TURQUÍA

Turquía se caracteriza por que posee dos diferentes faunas en la costa están los bosques mientras que en el interior la estepa.

Entre los bosques se distinguen dos grupos: los húmedos (pino silvestre, picea, haya), que cubren la cordillera del Ponto, y los secos (pino negro, cedro, enebro), que se encuentran sobre todo en la cordillera del Tauro.

Pero, estos bosques se hallan amenazados por la tala; cada año, los turcos cercenan de los bosques unas 6 000 ha para convertir las tierras en zonas de cultivo o en áreas para la cría de ganado.

Las costas de Turquía son las más fértiles del país, sus bosques poseen helechos y coníferas, pero más resaltante es el pino calabrés. En la costa se puede apreciar gran variedad de aves pues la mayoría son de otros países, como por ejemplo: los corys las pardelas de manx y gaviotas mediterráneas.

En el bosque se pueden llegar a encontrar osos, chacales, hienas rayadas, jabalíes, geckos turcos, etc.

El Bósforo, para un ornitólogo su paraíso repleto de una gran variedad de aves, son la épocas de otoño y primavera en las que se les puede apreciar en paisajes únicos; las aves a destacar son milanos negros, pardelas levantinas, halcones de pata roja, vencejos alpinos, etc.

En Turquía se pueden diferenciar ciertos idiomas, el oficial el turco. Aunque por motivos de turistas se puede encontrar más idiomas como el español y el inglés.

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