Industria

En base a los datos de la Matriz Insumo‐Producto del año 2007, el 72,5% de la producción de las industrias se destina al mercado nacional y el restante 27,5% a mercados externos. Bolivia no ha generado redes industriales entre países y empresas, debido a su dimensión al mercado interno y bajo nivel de desarrollo, como se puede observar el sector manufacturero ha sufrido cambios en distintos ámbitos que su caracterización no es como en años anteriores.

Entre algunos obstáculos que sufre el sector: se depende de importaciones de otros países, que muchos productos son internados de contrabando quitando posibilidades a los producidos en nuestro país, a lo que se suma la importación de ropa usada provocando situaciones de conflicto e incluso el cierre de empresas, que actualmente afecta a muchas personas los cuales cuentan con esta fuente de trabajo, viendo como ejemplo que las empresas del sector textil tienen la característica de ser los mayores generadores de empleo permanente, empleo que requiere de recursos humanos capacitados.

En el sector manufacturero boliviano debido a sus limitaciones del mercado local, la falta de tecnología, apoyo técnico, de capacitación, son las consecuencias de su lento crecimiento, al igual que la poca existencia de capitales que inviertan en estos sectores no ayuda a que estos puedan emerger dándole posibilidades a nuestro país de mejora en cuanto a productos producidos por bolivianos.

No se puede dejar de lado un aspecto muy importante ya que no solo se puede ver las deficiencias del sector, sino que algunas empresas para fortalecer su producción optan por la vía de la exportación de sus productos, al igual que apostaron por el uso de modernas tecnologías, de esta forma permanecen en el mercado.

Por lo cual es importante que las mejoras en cuanto a tecnología que muestra la calidad de los productos deban ser apoyadas no solo por los que invierten en las empresas sino por los propios bolivianos, valorando cada producto y adquiriéndolo para alcanzar el desarrollo industrial.

Asimismo, se busca que los trabajadores perciban una remuneración digna, resultante de su trabajo productivo, que permite el bienestar de sus familias y aporta a su país. Así mismo en la perspectiva del mediano y largo plazo, el cambio estructural para el sector consiste en la transformación tecnológica de cada empresa, al igual que el apoyo en cuanto a inversiones que crean en multiplicar las ganancias, diversificación productiva que permitan el incremento del valor a las materias primas nacionales, valorizando lo que podemos decir “Hecho en Bolivia”.

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