FIESTAS PATRONALES DE PARIAGUAN
Enviado por 13753327 • 25 de Junio de 2013 • 1.947 Palabras (8 Páginas) • 1.025 Visitas
FIESTAS PATRONALES DE PARIAGUAN .
Alegría, música, luces y colores adornan los espacios de nuestro pueblo, cuando el 14 de Septiembre y los días previos, todos, chicos y grandes confundidos en una loca algarabía celebran el día de nuestro santo patrono, El Cristo Crucificado.
Desde tiempos muy remotos, el 14 de Septiembre, ha sido para Pariaguan un día muy especial, donde la cordialidad de todo un pueblo se pone de manifiesto para recibir a los hijos que vuelven y a los amigos que la visitan. En el día de la gran fiesta, donde todos acuden a adorar al redentor del mundo.
En largo correr del tiempo, la tradición se ha conservado. La elección de la reina de las fiestas, escogida entre ramilletes de hermosas muchachas. Palo encebado, piñatas, juegos populares en los barrios, baile de gala y bailes populares, toros coleados y carreras de caballos en el hipódromo.
Todo un conjunto de sanas y alegres tradiciones que el pueblo de Pariaguân brinda a sus visitantes.
Manga de coleo Miguel Alfonso Figuera
En el año 1975, un grupo de entusiastas jóvenes, amante del regio deporte del coleo, se dieron a la tarea de construir una manga de coleo en los terrenos adyacentes al hipódromo y más tarde en el año 1980, con la ayuda de Corpoven, el consejo municipal y la asociación de coleadores. Hoy es sitio de grandes tardes deportivas, donde nuestra juventud despliega dotes de arte y valor. La población disfruta del recio espectáculo de los toros coleados.
Carnavales de Pariaguán
Es una de las festividades culturales más importantes, Pariaguán siempre festivo a sus viejas tradiciones, años tras años, en una marca de sana alegría, rinde culto al Dios Momo, en sus fiestas carnavalescas. El pueblo se lanza a las calles en una interminable y loca algarabía. Entre música y colores, bellas carrozas, Elección y coronación de la reina del carnaval, y alegres comparsas adornan el Pariaguán del ayer y el de hoy. El entusiasmo y el trabajo de los grupos vecinales de los distintos sectores de nuestro pueblo hacen posible un gran espectáculo, que Pariaguán entusiasmado, con mucho entusiasmo y alegría al ritmo del Calipso y ritmos tropicales disfruta a plenitud
En nuestro querido Pariaguán, son muchas las viejas costumbres arraigadas en lo más profundo del corazón pueblerino.
Lamentablemente, muchas han desaparecido, porque la vorágine del modernismo las sepulto. Aquellas maravillosas “Misas de Aguinaldo de Madrugada”, con sus juegos, sus paseos y empanadas ya nunca volverán. El “Pares o Nones” con caramelos, se quedó en el olvido. Los “Velorios de Cruz” que Doña Margarita Ibedaca mantuvo vivo en el alma popular, lamentablemente se fue con la infinita ausencia, de quien fue la fuente de su conservación.
Felizmente todavía quedan seres excepcionales, que con trabajo, sacrificio, abnegación y cariño, dan a su pueblo, la dicha de disfrutar algunas de sus viejas tradiciones.
Entre las tradiciones de nuestro pueblo que aún están podemos mencionar:
• Caballitos de San Juan: vieja tradición que todos los 24 de Junio, día de San Juan, cuando los muchachos, arrogantes jinetes, acudían a las puertas de todos los Juanes del pueblo, para darles con el taconeo de sus caballos, el feliz día onomástico y recibir el mediecito o caramelo que con cariño le brindaba el homenajeado. Esta tradición se fue quedando en el tiempo. Pero ese inmenso corazón Pariaguanense, lo rescató, adaptándolo a nuestro tiempo en “Campeonato de Caballitos de San Juan”. Donde nuestros niños desde sus escuelas y barriadas, formando equipos, acuden no a buscar mediecitos ni caramelos, sino la victoria para su equipo y el orgullo de sentirse el mejor jinete de Caballitos de San Juan.
• El Judas de Semana Santa: domingo de resurrección. Un grito cruza las calle del pueblo “esta tarde queman a Judas”. Una pregunta se anida en la curiosidad de la gente “a quién se parecerá este año, el Judas”. Así año tras años, la tarde del domingo de Resurrección, el pueblo todo se reúne alrededor del árbol donde se quema a Judas. Allí entre risas y gritos, se oye el famoso testamento, donde deja todas sus pertenencias a sus grandes amigos del pueblo, muchas de ellas con buena intención. Cada año el Judas se asemeja a alguna persona conocida que por algún motivo se hizo acreedor de tan alto honor, gracias a “ese inmenso corazón Pariaguanense”, aún podemos oír el grito “esta tarde queman a Judas”.
• Los Locos del Día de los Inocentes: el 28 de Diciembre, día de los Santos Inocentes, desde los más apartados barrios, surgen comparsas de alegres y disparatados disfraces. Conforman estos, un grupo de danzantes “Locos”, que por las calles, frente a las casas bailan y reciben como premio a sus bailes, dinero que más tarde cambian por ron y comida, para brindar en una gran noche de parranda. Esta tradición aún se conserva por el espíritu festivo de nuestra gente de los barrios. Son disfraces disparatados, con máscaras elaboradas por ellos mismos, mujeres disfrazadas de hombres y hombres disfrazados de mujeres.
• El Nacimiento de Jesús: desde finales de Noviembre, gracias a las maravillosas manos de “ese inmenso corazón Pariaguanense” se empieza a colocar el tradicional nacimiento. Hace mucho tiempo lo colocaban en la Plazoleta que queda frente a la Plaza Miranda, en la Calle Soublette, en los actuales momentos es colocado frente al I.U.T.J.A.A., durante todo el mes de Diciembre, el pueblo va a contemplar las hermosas figuras en yeso, que las prodigiosas manos de Luisa Amelia, moldea con cariño para su pueblo. El pesebre, el Niño, la Virgen, San José, la Mula, el Buey, los Pastores, los Reyes Magos, sus camellos forman un hermoso conjunto, que es parte de nuestras tradiciones que no mueren.
• Carnavales: Pariaguán siempre festivo a sus viejas tradiciones, años tras años, en una marca de sana alegría, rinde culto al Dios Momo, en sus fiestas carnavalescas. El pueblo se lanza a las calles en una interminable y loca algarabía. Entre música y colores, bellas carrozas
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