Modelo sustitución de importaciones

LA    INDUSTRIALIZACIÓN POR SUSTITUCIÓN  DE     IMPORTACIONES (1930-1976):

“La economía nunca ha sido libre: o la controla el Estado en beneficio del pueblo o lo hacen los grandes consorcios en perjuicio de éste”      

1) La crisis de 1929 y el surgimiento del Estado regulador:

Causas y consecuencias de la crisis de 1929:

La Gran Depresión iniciada en 1929, denominada de esta manera debido a que fue la crisis más profunda del sistema capitalista de producción, si bien se inició en Estados Unidos, rápidamente se transformó en una depresión de carácter mundial.

Fue causada por una combinación de sobreproducción y fuerte especulación, cuyo germen estuvo en el proceso de crecimiento económico experimentado por la economía norteamericana durante la década del veinte, basada sobre todo en el fuerte aumento de la producción de automóviles.

En primer lugar, la sobreproducción se debió a que el fuerte aumento de la producción que se verificó durante los años veinte no estuvo acompañado por un aumento en la misma dimensión de la demanda. Es decir, la causa de la sobreproducción fue la insuficiente expansión de la demanda de la economía norteamericana durante este período. Y ésta,  se debió fundamentalmente a la desigual distribución del ingreso que Estados Unidos experimentó durante esa década. Pues si bien durante la fase de crecimiento económico los beneficios de los empresarios crecieron en forma permanente, los salarios de los trabajadores permanecieron casi constantes durante todo el período, salvo en el caso de los obreros de Henry Ford quien les aumentó sus remuneraciones al vislumbrar las consecuencias nefastas que podía tener el escaso aumento de la demanda.

El exceso de oferta provocó una deflación generalizada y, por lo tanto, una caída en la tasa de ganancia de los empresarios.

Efectivamente, el exceso de oferta no se debió a que la población norteamericana no deseaba las mercancías que se había producido, sino más bien que, como resultado de los bajos salarios verificados durante la década del veinte los consumidores no poseían los ingresos suficientes para adquirir los bienes..

El  fuerte aumento de la especulación producida durante la década del veinte, la misma debió al aumento de los precios de las acciones en el mercado de valores como resultado del crecimiento permanente de los beneficios de los empresarios (desde los sectores altos de la población a los pequeños ahorristas, se volcaron  masivamente a la especulación en las Bolsas de Valores.) A tal punto que los movimientos de valores que se produjeron en la Bolsa de Nueva York durante la década del veinte fueron mayores que los resultados de la economía real en términos de producción, empleo y demanda.

Estos desequilibrios de la economía norteamericana condujeron al colapso que se desató el 29 de octubre de 1929, donde la crisis de sobreproducción provocó la caída de la Bolsa de Nueva York. En efecto, como dijimos, el exceso de oferta generó una caída de los precios de los bienes, lo cual produjo una disminución en la tasa de ganancias de los empresarios. Se desató una baja en los precios de las acciones generando un pánico entre los accionistas norteamericanos. De esta forma, millones de accionistas al mismo tiempo trataron de desprenderse de sus acciones conduciendo al cierre de la Bolsa de Valores de Nueva York, conocido como la caída de Wall Street.

La crisis, que se tradujo en una fuerte merma de la producción comenzó a generar un significativo aumento del desempleo, una caída de los salarios de los trabajadores y una crisis del sistema financiero norteamericano a partir de la quiebra de una gran cantidad de bancos que terminó perjudicando a un enorme número de pequeños y medianos ahorristas.

Se inició en Estados Unidos, se expandió al resto del mundo como resultado de la fuerte interdependencia económica que existía entre los países del mundo. La contracción del comercio norteamericano y la reducción del mercado de capital internacional transformaron la crisis en una depresión mundial.

Los países desarrollados retomaron el proteccionismo del mercado interno y est5o repercutió en forma negativa en las economías periféricas, como la Argentina. En efecto, la disminución de la producción industrial y el aumento de los aranceles a las importaciones en los países desarrollados provocaron una caída del comercio internacional, generando una reducción de los precios de los bienes primarios de los cuales dependían las economías subdesarrolladas (recordar que los países periféricos proveían materia prima y alimentos a los países centrales).

En el caso particular de la economía argentina, la Gran Depresión desató la caída del modelo agroexportador, pues a partir de 1929 y la generalización del proteccionismo en los países industrializados, con la consiguiente caída de los precios de los productos primarios, el nivel de exportaciones de la economía argentina se redujo bruscamente. Esto significó la merma en el ingreso de divisas; generando la incapacidad para la compra de bienes industriales.

Crisis de la teoría neoclásica y surgimiento del keynesianismo:

En los países centrales, hasta la Gran Depresión, la escuela económica de pensamiento preponderante era la Neoclásica. (confiar en los mecanismos del mercado para la superación de la crisis ,capacidad de autorregularse. Es decir, ante cualquier desequilibrio se retorna en forma automática a través de la ley de la oferta y la demanda, sin intervención del Estado, a una situación de equilibrio.

En este contexto de crisis nació la Macroeconomía fundada por John Maynard Keynes (1883-1946) 

A partir de Keynes sabemos que cualquier política macroeconómica que tome un gobierno terminará repercutiendo en el crecimiento económico, la inflación, el desempleo, los salarios de los trabajadores y la pobreza, entre otras cosas. Por lo tanto, los diferentes Estados tomaron la responsabilidad de fomentar el crecimiento económico, reducir la desocupación y mantener la estabilidad de los precios a través de distintas medidas macroeconómicas.

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