Los números Favorecen A La Minorías

Los números favorecen a las minorías

Mílada Bazant

Un tema recurrente durante el siglo XIX y principios del siglo XX era la falta de cobertura en el sistema educativo. Sus causas se le atribuían a la escasez tanto de recursos económicos como de profesores; cosa extraña puesto que aparentemente las zonas urbanas tuvieron mayor crecimiento que las rurales cuando estás últimas eran mayoría en número.

Por ley se declaraba que cada una de las haciendas y rancherías del país contaran con una escuela para sus trabajadores, aspecto que en los datos del gobierno aparecían como si estuvieran cumpliendo pero la realidad era una muy distinta. Haciendas y ranchos iban en crecimiento al igual que el problema del analfabetismo. Situación que no se vivía al centro del país, en la capital y sus alrededores, debido a que todos los esfuerzos estaban encaminados a tal zona.

Sin embargo la falta de atención al área rural no era la única razón que favorecía al analfabetismo en la población, ya que aún cuando se disponía de planteles educativos en estas zonas otros factores intervenían en ello: las extensas distancias, la población dispersa, inasistencia, etc. de aquí que algunos pensadores opinarán al respecto; “ni siquiera la educación sacaría al indígena de su situación; la educación sólo aumentaría el inconformismo social”.

Vaya máxima pero una realidad, nadie lo pudo haber expresado de mejor manera; ¿De qué servía educar al indígena si se le mantenía en las mismas condiciones? ¿Cómo no esperar que aspirara a que su situación fuera mejor?; evidentemente era una contradicción por parte del gobierno puesto que no proporcionaba mejores oportunidades de empleo.

Además otro obstáculo era el indígena mismo, por que se denigraba, se creía menos que los blancos; primero habría que cambiar esa forma de pensamiento y después se podría avanzar.

Aunque se le critique al Porfiriato por su “dictadura” la realidad es que el país tuvo un gran crecimiento en el comercio y esto se debió precisamente por que se le ponía mayor atención a la modernización y progreso económico y se dejaba a la educación en segundo o hasta tercer plano. Por fortuna la educación también estaba bajo el cuidado de cada una de las entidades, gracias a ello más de un estado tuvo importantes avances en alfabetización.

En la actualidad tal vez los indígenas ya no sean mayoría pero eso no quiere decir que se les pase a un segundo término hablando de cobertura; se habla mucho de millones de pesos destinados a la educación pero realmente cuánto llega a cada una de los estados, y no se diga a cada una de las escuelas. Por lo menos si no se puede cortar el problema de raíz, cada uno de nosotros ha de hacer su trabajo, continuar propiciando el avance propio y el de nuestros semejantes, esperando en un futuro que los de arriba sean realmente del pueblo.

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