Sintesis de tomochic
Enviado por benito armento • 21 de Noviembre de 2016 • Síntesis • 2.844 Palabras (12 Páginas) • 377 Visitas
TOMOCHIC
CAPITULO I :CALUMNIA Y VERDAD
Eran las dos de la tarde, Miguel Mercado un subteniente del noveno batallón se encontraba en una plazoleta de ciudad Guerrero. Mercado se encontraba muerto de hambre y buscaba una fonda, caminando por la plaza contemplado el ambiente tan desolado de dicho lugar llego a unos portales, entro a uno de ellos de echo el mas amplio de todos, entre dos puertas vigilado por dos tipo altos y fornidos paso adentro. Llegando adentro pidió una copa de tequila junto con un vaso de agua ,de repente Miguel pregunto en donde podría encontrar una fonda ,un gigantón respondió de forma muy grosera que no sabia. Al observar la hostilidad de las personas en el lugar decido callar y de repente alcanzo a distinguir una cara conocida, era el teniente Gerardo que provenía del estado mayor a quien conocía desde México, rápidamente Gerardo reconoció a Miguel y se acerco. Los dos se saludaron y Miguel pregunto que en donde podía comer, Gerardo respondió que se dirigía para allá y que lo podría llevar pero claro si tomaba una copa con el, Miguel acepto y platicaron de lo que paso el 2 de septiembre de 1892 donde encabezados por el general Rangel atacaron a Tomochic con dos perdidas, un herido y la captura del general era lo que había pasado según Gerardo, Miguel sonrió y pensó que era una mentira ya que se habían corrido rumores de dicha batalla, enseguida los dos salieron y se dirigieron a la fonda en donde se encontrarían varias tropas.
CAPITULO II: ¡ QUE LINDA!
Al llegar al lugar Miguel alcanzo a apreciar unas algarabía de voces, gritos y carcajadas, al entrar noto que se encontraban oficiales del Quinto Regimiento, Undécimo Batallón y del “ Cuerpo de Seguridad Publica” del estado de Chihuahua, y pudo comprender que eran jefes. Gerardo ordeno a una mujer llamada Cuca y Miguel presto atención a las conversaciones, después de pasear su vista ubico a Castorena, un subteniente del Noveno Batallón, al que consideraba su enemigo. Castorena se encontraba ya ebrio y de improviso propuso un brindis entre varios aplausos dos criadas atareadas llevaron platos o botellas de cerveza según sea el caso. El coronel Torres que provenía de Sonora que con todo el Duodécimo Batallón venían a dar apoyo ya que se sabían mover bien mediante la sierra. El capitán del Noveno que dio referencia a la perdida del 2 de septiembre la cual era provocada por una causa en especifica la cual era la traición de Santa Ana Pérez , de inmediato Castorena pregunto quienes eran esos terribles hombres los cual el mayor contesto que son hombres que conocen su arma como su palma de la mano, también se comento que eran ignorantes y altaneros y estos hombres terribles desobedecían al clero y al gobierno. Cuca de repente llego con dos platos humeantes y sabrosos caldos que bebieron a sorbos, de repente el mayor empezó a hablar de la batalla que se iba a llevar a cabo en Tomochic, al momento que Miguel comía escuchaba las palabras del general y recordó que hacia dos años se encontraba en las filas del Noveno Batallón, al cual se integro por una noble causa y abandonar sus estudios del colegio militar, esa era su madre. Melancólico Miguel escucho una voz tan dulce que lo llevo a concentrarse de donde venia dicha voz y no alcanzo a ver su rostro ya que paso muy rápido y entonces una criada le comento que la jovencita venia de Tomochic y dicen que es hija de San José. Después de escuchar los rumores de tan bella dama sonó una llamada de honor en el Cuartel General y todos se levantaron pagando tres reales a Cuca, mientras esperaba el cambio volvió a escuchar la voz tierna de aquella jovencita y murmuro ¡Que linda!.
