La vida esta repleta de momentos

Dracón de Atenas (una vida draconiana)

La vida esta repleta de momentos en los que las condiciones impuestas desde afuera son totalmente desproporcionadas a lo que “debería ser” y lo peor, totalmente inapelables. Hay que tragarse el bagre, soportarlo, porque no hay otra. Algunos lo sufren mucho más que otros pero en definitiva todos probamos el sabor amargo de saber que te están cagando desde un puente y hay poco que vos puedas hacer.

A estas condiciones se las suele denominar draconianas en honor a un arconte epónimo ateniense (una especia de legislador con poderes plenipotenciarios en la ciudad) que, con el fin de plasmar en letra lo que se hacia en los hechos, paso a leyes escritas lo que se hacia de forma oral.

¿Cual ea el sentido de esto? Si alguna vez jugaron a algún juego de mesa lo sabrán. Al ser las leyes de trasmisión oral estas se adecuaban siempre a las necesidades del más poderoso. Él dictaminaba que estaba bien y que estaba mal y que pena correspondía a cada falta. En un juego de mesa tenemos las reglas pero sino estamos a merced del que impuso el juego.

Ante este flagelo que afectó al ser humano desde el inicio de los tiempos se levantaron las huestes con el fin de que se haga algo tan simple como pasar a escrito todo para que no pueda existir modificaciones convenientes de ultimo momento (hecho que, una vez realizado, permitió el nacimiento de los abogados… que eran los que tergiversaban lo escrito… todo un arte por cierto).

Dracón fue uno de los que se encargó de realizar esta traspaso de las leyes de Atenas, aproximadamente en el año 621 antes de cristo, y quedó en la historia más por las penas que se aplicaban que por lo trascendental de este hecho. Según el código draconiano, armado por este legislador, muchos de los delitos más leves terminaban en la muerte y, ante la consulta de porque de la gravedad de la pena por delitos leves, éste contestó que éstas merecían la muerte, y las faltas mas graves no tenían otra porque no se le ocurría una pena mas importante.

Ahora, ¿no les suena raro que el legislador que se encarga de pasar a escrito las leyes para que todos puedan leerlas, y sepan de antemano cuales sean las penas, tenga tan mala fama? La lucha de las clases menos poderosas por penas más justas va a la par de la lucha de los poderosos por mantener su arbitrariedad en los criterios de como y a quien se le imponen las penas.

Dracón les dio donde mas le dolía, termino con muchas imposiciones injustas realizando reformas sociales y determinando competencias judiciales. En definitiva, daba poder a los no poderosos y eso traía desestabilizad al status quo mantenido por una aristocracia abusiva y arbitraria.

Al determinar que las penas para todos eran iguales ya que, abusivas o no, si un pobre o un rico cometen un mismo delito, ambos tenían

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