Reporte de Visita a Teotihuacán

Visita a Teotihuacán

A pesar de que el viaje fue en sábado por la mañana llegamos con la mejor disposición de aprender y llevarnos algo de Teotihuacán, algo más que fotos y recuerdos de vistas impresionantes; puedo decir que me lleve de dicho lugar “Energía”, la cual es esencial para cualquier ser humano y no lo digo porque después de todo el recorrido terminamos súper quemados, si no porque he estado más activo en mi vida, sin quejarme de la rutina o de los demás, inspirado desde entonces por los Teotihuacanos que eran hospitalarios con las demás culturas de la época y por los colores que tenía la ciudad en aquellos tiempos donde paredes, edificios, templos, etc., cobraban vida por si solos y brillaban majestuosamente; era el New York del momento por así decirlo.

Durante el recorrido íbamos viendo las artesanías que vendían, como recuerditos, tomando agua para evitar una deshidratación, ingiriendo algunos alimentos para aguantar hasta la hora de la comida y en mi caso por uno de los campos me distraje atrapando chapulines, ese escenario me transporto automáticamente a mi infancia donde con mis vecinos andábamos en el monte jugando a atrapar chapulines para que después mama los guisara y comiéramos como palomitas viendo caricaturas, también recolectábamos flores para hacer pigmentos y perseguíamos a las lagartijas, era muy divertido; fue un momento muy especial porque hace mucho que no tenía ese tipo de actividad o aventura.

Lo que no me gusto de la visita fue que no hubiera árboles en la zona, sabemos que los Teotihuacanas arrasaron con ellos, pero nosotros actualmente podemos sembrar árboles y darles cuidado, lamentablemente no es así; y otra de las cosas que no me gusto fue el servicio de comida que te ofrecen, en lo personal me parece una estafa muy bien estructurada.

Si se presenta la oportunidad de volver a Teotihuacán sin duda me apuntaría, una experiencia muy agradable y conocí un poco más a mis compañeros de grupo.

...