ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Martin Lutero


Enviado por   •  10 de Noviembre de 2014  •  6.948 Palabras (28 Páginas)  •  204 Visitas

Página 1 de 28

Introducción

Los católicos, al tratar de entender la Reforma Protestante, algunas veces se lamentan del amplio rango de iglesias protestantes, denominaciones y sectas. ¿Cómo abordarlos a todos directamente?, preguntan, pero el reto de determinar sus orígenes no es tan grande como parece a la vista de estas decenas de miles de iglesias protestantes y sectas existentes, de una manera u otra se llegará a los tres principales fundadores de la Reforma Protestante o al movimiento radical conocido como los Anabaptistas. Entiéndanlos y adelantarán en el camino de entender esta compleja realidad llamada el Protestantismo.

No obstante, las diversas facciones protestantes no son el único asunto confuso acerca de la era de la Reforma Protestante. La Reforma Católica y todas las figuras asociadas a ésta son también muy complejas, los diversos papas, prelados y políticos pueden ser difíciles de escudriñar, por esta razón, ofrezco este ensayo para adentrarse en el tema de “Quién es quién” en la Reforma Protestante y la Reforma Católica.

IR A CONTENIDO

.

.Los tres reformadores: Lutero, Zuinglio y Calvino.

La mayoría de los católicos reconocen a los tres principales reformadores protestantes -Lutero, Zuinglio y Calvino-, incluso si no saben mucho acerca de ellos. De Martín Lutero (1483-1546) generalmente saben que fue un sacerdote que rompió con Roma por causa de las indulgencias, se acostumbra decir que Lutero comenzó “la Revuelta Protestante” con la finalidad de escaparse con una monja, y sí lo hizo, se fugó con su amante, una monja, aunque fugarse es un término impreciso para describirlo, según el biógrafo jesuita, Hartman Grisar, Lutero, inicialmente se abstuvo de casarse para evitar dar a sus enemigos un arma en contra de él, sin embargo, eventualmente Lutero casó con Catalina von Bora, una monja disidente.

Sin embargo, Lutero no inició la Reforma con el fin de desposarse, de hecho, él realmente no inició el movimiento llamado la Reforma Protestante, Lutero se oponía a algunas ideas y prácticas prevalecientes en la Iglesia de su tiempo, una de esas fue la referente a hacer méritos para obtener las gracias de Dios a través de prácticas piadosas y así ser salvado, otra fue que las indulgencias pueden ser compradas para el beneficio de las almas del purgatorio, contrario a la opinión popular, Lutero estaba en lo correcto en ambos puntos, sin embargo, no quiere decir que la Iglesia estaba en un error, al menos no en la expresión más alta y oficial de su magisterio.

La dificultad fue que, debido a los problemas que afligían a la etapa tardía medieval, probablemente la gran mayoría de los católicos no estaban seguros de lo que la Iglesia había enseñado acerca de estos temas, además de que los papas del Renacimiento y otros prelados estaban más ocupados en acumular poder, y por lo tanto, poco dispuestos a definir los puntos finos de la doctrina Católica y la disciplina, con lo que se obtiene una receta del desastre.

IR A CONTENIDO

.

.Lutero

Martín Lutero nació en una comunidad campesina en Eisleben, Alemania, en 1483, hijo de Hans y Margarita Lutero, su padre, minero de profesión, deseaba que su hijo siguiera una carrera en el derecho canónico, pero eso no sucedería, ya que como resultado de realizar un voto precipitado durante una tormenta de relámpagos, Lutero decidió ser monje, y en 1505 se unió a los agustinos, la casa religiosa más estricta en Erfurt, ahí, Lutero comenzó una intensa vida de oración, estudio y ayuno, dos años después fue ordenado sacerdote y continuó sus estudios teológicos.

Desafortunadamente, Lutero fue instruido en la teología nominalista, una forma decadente de la escolástica y eso sólo precipitó a su ya intensa personalidad a la desesperanza, llegó a creer que tenía que alcanzar su salvación por medio de sus propios esfuerzos y entre más oraba, ayunaba y realizaba buenas obras, más inaceptable se sentía para Dios. El estudio de Lutero sobre San Pablo, a través de la visión de San Agustín y su controversia con los Pelagianos cambió todo esto, Lutero interpretó que la “justicia divina” (iustitia Dei), de la que San Pablo escribió en Romanos 1:17, que habla sobre la justicia por la cual el pecador es justificado por la fe y no por la creencia de la justicia por la cual Dios juzgará a los pecadores que difícilmente conseguirán la justificación por sus propios esfuerzos. Esta interpretación transformó al confundido monje, que ahora encontró la paz con Dios por medio de la fe, vio que su “descubrimiento” o “recuperación” en la antigua enseñanza paulista se alejaba radicalmente de la opinión de los “doctores” medievales, y esto no era todo, los principales comentadores medievales sostenían la misma visión de la “justicia divina”, aunque Lutero no lo sabía.

Lutero también interpretó la fe como un regalo misericordioso divino, por medio de la cual recibimos el regalo adicional de la justificación, en contraste con todos los esfuerzos humanos para merecerla y para ganar el favor de Dios, Lutero insistió que el hombre se justifica “sólo por la fe”, como una manera de insistir en que los seres humanos no contribuyen en nada para su propia justificación, este “descubrimiento” de Lutero fue más que un “gran avance” personal, para ese momento era profesor de teología en la Universidad de Wittenberg, en donde predicaba su conclusión sobre la justificación divina a los estudiantes, y no fue hasta que el tema de la “venta” de las indulgencias surgió en su diócesis, que a su conclusión “le salieron piernas”, como dicen los periodistas.

La “venta” de las indulgencias ocurrió en la vecindad de la diócesis de Mainz y se desparramó hacia la diócesis de Lutero y su confesionario, lo que llamó su atención al tema, el arzobispo de Mainz, de veintitrés años, había permitido la propagación de las indulgencias en su diócesis a cambio de una parte de los ingresos obtenidos, el dinero, supuestamente estaba destinado a la reconstrucción de la Basílica de San Pedro en Roma; de hecho, el arzobispo necesitaba dinero para pagar un estipendio a la Curia romana por una exención que le autorizaría tener tres diócesis a la vez.

¿Cómo algo espiritual puede ser vendido?, -después de todo, una indulgencia es una remesa de castigo temporal por el pecado- La teoría era que esos ofrecimientos de dinero contaban como una forma de penitencia cuando el donante realmente los hacía con sacrificio de corazón, por el motivo apropiado, desafortunadamente, esta práctica degeneró fácilmente en la simple transacción sin sacrificio de por medio, peor aún,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (44 Kb)
Leer 27 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com