LA REBELION JUVENIL DE LOS 60

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Introducción:

Son varios los hechos históricos que desencadenaron las revoluciones estudiantiles en la década de los 60. Para el claro entendimiento de estas movilizaciones se necesita considerar previos sucesos históricos de la primera mitad del siglo xx. Así también se debe considerar el gran desarrollo de los medios de comunicación y la televisión. Respecto de estos, los jóvenes de los años sesenta, fueron la primera generación que viviría, a través de una oleada de imágenes y sonido, la presencia física y cotidiana de la totalidad del mundo. El principal catalizador de su despertar revolucionario fueron los desastres y la inmoralidad de la guerra del Vietnam. Aunque también cabe destacar la importancia de otros hechos, tales como las imágenes de los jóvenes plantando cara a los tanques rusos que entraron en Praga; Carlos y Smith levantando sus puños enguantados de negro en el pódium de los Juegos Olímpicos de México (célebre señal de protesta de los derechos civiles negros en Estados Unidos), la guerra de indochina, el rostro del Che Guevara, etc.; todas estas imágenes provocarían reacciones, indignaciones, adhesiones violentas que conmoverían a muchos jóvenes, cualquiera que fuese su nacionalidad.

Movilizaciones a nivel mundial

La contestación juvenil adoptaría distintas formas de protesta en latitudes geográficas diferentes pero la idea que la juventud constituía una clase social dispuesta a la transformación y al cambio, sería común en cada una de ellas. Protestas que podemos encontrar en campus universitarios, desde Berkeley, en el norte de California, hasta la Sorbona en París y la Universidad Libre de Berlín, desde Praga hasta la plaza mexicana de las Tres Comunas, desde Londres y Holanda hasta las facultades de Barcelona y Madrid.

Mayo Francés:

Fue un movimiento profundamente popular y pacífico que recorrió París y las principales ciudades de provincias. Liderado por jóvenes llenos de esperanza que se mostraban sin violencia desmesurada o irreparable. En realidad, la juventud se unió al sector obrero, que se manifestaba a favor de un aumento de sueldo y contra la reducción de la plantilla horaria. En 1968, dos millones de trabajadores cobraban el SMIG (Salaire minimum interprofessionnel garanti) o salario mínimo interprofesional y se sentían excluidos de la prosperidad. Los sueldos reales empezaban a bajar y crecía la preocupación por las condiciones de trabajo. Esto, despertaría la solidaridad en los estudiantes que se consideraron en aquella época una fuerza anticapitalista y potencialmente aliada del proletariado para acabar con cierta clase de autoritarismo, denunciar las castas del poder y del saber, para modificar la condición de las mujeres, enfermos e inmigrantes. [pic 3]

El momento de auge de la protesta se da en la noche del 10 de mayo, conocida como "la noche de las barricadas". En ella más de treinta mil estudiantes acuden a las barricadas del Barrio Latino. Las autoridades deciden no liberar a los detenidos. La policía disuelve las barricadas por la fuerza, produciéndose los más duros enfrentamientos de todo el mes de mayo con cientos de heridos. Al día siguiente, carros blindados se desplegaron por toda la capital francesa. En cuanto a los obreros, convocarían una huelga general para el lunes 13 de mayo. La manifestación de ese día congregó a 200.000 personas, mientras 9 millones de trabajadores en toda Francia seguían la convocatoria de huelga.

Ambos sectores criticaban la crisis general de los valores del mundo burgués .Como por ejemplo, valores tradicionales de la libre empresa, el individualismo, etc., hasta los nuevos mitos de la abundancia y la ideología neocapitalista del “desarrollo”. También lograron tomar conciencia de la existencia y la formación del proceso de proletarización del profesional y del intelectual. Es decir, que preparaban a los estudiantes no para una salida de desarrollo intelectual, si no que buscaban prepararlos para la actividad industrial (que podría ser docente o administrativa pero tendría un similar a los trabajadores manuales).

Protestas en Alemania: 

Encabezadas por el anarquista Rudy Dutschke, tuvieron una diferencia con respecto a las que se registraron en el resto del mundo. Se caracterizo por una fuerte crítica hacia la autoridad en la mayoría de las instituciones; en donde los padres fueron confrontados y cuestionados por su pasado nazi. Los estudiantes buscaban romper con el silencio que había protegido a muchos cómplices de los nazis durante la posguerra.

La fuerza impulsora más importante dentro de este movimiento era la Unión de Estudiantes Alemanes Socialistas, SDS en sus siglas en alemán. Este grupo formuló las ideas, desarrolló los conceptos y personificó la revuelta. La protesta contra el pasado era definida como antifascismo y éste a su vez se interpretaba como antiimperialismo y anticapitalismo, puesto que se veían las raíces del fascismo en el sistema capitalista.

El filósofo Marcuse, así como la llamada Escuela de Frankfurt, mantuvieron una gran influencia en el movimiento estudiantil alemán y las repercusiones de ese movimiento llegaron a la conformación de grupos radicales.

El Cordobazo:

Fue una protesta obrero-estudiantil, ocurrida el 29 y 30 de Mayo de 1969. Estaban en oposición al régimen dictatorial encabezado por Juan Carlos Onganía. La marcha representaba un rechazo al régimen y a la sensación de injusticia generalizada que repercutía sobre diversos sectores sociales. Algunas de los motivos que impulsaron la movilizacion fueron la devaluación del peso en un 40%, el congelamiento de salarios por 20 meses, la rebaja de los aranceles aduaneros a la importación, y que se permitió la inversión extranjera sobre el petróleo. Además, se acentuó la represión de las actividades culturales e intelectuales: se prohibieron libros, programas de tv y radio y las expresiones de afecto en público. [pic 4]

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