitigado, en parte, las consecuencias, pero la sensación en la comunidad sigue teniendo el mismo componente de temor e impotencia de los siglos pasados.

La sola posibilidad de producirse una pandemia por virus influenza ha desnudado esos temores; produjo reacciones sociales desmedidas y en algunos casos, mostró las conductas más perversas y menos solidarias del ser humano. De producirse una situación real, ¿la sociedad podría tener patrones de comportamiento como en el siglo XIV? No existe una respuesta concluyente. Los grandes avances científicos y técnicos y en general en todo el campo del conocimiento, también fueron acompañados por el Holocausto, los bombardeos a poblaciones civiles, la tortura y tantas otras formas de denigración humana.

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