La Mujer En La Revolucion (adelitas)

La mujer en la Revolución

A través de la historia, se hace referencia hacia los logros, triunfos y fracasos de personajes clave durante estos eventos.

Como la Coronela Carmen Amelia Robles Ávila, nacida en Xocchipala, Guerrero. Quien lucho contra los efectivos de la huertistas, sobresaliendo por su uso de las armas y del caballo. Pero su condición de mujer en muchos casos no fue del todo aprobada por lo que recurrió a las vestimentas de varones y a llamarse "El Coronel Robles" como una identidad masculina.

Así fue como durante la Revolución Mexicana, en los años 1910 y 1920, hubo un gran número de mujeres que ayudaron como soldados, revolucionarios y también se lanzaron a la lucha.

Muchas de las soldadas habían empezado siendo soldaderas o también conocidas como “adelitas” que luego decidieron dar un paso más adelante tanto en la lucha como para ellas mismas.

Las tareas por las que las adelitas eran más reconocidas eran de proveer a los soldados o rebeldes, (por lo general eran sus esposos, amantes o padres,) con el alimento que necesitaban, ropa limpia, el cuidado necesario en caso de que fuera herido, todas tareas o servicios que la milicia no proveía.

Llevaban a cabo misiones como las de espiar al enemigo y contrabandear armas de los Estados Unidos, entre otras cosas. Y para poder conseguir alimento a veces era necesario que saquearan hogares o negocios, pues eran tiempos en los que conseguir sustento no era tan fácil.

Como podemos ver, las adelitas tenían más responsabilidades que los hombres, (quienes sólo se dedicaban a luchar con las armas en los lugares donde se les mandaba), pero aun así las adelitas no recibían los tratamientos o reconocimiento.

Y así es como su pobreza, sumisión y sufrimientos; es hoy en día, inspiración de nuestras niñas, que en las escuelas se transforman en adelitas por un día para recordar el inicio de la gesta revolucionaria de 1910.

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