Primera Guerra Mundial
Enviado por clau130393 • 2 de Diciembre de 2012 • 2.925 Palabras (12 Páginas) • 305 Visitas
Proceso de unificación alemana
Sacro Imperio Romano
Es bastante complejo hablar de la unificación alemana, ya que no sólo ha habido una. Si se habla de unificación, también habría que hablar de reunificación/es.
Alemania en sus inicios estaba constituida por 38 estados, de los cuales, el primero que se conocía era el Sacro Imperio Romano; estaba al mando de Carlomagno, Emperador Romano, quien representaba el poder de todos los reinos. Pero, cada uno mantenía el poder feudal sobre sus territorios. Carlomagno para mantener su dominio sobre Sajonia tuvo que enfrentarse a diversas luchas, entre ellas la guerra contra los ávaros de la frontera Oriental; esto no solo mantuvo su dominio si no que lo expandió a lo que hoy en día se conoce como Serbia, Croacia y Hungría.
Cabe destacar que el Sacro Imperio Romano tuvo como antecedente al Imperio Carolingio que estaba dividido en 3 provincias: marcas, ducados y condados. “Condados: Eran las provincias interiores bajo la responsabilidad de un Conde; Marcas, eran provincias fronterizas militarizadas bajo la responsabilidad de un Marqués; Ducados, era la unión de varios condados que estaba a cargo de un Duque”.
Alemania estuvo en descontrol durante 300 años por la falta de gobernante (Emperador), existían diversos tipos de gobierno formados por principados territoriales y por ciudades-Estado.
El término Sacro Imperio Romano comienza a ser usado a partir de 1254; y el término Sacro Imperio Romano Germánico data de 1512, después de muchas variaciones en los últimos años del siglo XV.
El final de la Edad Media fue un brillante periodo para la cultura alemana, pero no lo fue para la Iglesia. Desde 1517 cuando Martín Lutero publicó sus “95 tesis”, en las que hacía mención del gran poder que la Iglesia tenía sobre el Estado y pedía que la Iglesia se dedicara a salvar almas y dejara de inmiscuirse en lo político porque eso era labor del Estado, también se proclamaba en contra de la venta de indulgencias y cargos eclesiásticos. Criticaba de manera insistente a los poderes establecidos y los abusos que tenia la iglesia con las personas. Después de ser expuesto ante la sociedad católica tuvo que dar explicaciones; diciendo que sus críticas no eran para la iglesia y mucho menos contra Dios si no más bien en contra de los malos obispos que ganaban dinero a cambio del paraíso.
Esto, provocó un movimiento religioso que trajo consigo guerras entre príncipes católicos y protestantes. Y, en 1555 se estableció que quien gobernara el territorio, podría escoger libremente la religión que debía profesarse en dicho lugar, desde entonces, existen estados alemanes protestantes y católicos.
Iglesias protestantes
Surgen debido a los errores de la Iglesia Católica, que durante mucho tiempo había estado atesorando bienes materiales y se había empeñado en una lucha por el poder terrenal, las capas sociales más bajas, campesinos, artesanos y comerciantes estaban descontentos con las jerarquías eclesiásticas, que solicitaban el diezmo como requisito obligatorio para pertenecer a su religión y demostrar su fe hacia ella; pero, no se recibía nada material a cambio, según la Iglesia, lo único que recibía era la absolución de sus pecados.
La vida de lujo y pecado de los cardenales y obispos en Roma era bien conocida por toda la población de Europa e incluso reyes y emperadores sentían rencor al Papado que interfería frecuentemente en el gobierno.
Ya desde el siglo XIII, con San Francisco de Asís, se planteaba la cuestión de si la Iglesia debería acumular riquezas o debería repartirlas entre los pobres.
Las Iglesias protestantes se dividen en:
Las Iglesias luteranas, la biblia es quien tiene la razón y hay que saber interpretarla.
Las Iglesias calvinistas, niega la orientación sacerdotal como un sacramento. Dentro de sus postulados más importantes se incluye la creencia de la soberanía absoluta de Dios y la doctrina de la justificación solo por medio de la fe, enseña la salvación por medio de la gracia, no por obras, para lo que es necesario creer o confiar en Jesús Cristo como único y suficiente salvador.
Las Iglesias anglicanas, se considera libre del papa, pero no de la del rey y, a él (ella) pertenece "el gobierno de todos los estados, sea civil o eclesiástico, en todas las causas". La Iglesia está por lo tanto sometida al poder del estado.
Guerra de los 30 años
Después de dicho movimiento religioso, en 1618 se dio la Guerra de los treinta años
Los antecedentes de la guerra de los Treinta Años son muy complejos, y resulta difícil resumirlos sin perder demasiado nivel de detalle.
La guerra se inició cuando Fernando II quien era católico, en el año 1617, fue coronado como emperador del Sacro Imperio Romano Germánico y rey de Bohemia, ante la oposición de la mayoría protestante, sobre todo calvinista, solicitó apoyo a países extranjeros.
Esta disputa iniciada por motivos religiosos tuvo un cambio, ya que Francia católica se unió a los protestantes de Holanda y Suecia, mientras que la Alemania luterana, con un gobierno católico luchó junto a los estados católicos de España y Austria. Estos países dieron prioridad a extender sus dominios, dejando a un lado los motivos religiosos.
La Francia católica, de Luis XIII y del primer ministro, el Cardenal Richelieu, no estaba satisfecha con la paz lograda, se unió a Suecia y a Holanda que eran países protestantes, causando la ira de España.
Fue con la muerte del Cardenal Richelieu (1642) y la de Luis XIII (1643), cuando comenzó a vislumbrarse la posibilidad concreta de paz.
Tras la derrota española en Lens, ocurrida en octubre del año 1648, se firmó la paz de Westfalia, por la cual los Habsburgo comenzaron a sentir la pérdida de su inmenso poder.
En el Este del Sacro Imperio Germánico, se firmó por primera vez un Tratado multilateral moderno; el de Westfalia. Por primera vez en la Historia europea, se habló de Estados-Naciones, de libertad de prédica religiosa y de límites internacionales. Francia salió beneficiada en dicho tratado, ya que durante la Guerra de los 30 años, jugó a 2 bandos; Suecia, que intervino en Alemania y logrando consolidarse como potencia, al menos durante el reinado de Hitler quien supo concitar en todos el odio a los judíos, como elemento cohesionador, y proponerles la superioridad de la raza aria como única válida para dominar el mundo; y como segundo bando, Las Provincias Unidas, ahora llamadas Holanda, que tras años de rebelión, fueron reconocidas como independientes. Los Estados Papales perdieron la mayor parte de su poder, al ser el Calvinismo y el Luteranismo reconocidos como religiones oficiales. España siguió con su lenta decadencia
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