La Fuerza De La Mujer

Los problemas en Colombia han generado un impacto social, donde se perjudica a la comunidad en general. La guerra que hemos vivido durante años, más de 50 en realidad, nos tiene con los brazos sujetos y la boca cerrada, y en el tiempo en el que la violencia deja un silencio se puede entender que va por un mal camino este país. La situación actual en Colombia ha perjudicado notablemente cada aspecto en la humanidad, por una parte, la mitad del país arrasada por masacres en pueblos enteros y la otra mitad enriquecida por drogas ilícitas. Mientras en las ciudades se incrementa el desplazamiento y la maldad política, en decenas de pueblos la gente muere diariamente por estos sucesos.

El estado colombiano exige desde comienzos del siglo XX, el “uso estructurado e ilimitado de la violencia, la criminalización de la protesta social, el genocidio de los líderes y militantes de las causas democráticas y populares, las mortandad en campos y ciudades a plena luz del día por los sicarios de su engendro paramilitar fascista, y la más absoluta impunidad como refugio de los asesinos.”

Durante este escrito las protagonistas van a ser las mujeres, que han demostrado ser valientes después ser las mayores victimas durante años por el conflicto armado, muchas de ellas cuentan historias dramáticas donde han visto morir a sus hijos, padres, tíos, hermanos y demás familiares, siendo violados sus derechos, muchas veces quedando solas y sin nada para mantenerse seguir su vida en un lugar nuevo, formando otra vez un hogar y una vida que por causa de toda la violencia perdieron.

Todos los elementos de la guerra utilizan el cuerpo de la mujer de muchas formas como fin de guerra, a las mujeres que quedan viudas las pueden vender o cambiar por otras de diferentes pueblos o lugares del país. Adalgiza Charria es una feminista y periodista que trabaja en un grupo con mujeres que han sido víctimas de este conflicto durante años. Lo que buscan estas mujeres es una postura política, acabar con la violencia y poder participar en los procesos de paz para que este drama se termine y puedan tener una vida estable.

Según Eduardo Pinzón en su texto “Política de paz y apertura democrática” la violencia de Colombia siempre ha generado una búsqueda constante e inaccesible en los líderes políticos para encontrar la paz en todo el país, pero para que exista este proceso de paz es necesario olvidar esos odios que han sido heredados y permitir que estos procesos sean equilibrados para cada persona.

En Colombia el movimiento feminista lucha cada día por la igualdad de género y aunque desde 1954 la mujer tiene el derecho a elegir y ser elegida, faltan bastantes avances en los derechos que deben tener para mejorar y tener igualdad de condiciones en el mundo entero.

En los últimos tiempos Colombia ha presentado a nivel mundial una de las situaciones más críticas en derechos humanos e humanitarios

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