Mary Kaldor

Kaldor:

En los últimos siglos el mundo ha sido testigo de las guerras más violentas que han existido, como la Primera y Segunda Guerra Mundial que acabaron con la vida de millones de personas y en donde se violaron los derechos de cientos de personas. También se han vivido diferentes amenazas de guerra como de guerras nucleares, o guerras convencionales entre Estados que son a gran escala.

Desde el punto de vista de Mary Kaldor, politóloga de la London School of Economics, la globalización ha hecho que las definiciones que se les daba a distintos términos usados dentro de las Relaciones Internacionales suenen absurdos en la actualidad, por ejemplo, la guerra. Anteriormente se entendía por guerra la acción de provocar violencia únicamente por parte del Estado, pero hoy en día vemos una violencia organizada dentro de los países y cuya actividad es ajena al Estado en muchas ocasiones, esta violencia muchas veces termina siendo la combinación de violaciones de derechos humanos (a gran o pequeña escala), crimen organizado y guerra. Se deja de hablar de intereses nacionales o del Estado, entran al juego los intereses privados. Para alcanzar los objetivos políticos se usan métodos que generar terror dentro de la población y que están prohibidas. Y por otra parte se evidencia que este tipo de guerras son estables gracias a las economías criminalizadas, es decir, estas tienen cabida no solo en el ámbito político, también en el ámbito económico.

Para poder entender mejor lo dicho anteriormente se va a citar el ejemplo dado por Kaldor en su libro Las nuevas guerras. Violencia organizada en la era global. Este ejemplo hace referencia al caso de Bosnia-Herzegovina en donde la autora, desde su experiencia, deja claro que esta guerra se debe en parte a la falta de conocimiento por parte de Estados Unidos y algunos Estados del viejo continente, también acredita la guerra a las consecuencias que quedaron tras el derrumbamiento del sistema socialista, la falta de modificación de las ideas que fueron heredadas de la guerra, así como la errónea percepción de Yugoslavia (p.50). En el ámbito político se evidencia la lucha entre elites para poder tener control total del Estado denominado “nacionalismo nuevo” (p.82) en especial con el ejemplo del Estado de Yugoslavia donde se explica que “fue una guerra contra la población civil y contra la sociedad civil […] de los nacionalismos excluyentes contra una sociedad secular, multicultural y pluralista” (p.64). No se puede dejar de lado los factores económicos y militares locales, y la cooperación que estas tuvieron con las fuerzas militares exteriores; al mismo tiempo es importante resaltar la intervención internacional en la zona, ya que con esto se estaba contradiciendo a la alta política y se estaba, hasta cierto punto, ocultando lo que ocurría desde el punto de vista humano.

Kaldor, al contrario que otros autores como Huntington, cree en un proyecto cosmopolita que pone como posibles componentes que dan paso a la guerra: el poder político global que tiene inicios basados en la pérdida de legitimidad del Estado, y la economía ya sea legal o ilegal. (Anduli, 142)  

Kaldor nos muestra que las estrategias a nivel mundial han cambiado mostrándonos una nueva realidad del mundo. Cada vez nos sentimos más inseguros gracias a las distintas amenazas que llegan de todas partes. Para algunos la relación entre el efecto de la globalización, la debilidad de determinados estados y los fenómenos vinculados con las identidades nacionales es entendida, estudiada y tratada. Ahora tenemos más conciencia acerca de las relaciones problemáticas que existen entre Estados, comunidades y culturas por su forma de vida, creencias,  e intereses.

...