La Vuelta Al Mundo En 3 Caballos

Había una vez un niño llamado Miguel el cual tenía tres caballos el primero se llamaba Dulcineo era de tercio pelo rojo, con un crin de estambre amarillo y se lo había regalado su tía abuela, como Dulcineo estaba relleno de arena Miguel lo podía poder de diferentes posiciones por las noches Miguel y Dulcineo dormían juntos y hasta soñaban los mismos sueños y cuando se despertaban recordaban las mismas cosas y eran muy lindas.

El segundo caballo se llamaba Roblocho se lo regalo su abuelo Guillermo este caballo era de madera como el era el mejor carpintero del pueblo y como Guillermo era viejo ya la gente no le encarga muchos muebles, entonces se dedico hacer juguetes de madera, el desde hace tiempo quería hacerle un caballito a su nieto y dijo tu serás un caballo fuerte y valiente, Roblocho era de veras resistente por mucho que correteara y por muchas batallas nunca se dañaba. Roblocho de noche dormía con los ojos medio abiertos por si acaso Miguel y Dulcineo salían a trotar en algún sueno.

El ultimo caballo se llamaba Versalles era el caballo mas hermoso que aparecía en un cuento, su pintora nadie la conocía desde que diseño a Versalles se hizo famosa y se mudo a Paris a dibujar caballos para reyes, príncipes, etc. Miguel conoció a Versalles cuando salió con su mama a una librería el libro estaba en exhibición y el libro tenia forma de caballo; este caballo le guiño el ojo y Miguel supo que tenia que ser para el y quiso el caballo metió la mano en el bolsillo y tenia exactamente el dinero que costaba el libro y entro a comprarlo. Versalles todas las noches ponía hojas muy lindas para entretener a Miguel y a la vez a Roblocho y Dulcineo escuchaban y observaban.

Miguel ya iba creciendo y ya no jugaba con ellos como antes a Roblocho le hacia una corta cabalgata y ya no habría tanto el libro en donde aparecía Versalles y bajito le decía a Versalles cuéntame una linda historia pero un día le dijo que agregara una historia de amor, entonces los caballos sabían que Miguel tenia novia y los caballos querían ver a la muchacha y ellos sabían que iban a ser presentados.

Dulcineo se compro un champo especial para el crin de estambre amarillo, Roblocho se puso a ser bastantes cabalgatas y a saltar obstáculos y Versalles limpio el polvo que tenia en el libro para que se note el color del pelambre. Hasta que llego el día de la presentación primero fue en la sala y los caballos no estuvieron presentes entonces, Miguel le iba a enseñar su habitación los caballos corrieron a ponerse en sus puestos Dulcineo cayo sobre Roblocho en una posición enredadera y Versalles no los logra separar a tiempo, Miguel tocia para que no se escuche el alboroto que hacían sus juguetes hasta que llegaron al cuarto y Miguel dijo estos son mis caballos y se los mostro uno por uno.

¡Que tierno dijo cuando se acaricio la mejilla con el terciopelo de Dulcineo!. ¡Que fuerte dijo cuando probo la firmeza de Roblocho!. Y cuando Miguel le enseno a Versalles dijo ¡Que lindo, que trote tiene!. Al finalizar el verano Miguel les anuncio que partía para la capital para poder realizar sus estudios en la universidad los caballos se pusieron tristes porque nunca se habían separado de su dueño.

Esta bien eres un hombre y debes probar tus fuerzas para la vida dijo Roblocho, estudia mucho le dijo Versalles y Dulcineo le quiso decir a Miguel que nunca los olvidara pero el hocico se le enrojeció y los ojos se le humedecieron y disimulo su emoción; y dijo creo que me va a dar catarro y Miguel dijo nunca los olvidare.

Llego el otoño los arboles se pusieron desnudos y las aves que antes se posaban a cantar ahora ya no posan tantas aves y cantan una canción triste. Todas las tardes en el calorcillo del cuarto tomaban café con galletas y mantequilla los caballitos. Un día cuando ya faltaba poco para que llegara Miguel los padres se iban a mudar de casa primero empacaron los muebles y las demás cosas grandes se olvidaron de la caja que estaban los caballitos pasaban horas y nadie beca a los caballos, llego un gato callejero en busca de comida olfateo a Roblocho, Versalles y Dulcineo, entonces el gato dijo que hacen aquí los caballitos ellos dijeron esperando que nos recojan, el gato pregunto ¿Quiénes a nuestros dueños dijeron los caballitos? El gato se iba alejando y les dijo procuren que no se demoren porque va a pasar el carro de la basura a las 9:30, paso un señor en un triciclo todo sucio con una capa de agua desgarrada y una barba negra el señor vio a los caballos y se los llevo pasaron hasta la medianoche en la calle los caballos; el señor dijo ya a casita llegaron los caballos entraron aun barrio donde vivían los ricos, el señor se saco la barba, se lavo la cara y se fueron a dormir, amaneció el señor bajo bien vestido y perfumado los trillizos del señor también bajaron a comer el señor les dijo les tengo un regalo y les dio los caballos los trillizos empezaron a pelear porque querían el caballo que tenia el hermano mas cercano, el señor les quito los caballo y dijo que los iba a botar pero no fue así los caballos escaparon y de lo cansado se acostaron a dormir, don Memo paso por hay y se los llevo a navegar para que pueda vencer a la soledad.

Don Memo nunca tuvo juguetes se dedico a la marina cuando era joven fue capitán, cuando encontró a los caballos en la hierba dijo ustedes serán mis compañeros de viaje y los recogió y los llevo con el para su embarcación, y los caballitos se despertaron y sintieron que estaban en un barco y alejándose de Miguel, don Memo en el viaje cantaba la mar estaba serena, serena estaba la mar y seguía cantando. Cerca del mediodía empezaron a brotarse las olas entonces todos se tiraron al agua y llegaron a una isla al horizonte de la isla vieron un volcán y exclamo Versalles.

Don Memo decía soy un naufrago ahora me llamare Robinson Crusoe y lo primero que hizo fue recorrer la isla para ver sino habían personas, luego puso una cabaña y se invento una nueva canción

...