Las Ofrendas de México
Enviado por Zeiler • 8 de Noviembre de 2016 • Trabajo • 2.204 Palabras (9 Páginas) • 328 Visitas
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Escuela Nacional Preparatoria 6
“Antonio Caso”
- Nombre del alumno: González Jiménez Yeshua Eliezer
- Tema: Visita a Ofrendas
- Profesora :López Garduão Graciela Eréndira
- Asignatura: Actividad Estética
- Grado: Quinto
- Grupo: 558
Visita a dos ofrendas
I.- Visita a la Ofrenda de Xochimilco[pic 5]
El día 01 de noviembre del 2016 mí familia y yo nos dirigimos a la Ofrenda que anualmente ponen en el centro de Xochimilco, esta ofrenda es muy popular por la zona en la que vivo ya que hay mucha actividad este día de celebración.
Salimos de mi casa aproximadamente a medio día para llegar a Xochimilco cerca de la 02:00pm, el trayecto lo recorrimos en coche por fortuna y había mucho tráfico para llegar al centro de Xochimilco ya que todos querían ir a la festividad de aquel día, todo el camino nos la pasamos escuchando música para no aburrirnos, pero yo ya quería llegar porque tenía mucha tarea pendiente esperando en casa, también de camino tuve que ir memorizando 20 verbos en tres tiempos diferentes para poder realizar mi examen semanal el día jueves en la asignatura de Ingles.
Pasamos por el panteón de San Gregorio y pude notar las tumbas ya adornadas de este panteón, las personas según escuche estaban desde la madrugada del día anterior realizando la limpieza de las tumbas de sus familiares ya fallecidos y colocando los adornos y flores con las que se iban a adornar este año.
Al pasar por el mercado pude observar a mucha gente preparándose para la noche porque estaban comprando sus disfraces que lucirían al caer la noche, también estaban comprando fruta y pan principalmente para poder colocar sus ofrendas en sus casas, un poco más adelante cerca de una escuela secundaria se llevaba a cabo un concurso de disfraces.
El resto del camino estaba relativamente normal, con excepción de la interminable fila de automóviles que se presentaba delante de nosotros, hasta que llegamos al embarcadero de Xochimilco donde se estaba llevando a cabo la venta de boletos para poder estar en el espectáculo que se iba a realizar a media noche de ese día, el cual se trataba acerca de la leyenda de la Llorona, que iba a tener lugar en los canales de Xochimilco , y mucha gente no quería perderse este evento y reservaba boletos para poder subirse a las trajineras.
Finalmente llegamos al centro de Xochimilco, el cual estaba realmente lleno de gente, algunas ya estaban luciendo sus disfraces, entramos por el mercado y costaba trabajo caminar entre toda la gente que estaba disfrutando de la festividad, porque además de ofrendas también había puestos de comida por todo el mercado y toda la gente estaba amontonada y haciendo bola en los puestos de comida.
Cuando llegamos a la explanada, todos estaban muy entrados con el tema de día de muertos ya que había una especie de baile en aquella explanada, donde los músicos y cantantes que estaban en el templete estaban disfrazados de catrines y en la parte donde se encontraba toda la gente para escucharlos había dos bailarines que llevaban encima de ellos una especie de botarga con una estructura de madera que sobresalía por la cabeza de todas las personas tanto que incluso yo que me encontraba un poco retirado del templete podía ver a dos grandes catrines bailar al ritmo de la música e incitar a la gente a bailar. Queriendo acercarme un poco más rodee a toda la gente para poder apreciar mejor el espectáculo y cuando llegue a la parte de atrás de toda la bola de gente pude apreciar unos murales que se habían hecho con aserrín con figuras del día de muertos por todo el piso extendidas a todo lo ancho de la explanada simplemente fantásticas. [pic 6]
Alejándome un poco del baile pude observar un conjunto de ofrendas, estas estaban organizadas en una especie de circulo, la entrada era por una ofrenda que tenía la estructura de una cantina ya que las personas que estaba ahí te ofrecían una muestra de pulque de diversos sabores, el pulque los sacaban de unos barriles de madera que tenían sobre una mesa en la parte lateral del pasillo para poder acceder al conjunto de ofrendas, en la simulación de cantina había colgados algunos retratos de personajes que habían sido importantes para Xochimilco y estaba decorada con motivo de día de muertos.
Al pasar al centro de esta especies de circulo que hicieron pude observar diferentes ofrendas de escuelas o de familias, una que me llamo la atención fue la Ofrenda del Cetis por que los jóvenes tuvieron mucha creatividad en como adornar el espacio que les había tocado ya que todo el interior parecía obscuro y en el piso había una lápida bastante realista, esta parecía verdaderamente de piedra enterrada en la tierra, sin embargo todo el piso era de adoquín.
Otra ofenda estaba dispuesta en aproximadamente 6 niveles con una estructura de metal, en cada nivel tenía papel picado, un mantel, fruta, veladoras (todas encendidas), calaveritas de chocolate y en el piso a lo largo de toda la ofrenda un mural de aserrín. Todas estas ofrendas estaban cubiertas por una enorme lona.
Otra ofrenda que me gustó mucho estaba en vertical y tenía especies de repisas en las cuales estaban colocadas toda la fruta, el pan, las veladoras, algunos retratos por toda la pared que pusieron como soporte en color negro.
Pase una media hora viendo todas las ofrendas que estaban a mi alrededor, todas con un toque único y muy bien organizadas y adornadas de diferentes colores muy característicos de nuestro México, aunque olía demasiado a incienso ya que la mayoría de las ofrendas tenía un anafre prendido en la parte inferior de la ofrenda siempre centrada, las flores de cempaxúchitl parecían pequeños bultos de algodón de color amarillo o anaranjado distinguiéndose de las que eran fabricadas con papel crepe, aunque no por eso dejaban de ser muy llamativas.
La emoción por que llegara la noche se notaba en cada rincón de las ofrendas y ni hablar de los niños que ya estaban pintados de esqueleto aunque muy irreales por sus pintores que no tenían ni idea de cómo era un cráneo.
Cansado del olor del incienso nos alejamos de la multitud para acercarnos a una zona menos concurrida y la verdad no entendía por qué, el lugar estaba lleno de pequeños locales que tenían curiosos objetos entre los cuales los que mas me interesaron fueron unas mochilas que en realidad eran caparazones de tortuga y la coraza de armadillos muy exótico aunque muy bello.
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