CAPITULO III: TROPA HEROICA
El día tres de octubre de 1892 Mercado terminaba después de comer una carta a su madre en una fonda del barrio de Peralvillo, en México, su madre que se encontraba con una miga en Tacubaya, cuando terminaba la carta y ponía la dirección, se dirigió al cuartel que se encontraba enfrente de la fonda y se dio cuenta inmediatamente que mas de medio batallón partiría por el tren Central, esa noche para Chihuahua de inmediato se alisto y subió a un vagón repleto por soldados y maletas. Para cuando llego a Chihuahua habían pasado dos días y dos noches la ultima a las ocho se encontró formado frente a la estación. Se puso a pensar lo que pasaba en Chihuahua, un pequeño pueblo que se encontraba en los mas profundo de la Sierra Madre, el cual se había revelado contra el gobierno y el clero . Sabia Miguel que los hijos de Tomochic eran temerarios y iba a ser una ardua tarea luchar contra ellos. Cruz Chávez, el caudillo predicaba una especie de religión de catolicismo carismático, propias de un estado inculto y de ignorancia. En todo el distrito de Rayón, en gran parte de Chihuahua se corrían nombres hasta llegar al Noveno Batallón. En ciudad Guerreo se realizo la concentración del Noveno Batallón, Quinto Regimiento y una compañía del Undécimo Batallón el ultimo sobrevivió al ataque del dos de septiembre, también se les otorgo una serie de municiones. A los del Noveno Batallón se les otorgo seis jornadas que hay de Chihuahua a Concepción Guerrero. El día diez se empezó su marcha, al día quince se llego a la ciudad. El Noveno Batallón ya hacia ,mas de ocho años que se hallaba inmovilizado y ya se notaba lo antes mencionada ya que sus marchas tenían que tener correcciones. Después de rendir las jornadas se dirigían a rancherías en donde no eran muy amigables ya que a veces los pobres regresaba sin comer.
CAPITULO IV: LAS SOLDADERAS
El melancólico oficial se acercaba a la Sierra, las mujeres “soldaderas” que seguían a sus viejos proveían de comestibles, sucias y empolvadas. Miguel les tenia miedo y admiración a la misma vez que le inspiraban ternura y horror, ya antes las había observado en los barrios del México. El subteniente Mercado gustaba de oír las charlas de los grupos, ya que se mencionaba muchas historias y suposiciones de lo que iba a pasar. En la Alameda acamparon los dos batallones la cual se encontraba en la Sierra
CAPITULO V: LA MANO DEL GENRAL DIAZ
Miguel salió de la fonda con el recuerdo de la tomochiteca se dirigió a su campamento en la Alameda donde la tropa comía y descansaba, su perímetro estaba rodeado con casuchas bajas y aspecto triste y desolado cuando de pronto llego a la Alameda una multitud de vendedoras , en la noche los oficiales fueron a cenar a la fonda y se les otorgo una gran noticia la cual comunicaba que el teniente coronel Ramirez de Undécimo Batallón fue puesto a libertad. La noticia llevo a una conclusión la cual era no esperar el ataque y estar bien armados, juntando fuerzas de los pueblos de la sierra y algunos bandidos esperaban la gran batalla. Había dos versiones de como fue liberado el coronel Ramirez y una de las mas aceptadas era que había hablado con Cruz arrodillándose ante la imagen de la Santa Cabora y permaneciendo días enteros orando y se cree que lo convirtió, claro se encontraba la versión oficial la cual decía que había llamado a Cruz para decirle que lo fusilara y Cruz otorgo una escolta para entregarlo a la entrada de Guerrero. También s corrió otra noticia que trataba que el general Rangel dirigiría a las tropas desde Guerrero, en realidad se sabia que era inútil tener un jefe ya que el general Díaz daba instrucciones desde su gabinete mediante telégrafos. Castorena era el payaso tenia veinte años y era un borracho que disfrutaba la vida, Castorena pidió prestada la guitarra de Cuca para cantar algunas canciones para alegrar el animo.
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