La Constitución y el cambio social en un Estado Moderno
Enviado por barbieruiz01 • 16 de Marzo de 2016 • Tarea • 1.612 Palabras (7 Páginas) • 560 Visitas
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
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SUAyED - Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública
Derecho Constitucional
"La Constitución y el cambio social en un Estado Moderno"
Asesora: María de Jesús Alejandro Quiroz
Alumna: Bárbara Alicia Ruíz Ramírez
Número de cuenta: 4-1501195-6
Grupo: G9121
Oaxaca de Juárez, Oaxaca a 02 de diciembre del 2015.
La Constitución y el cambio social en un Estado Moderno
Comprendemos ya que la Constitución es el fundamento estructural que constituye al Estado Mexicano el cual es la organización política que de manera soberana e independiente gobierna a los estados que lo conforman y, que el Estado Moderno surge por la adaptación de los sentimientos culturales y nacionales de los ciudadanos que conforman el territorio, estos al ser corrompidos o sumergidos en crisis en ciertos momentos, se han obligado a realizar cambios para superar dichos desacuerdo y seguir trabajando para que exista un bienestar social.
Entonces la Constitución como base suprema de las normas de la nación, enriquecidas con la diversidad y unidad en su historia, su ideología y su gran cúmulo de culturas, trabaja continuamente por el desarrollo del Estado y de su gente, de ser la que guíe a los cambios políticos, sociales y culturales necesarios para conseguir la práctica de la democracia en plenitud. Analizando esto, podemos comprender el hecho de que la Constitución como tal no requiere cambios sino la práctica de lo que esta establece o, mejor dicho a los practicantes de la constitucionalidad de la misma, pues el Estado requiere de buenos dirigentes o gobernantes que realicen las adecuaciones necesarias a esta pero siempre pensando en las necesidades que su sociedad demanda y necesita para la convivencia de su día a día que evidentemente evoluciona con el tiempo.
Si bien, con lo anterior no decimos que los gobiernos en general en todos estos años, no haya contribuido ni mejorado el avance de nuestro país, sin embargo es tan notable que en lo referente a lo búsqueda de un sistema jurídico y político que consigan una probidad social, económica, cultural y política funcional y resolutoria para la nación, aún están muy lejos de conseguirlo puesto que la finalidad de la Constitución es conseguir la igualdad social en los aspectos ya mencionados. Hasta este punto, concebimos que la Constitución procura la justicia comprendida en temas políticos, religiosos, culturales, políticos, religiosos, culturales, económicos o sociales se desarrolle en un proceder igualitario, lo que lamentablemente la mayoría de las veces, no se consigue.
Ahora, tomando que la sociedad tiende con el paso de los años a transformar o variar en todos los aspectos que lo llevan a su desarrollo como tal y, para la adaptación del ser al debe ser de forma igualitaria y justa para todos, sustentando sus acciones y aspiraciones en las normas constitucionales, hace evidente la necesidad de reformar y modificar las mismas con forme se va avanzando siempre y cuando, la norma o ley que se quiera modificar este impidiendo que la igualdad social y económica que desean se pueda realizar aunque, mantengo el pensar de que no es la Constitución la que debe cambiarse o modificarse para poder llevar al Estado a un cambio verdadero y positivo, sino más bien, se debe modificar y vigilar a los mandatarios que obstaculizan la realización de lo establecido por acuerdo soberano en la Constitución. Lamentablemente no es siempre así (menos en nuestros tiempos) pues la Constitución sufre constantemente de modificaciones y cambios en su contenido, alterándolo sin hacer un verdadero análisis de, si esos cambios serán útiles para conseguir la verdadera igualdad y justicia que tanto anhelamos la sociedad mexicana,
Repetidamente escuchamos y vemos tantas propuestas, tantas reformas en materias económicas, ecológicas, sociales, de salud y de muchas más que son supuestamente elaboradas por el ejecutivo pensando en el beneficio de la sociedad que conforma el Estado y que son valoras por el Congreso de la Unión y las legislaturas locales para su aprobación e implantación en el sistema que nos rige. Ahora, se supone que los Diputados y Senadores que conforman dicho Congreso y a las legislaturas, son representantes y portavoces de las demandas de sus representados, entonces podríamos estar seguros que lo que estos aprueben será benéfico para el cambio positivo, justo e igualitario para la sociedad, lamentablemente casi nunca es así debido a que estos no cumplen su encomienda social, sino que aprueban y hacen modificaciones que benefician al sector privilegiado que se encuentra en el poder y a sus allegados. Si la Constitución es la esencia pura del querer ser de los ciudadanos, lógicamente su contenido tiene que girar en torno a este y, modificarse si fuese necesario, es aquí donde se requieren de acciones y decisiones políticas vitales de tipo socioeconómicas para el objetivo que venimos citando repetidamente.
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