“TINTA DE SANGRE”

“TINTA DE SANGRE”

A finales del siglo XXI el mundo vivió increíbles cambios, pocos continentes y ciudades mantenían sus costumbres, cultura y tradiciones intactas, sin embargo, en el transcurso del silgo XXII estas se vieron afectadas por la tecnología. En el principio, se veía la inclusión de la tecnología como una gran ventaja en la humanidad, a través de su uso como herramienta facilitadora de la vida diaria; ahora es un modo de vida.

Muchos críticos veían esto venir, la costumbre de depender mayormente de la tecnología para desempeñar hasta las tareas más simples, iban a modificar por completo el papel de los seres humanos en la sociedad. Pero, al final de cuentas ya era muy tarde echarse para atrás, cada ser humano idealizó la funcionalidad de esta herramienta a tal punto de volverla un Dios al que rendían tributo, donde pocos se ponían en contra de él ya que conocían su poder.  

En una de las ciudades donde se evidenció actos extremistas fue en la antes llamada “Estambul” ubicada en lo que era Turquía, su población pasó de ser habitada por humanos, a ser sustituida por máquinas.  Los robot-humanos podían sentir, emocionarse y sufrir, experimentando cierto tipo de emociones artificiales que los hacían mucho mejores frente al rendimiento de los humanos. La ciudad coexiste a causa del funcionamiento de la tecnología, donde sus habitantes basan sus creencias en chips, circuitos y capacidad de duración de por vida.

Dejando atrás la cultura de la humanidad, Estambul desarrolla sus propias costumbres a partir de sus creencias en máquinas tecnológicas que suplen por completo las capacidades motrices y sensoriales de un individuo cualquiera. Por esto, está nueva sociedad desarrollada con base en su Dios tecnología, restaba importancia a las características innatas de los humanos, considerándose a sí mismos inferiores a una máquina y destinados a convertirse en subordinados de su propia creación.

...