ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Orden Cerrado


Enviado por   •  5 de Marzo de 2015  •  8.072 Palabras (33 Páginas)  •  172 Visitas

Página 1 de 33

Unidad II. Corrientes Filosóficas

PENSAMIENTO SOCIAL CLASICO GRIEGO:

Ideal político – social de Platón y Aristóteles

Platón (427-347 aC) Los principios fundamentales de la filosofía platónica son:que el fin supremo de la existencia es la virtud, que la virtud es sinónimo de conocimiento, y que el intelecto, órgano del conocimiento, es el factor dominante en el hombre. Platón aplicó tales principios en sus tres diálogos políticos: "La República", "El Político" y "Las Leyes".

El objeto de "La República" es combatir las ideas políticas de los sofistas, y criticar las costumbres políticas de los gobiernos griegos de su tiempo -democracias o monarquías- por su falta de virtud cívica. Plantea en esta obra un ideal político demasiado abstracto y deshumanizado. En "El Político" formula un sistema más compatible con la naturaleza humana corriente: en este diálogo se inclina a pensar que el mejor gobierno posible es el del "Rey-Filósofo", que gobierna de acuerdo con las leyes. Finalmente, en "Las Leyes", Platón abandona la idea de alcanzar un ideal metafísico y concluye diciendo que en este mundo imperfecto (donde los Reyes-Filósofos son muy escasos) un Estado con división y separación de los poderes es lo mejor que prácticamente puede realizarse.

Aristóteles (384-322 aC) fue un discípulo rebelde y cuestionador (y el más capaz) de Platón, y tras la muerte de su maestro y muchos viajes, fundó en Atenas su propia escuela, el Liceo.

Su principal obra de pensamiento político, "La Política", no tiene el encanto literario de los diálogos platónicos, y al parecer proviene de apuntes de conferencias recopilados por discípulos. Esta obra continúa y acentúa decididamente la tendencia, que ya se insinuaba en el último Platón, de abandonar la vía puramente especulativa y fortalecer la participación del material empírico en la reflexión política, al punto de que Aristóteles puede ser considerado "el padre fundador de la Ciencia Política clásica".

Es difícil sintetizar la obra política de Aristóteles, pero en principio podemos decir que sus ideas básicas son: que las verdaderas bases del Estado son la Familia y la Propiedad privada; que el Estado es producto de una evolución desde la Familia, a través de la Comunidad tribal, hasta culminar en la Ciudad autónoma, de la que Atenas es el ejemplo supremo. Luego expone los rasgos más característicos de esa Ciudad-estado, y de los otros tipos de Estado existentes en su tiempo, de los que ofrece varias clasificaciones, de las cuales la más conocida es la basada en la pregunta: quién gobierna? Monarquías, aristocracias, repúblicas, cada una de las cuales tiene una forma corrupta (que se da cuando el gobernante atiende su interés particular en lugar del interés general: tiranías, oligarquías, demagogias). Además fue el primero en enunciar que las desigualdades sociales surgían como producto del régimen económico del un estado.

Corrientes sociológicas de los siglos XVIII al XX:

Liberalismo, positivismo, estructuralismo, Marxismo, teoría Keynesiana y Teoría Neoliberal.

El Socialismo: tendencias en el siglo XXI.

LIBERALISMO:

El liberalismo es una corriente de pensamiento filosófico, social, económico y de acción política, que promueve las libertades civiles y el máximo límite al poder coactivo de los gobiernos sobre las personas. Aboga principalmente por:

• El desarrollo de las libertades individuales y, a partir de ésta, el progreso de la sociedad.

• El establecimiento de un Estado de Derecho, en el que todas las personas, incluyendo aquellos que formen parte del Gobierno, estén sometidos al mismo marco mínimo de leyes.

HISTORIA:

Se considera a John Locke como uno de los primeros pensadores liberales, siendo su Segundo tratado sobre el gobierno civil la obra seminal de esta ideología. Luego de él, los economistas clásicos como Adam Smith y David Ricardo continuaron esta línea de pensamiento, especialmente en lo que se refiere a la conexión entre libertad política y prosperidad económica. Smith, con su obra La investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones, exhorta a 'dejar hacer 'al mercado, en lugar del soberano, en lo que a decisiones de compraventa se refiere.

En cuanto a la política, la ideología liberal encuentra sus bases en Montesquieu y en los padres fundadores americanos; parte del hecho de que no hay personas ni sistemas perfectos, y por lo tanto, el Estado debe ser un conjunto de pesas y balanzas en el que se contrapesen los distintos poderes que ostenta sobre el individuo, para que ninguno pueda devenir en tiranía.

Según la teoría liberal, el Estado debe seguir una política de mínima intervención, o laissez faire (en francés, «dejar hacer»). Ésta se sustenta de un lado en la convicción de que cada individuo buscará lo mejor para sí mismo y para el otro con el fin de beneficiar a todos, siendo la labor del Estado corregir los casos en que esto último no se cumpla. Los críticos del Liberalismo suelen insistir en que la segunda premisa pocas veces se cumple, ya que a menudo algunos individuos logran beneficiarse a costa del resto de la sociedad

Liberalismo social, liberalismo económico y liberalismo político

El liberalismo social defiende la no intromisión del Estado o de los colectivos en la conducta privada de los ciudadanos y en sus relaciones sociales no-mercantiles, admitiendo grandes cotas de libertad de expresión y religiosa, los diferentes tipos de relaciones sociales consentidas, morales, etc. Sin embargo, considera valores más allá de la propia voluntad, como los valores religiosos o tradicionales.

El liberalismo económico defiende la no intromisión del Estado en las relaciones mercantiles entre los ciudadanos (reduciendo los impuestos a su mínima expresión y eliminando cualquier regulación sobre comercio, producción, etc.), sin dejar de lado la protección a «débiles» (subsidios de desempleo, pensiones públicas, beneficencia pública) o «fuertes» (aranceles, subsidios a la producción, etc.). La impopularidad de reducir a veces la protección de los más desfavorecidos lleva a los liberales a alegar que resulta perjudicial también para ellos, porque entorpece el crecimiento, y reduce las oportunidades de ascenso y el estímulo a los emprendedores. Los críticos, por el contrario, consideran que el Estado puede intervenir precisamente fomentando estos ámbitos en el seno de los grupos más desfavorecidos. El liberalismo económico tiende a ser identificado con el capitalismo, aunque este no tiene por qué ser necesariamente liberal, ni el liberalismo tiene

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (53 Kb)
Leer 32 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com