Museo de Antropología.
Enviado por anahi.al • 5 de Marzo de 2016 • Informe • 2.172 Palabras (9 Páginas) • 309 Visitas
Introducción a la antropología
En la sala se pueden observar las funciones de la antropología como: la unidad, el tiempo, la diversidad del ser humano y su cultura.
Mediante algunas maquetas se puede notar la evolución de la vida en la tierra, desde los primeros seres que vivieron en el mar hasta el hombre moderno con sus características físicas.
También en esta sala se puede observar tanto las culturas que florecieron en el Viejo Mundo, como las asentadas en América.
Mesoamérica
En esta sala se muestran los grupos indígenas que se formaron y vivieron en México y se integraron en dos diferentes áreas culturales: los cazadores-recolectores del norte de México y los pueblos agrícolas de otras zonas de Mesoamérica, los cuales desarrollaron una avanzada civilización.
La región comprendió desde el norte de Sinaloa, El Bajío y el río Soto la Marina hasta Ulloa en Honduras y la península de Nicoya en Costa Rica.
En la sala se presentan las características culturales, arqueológicas y artísticas de Mesoamérica, la agricultura y los vegetales que se cultivaron, en especial el maíz, el culto a los muertos, su tecnología alfarera, metalúrgica, plástica de talla en piedra y arquitectónica, y sus avanzados conocimientos.
Orígenes
En la sala se muestra como el continente americano fue poblado por hombres que procedían del norte y noreste de Asia y, en menor grado, por inmigrantes de Oceanía y África. También se muestran los instrumentos de piedra que usaban los cazadores prehistóricos, restos de mamut y otros animales, así como algunos cráneos humanos.
Preclásico
En esta sala se muestra el surgimiento de las primeras aldeas alrededor del año 2500 a.C. Se puede observar el desarrollo y el florecimiento de las sociedades agrícolas que vivieron en el Altiplano Central, como los primeros cultos religiosos de Mesoamérica. El paisaje de lo elevados valles del centro de México era una combinación de volcanes, montañas, bosques y lagos, y en sus orillas y en la de los ríos que en ellos desembocaban, se establecieron los agricultores y se multiplicaron las aldeas como Tlatilco y Tlapacoya. Sobre todo estos sitios de donde proceden las numerosas vasijas y las figurillas que muestran patrones estéticos idealizados que regían en aquellos años: esculturas modeladas en arcilla que representan a mujeres desnudas con elaborados maquillajes faciales y corporales, símbolos de culto.
Los chamanes, el uso de las máscaras, la vasija del Contorsionista y el Sacerdote de Atlihuayán fueron de la cultura olmeca en el centro de México. A partir del año 600 a.C., en la etapa tardía del Preclásico, surgen los primeros basamentos piramidales, donde se celebraba el culto a Huehuetéotl, el dios del fuego y a Tláloc, el patrón de la lluvia.
Teotihuacán
En esta sala se exhiben los más importantes objetos descubiertos. También se muestra el desarrollo de esta cultura prehispánica. Su presencia define la época clásica del altiplano central (100a.C. a 750 d.C.) Teotihuacán se planificó con un original diseño urbano, y su eje central es la Calzada de los Muertos y donde se levantan las pirámides de El Sol y La Luna.
La ciudad agrandó de forma gradual sus dimensiones mediante conjuntos multifamiliares, llamados palacios. Estas unidades integradas por patios y habitaciones estaban decoradas con pinturas murales.
La vida cotidiana y ritual, conocida por los mitos como “la ciudad donde nacieron los dioses”, se observan los elegantes vasos trípodes, las jarras de Tláloc y los incensarios escenográficos. Fueron hábiles constructores y muy buenos artesanos que utilizaron cinceles, pulidores para pisos y hachas pulidas. Crearon objetos de obsidiana, que fue el material que dio riqueza y poder a la ciudad, y se concedió un énfasis en la belleza de las máscaras funerarias.
Tolteca
En la sala se muestra la época tolteca en el altiplano central durante el posclásico (750 a 1200 d.C.) y se integra con el periodo epiclásico (fin de Teotihuacán), cuando florecieron Xochicalco, Cacaxtla y Xochitécatl y el posterior dominio de Tula y otras culturas vecinas. Se muestran arqueólogos y artistas de esos pueblos como el Quetzalcóatl, o la inicial utilización de los metales, todo eso bajo el patrocinio de los guerreros.
De Cacaxtla se cuenta con un segmento del mural de La Batalla y Xochitécatl se destaca por las curiosas figuras de mujeres; fue uno de los sitios rituales femeninos de mayor importancia en el altiplano central. De Xochicalco de donde proceden las hermosas estelas con su escritura nativa, aún no descifrada, y la notable Cabeza de Guacamaya que indica que está relacionada con el sol.
Mexica
En esta sala se exhibe como el mundo mexica fue dominando por la ciudad fundada por Huitilopochtli, México-Tenochtitlán, durante el posclásico (1300 a 1521 d.C.) y de ella provienen las monumentales esculturas de Coatlicue y la piedra del sol.
Las esculturas humanas muestran sus características físicas, así como su vestimenta, ornamentos y curiosos trajes militares, en formas de águila o jaguar; un códice que relata la migración mítica de los mexicas hasta la fundación de su ciudad y capital, y las imágenes de sus gobernantes y relieves (como la piedra de Tizoc) se refieren a la devoción por la guerra y el sol. La reproducción de México-Tenochtitlán y la maqueta del Templo Mayor nos permiten observar las antiguas ciudades de México-Tenochtitlan y México-Tlatelolco, las cuales fueron destruidas después del asedio de 1521.
El mercado de Tlatelolco reconstruye su actividad comercial, donde se adquirían animales, vegetales y semillas, objetos de oro, plata, jade y turquesa, textiles, herbolaria y esclavos. Los fragmentos escultóricos de Tenochtirlán, localizados en el subsuelo de la actual Ciudad de México. La gran piedra del sol se destaca como el monumento arqueológico mas importante para los mexicanos. Imágenes de animales que muestran la fauna nativa y su ritualización, especialmente serpientes y jaguares, a los que se consideraba de gran importancia por su fuerza y poder.
Oaxaca
Aquí se muestra como en la antigua región oaxaqueña florecieron en la época prehispánica dos importantes culturas: la zapoteca y la mixteca. El desarrollo de las dos civilizaciones se extendió des el año 1000 a.C. hasta la conquista europea del territorio a principios del siglo XVl d.C.
Los zapotecos eligieron los valles centrales de Oaxaca y ahí erigieron sus ciudades más importantes; de ellas, la más sobresaliente fue sin duda Monte Albán, ubicada en las cercanías de la actual capital del estado. El arte zapoteco lo ejemplificaron principalmente sus formas cerámicas: vasijas trípodes, elegantes copas y sus originales urnas.
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