Revoluciones y Parodias

REVOLUCIONES Y PARODIAS

¿El Situacionismo a través del No grupo?

Natalia Escamilla Ávila

Para comenzar a analizar está hipótesis, nos situamos en México de la década de los 50’s, en el contexto del momento de la Ruptura, suceso artístico que pretendía hacer una propuesta difiriendo al caduco Muralismo del mito del Nacionalismo Mexicano. Un conjunto de artistas mexicanos y extranjeros comenzaron a reaccionar contra lo que percibían como los gastados valores de la Escuela Mexicana de Pintura. Maxificando la Ruptura, después de la masacre en Tlatelolco el 2 de octubre del ‘68, la idea de la Escuela Mexicana de Pintura parecía obsoleta en una nación herida por la represión, y un pueblo mexicano, que se encontró mascando en silencio su dolor, sin apoyos, confuso, con un odio latente y paralizante que les impedía actuar, quizá por miedo a las represalias.

Los Grupos y Juan Acha

Existieron en México grupos de artistas y teóricos, surgieron entre 1977 y 1982 (Tepito Arte Acá, Proceso Pentágono, Mira, Suma, Germinal, Marco, No Grupo, entro otros), que respondieron a una situación social, política y artística determinada por el contexto posterior a la matanza de Tlatelolco.

   En el maraco de esa escena, Juan Acha teórico peruano de corte marxista radicado en México, fue una influencian determinante para los grupos que germinaban en México. Pues para Acha,  en América Latina el aislamiento, y la identidad basada en la idea de un sustrato ancestral o una esencia nacional, eran ya imposibles dadas las nuevas tecnologías, la informática y los medios masivos que habían provocado una ruptura en el campo artístico.

   Un nuevo tiempo más dinámico se instalaba en el campo del arte, que reclamaban obras inmateriales e invendibles postuladas por guerrilleros culturales. Ese nuevo arte proponía una distinta organización del trabajo artístico en forma de colectivos que intentaban reformular el significado del arte político, y que trabajaban con diversas estrategias en el campo del arte público dirigidas a influir sobre el proceso cognoscitivo de los espectadores.

   Así surgen los grupos, para intentar renovar el arte prevaleciente hasta el momento, con una preocupación de un arte político. Propusieron hacer un trabajo artístico por encima del pensamiento paradigmático del artista solitario y aislado. También, buscaron nuevos públicos y nuevos espacios para la circulación de la obra de arte, innovaron en las técnicas de impresión y coquetearon con el arte conceptual.

El No Grupo

Fue fundado en 1977. Lo integraban Maris Bustamante, Rubén Valencia, Melquiades Herrera,  Hersúa, Susana Sierra, Katya Mandoky y Andrea di Castro, (aunque los tres últimos pronto salieron del No Grupo). Propone una corriente divergente del proyecto político de los Grupos: una tropa paródica que sacaba provecho de la seriedad de los artistas comprometidos, de la torpeza de las instituciones culturales y los mitos sociales del artista, como por ejemplo ese  modelo del artista solitario y solemne.  

   Ellos ilustran otra realidad que surge en la colectividad y en la crítica humorística, por ejemplo, el Montaje organizado en 1979 para contraponer la retrospectiva del ensalzado pintor José Luis Cuevas, que el Museo de Arte Moderno tituló “El regreso del hijo pródigo”, el No-Grupo llamó a su contraevento “Atentado al hijo pródigo” en el cual  repartió exquisitas reliquias como “¡auténtico sudor de Cuevas!” e hizo trizas la solemnidad del ritual museográfico.

¿Por qué usan esta parodía? ¿Quién nos puede explicar de dónde surge esto?

   Para empezar definamos parodia. Del latín tardío parodĭa, y este del gr. παρῳδία parōidía. Es  Imitación burlesca. (RAE, 2017) La parodia pone en ridículo a alguien o algo.

   Entonces, tenemos que la parodia es una imitación que pretende mofarse, ridiculizar y el No Grupo hace con esto una crítica contundente a eso que se imita para generar una reflexión desde el humor. Suena simple, pero ¿en realidad lo es?

La Internacional Situacionista

Algunos europeos en la década de los 50´s pensaron esto de manera más profunda, y con antecedentes en la Internacional Letrista y posteriormente Internacional Situacionista, “movimientos” nacidos de vestigios del Dada y altamente influenciados por el Marxismo.

   La Internacional Situacionista (IS) es el producto de la fusión de una serie de grupos anteriores de artistas e intelectuales, (la Internacional Letrista, el Movimiento Internacional por un Bauhaus Imaginista (MIBI), etc.). El situacionismo fue un movimiento de vanguardia europeo que a partir de 1953 generó no sólo una estética, sino una de las bases teóricas más sólidas de la crítica de la sociedad y la cultura contemporáneas, el situacionismo supuso una aportación fundamental del vanguardismo europeo en el intento de fusión de arte y vida. se autodisolvió en 1972 debido a que dejaría de seguir sus principios si continuaba.

   Para ilustrar un poco incluyo un extracto del ensayo de Ivan Chtcheglov para el primer número de la revista Internationale Situationiste en 1953: “Una enfermedad mental ha barrido el planeta: la banalización. Todo el mundo está hipnotizado por la producción y los servicios: la red hidráulica, los, ascensores, los baños, la lavadora.”

   Su crítica a la Sociedad del espectáculo es una de las expresiones teóricas fundamentales del Situasionismo y es ahora quizá más vigente que en el momento en el que fue escrita, justo antes de los acontecimientos de la revolución de París en mayo de 1968, antes de esa efervescencia del mundo en 1968 que tocó Francia, México, Estados Unidos, España, Checoslovaquia, en el 69 a Italia y en 1973 Gran Bretaña.

   En la Sociedad del espectáculo Debord establece una conexión entre el espectáculo y la economía, el libro esencialmente replantea los conceptos marxistas de fetichismo y alienación de las mercancías para el cine, la publicidad y la era de la televisión. El espectáculo se presenta como algo enormemente positivo, indiscutible e inaccesible. “El espectáculo es la pesadilla de la sociedad moderna encadenada, que no expresa finalmente más que su deseo de dormir. El espectáculo es el guardián de este sopor” (Deboard, 1967).

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