Impacto de la Sociedad de Naciones en los Conflictos Bélicos

Tras haber vivido un periodo bélico que quedó marcado en la memoria de todo el planeta, pero sobre todo en la memoria, en la destrucción y en el resentimiento de un continente entero, Europa, se decide crear un organismo conjunto que tenga como propósito mantener la paz mundial y evitar caer de nuevo en una situación como la vivida de 1914 a 1918 con la Primera Guerra Mundial.

Dicho organismo nacería el 28 de Junio de 1919 con la firma del Tratado de Versalles, el cual buscaba instituir las bases de paz que tanto necesitaban las Naciones alrededor del Globo Terráqueo, así como también buscaría restaurar las Relaciones Internacionales mediante principios de seguridad, arbitraje, cooperación y paz; la Sociedad de Naciones.

Entre otros detalles, dicho organismo contemplaba el respeto a la autonomía e integridad de los Estados Miembros y así mismo, buscaría la solución de conflictos de una forma pacífica, ejerciendo la función de mediador y conciliador en los posibles enfrentamientos que pudieran generarse con el tiempo. Por otro lado, las sanciones que imponía eran por lo regular incumplidas, esto, debido a que no había forma de controlar a los Estados.

Lo anterior, era en su mayoría debido a que las sanciones que tendrían que ser impuestas se dictaban mediante la unanimidad, lo cual en un organismo con más de 50 Naciones era imposible puesto que existía una diversidad de opiniones, pero sobre todo, de intereses por parte de los Estados y por tanto, la confianza en la Sociedad de Naciones fue disolviéndose.

La gota que termina derramando el vaso es el inicio de la Segunda Guerra Mundial, hecho que termina demostrando todos los puntos mencionados con anterioridad y mostrando al mundo que la autoridad de la Sociedad de Naciones era inexistente, ante ello, fue disuelta en abril de 1946 y permite dar el comienzo a su sucesora, la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Si bien, la Sociedad de Naciones antes de desaparecer logró manejar algunos pequeños conflictos mediante el arbitraje internacional, si una potencia se involucraba en el mismo, le era imposible dar una resolución.

A continuación, se mencionan algunos conflictos en los que se demuestra la falta de autoridad por parte de dicho organismo al tratar de solucionar algunos conflictos bélicos sucedidos en la época en que estuvo vigente.

1. Incidente de Corfú: Grecia e Italia se enfrentan a causa del asesinato del General Enrico Tellini; Italia exigía reparaciones y se apropia de la Isla de Corfú. En inicio, la Sociedad de Naciones se puso a favor de Grecia, Estado afectado, pero al comenzar a ser presionada por diferentes Naciones Miembro y por la misma Italia que fungía como potencia, accede a cobrar reparaciones a Grecia y por ende, la isla quedó en manos italianas.
2. Japón invade Manchuria: Japón ataca a China por un supuesto bombardeo a propiedades férreas japonesas, hecho que es utilizado como pretexto para invadir la región china de Manchuria, sin embargo, es notorio que se buscó un simple motivo para seguir extendiendo su territorio a tierras continentales y no quedar limitados a su isla. Ante las sanciones de la Sociedad de Naciones, los japoneses resuelven el problema retirándose del organismo y quedándose con el territorio chino.

Tras analizar de forma concreta este par de conflictos en los que la Sociedad de Naciones fue incapaz de brindar una solución satisfactoria queda más que entendido el motivo por el que fue disuelta, ya que mostró una falta de autoridad enorme y fue incapaz de evitar una Segunda Guerra Mundial que terminó acabando con millones de muertes y de nuevo, un continente europeo sumido en la miseria tras finalizar el conflicto.

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