TtRATADO DE ALGECIRAS

La recién creada Alemania no ve con buenos ojos el reparto del mapa de África y especialmente la creciente potencia colonial de Francia e Inglaterra que dominan la zona.

Además Marruecos estaba siendo un objetivo prioritario de los intereses germanos en la zona. El 31 de marzo de 1905, el káiser Guillermo II inquieto ante las operaciones de las tropas de Lyautey en la frontera y a iniciativa del Canciller Von Bulow desembarca en Marruecos en Tánger. Guillermo II es recibido con los honores protocolarios por un tío del sultán, Mulay Abdelmalec, que tuvo que salir a toda prisa desde Fez para la ocasión. El emperador hizo trasmitir al sultán de Marruecos su predisposición a preservar la unidad e independencia del país, en pie de igualdad con el resto de las naciones desarrolladas del mundo. Para reafirmar posiciones y simultáneamente a la visita imperial a Tánger, Alemania envía una delegación al Sultán, que se encontraba en Fez, encabezada por el Conde Tattenbach y acompañada por el Caid Challak Rebeï.

Las tensiones internacionales desembocan en la convocatoria de una Conferencia internacional en Algeciras, a petición del Sultán y bajo la presión de Káiser. Del 7 de enero al 6 de abril de 1906. Trece países participan y Francia puede ser considerada la potencia vencedora.

A las sesiones, celebradas en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de la ciudad, asistieron representantes de:

• Alemania, representada por el Conde de Tattenbach y por el Sr. de Radowitz.

• Francia, representada por el Sr. Révoil.

• España, representada por el Duque de Almodóvar del Río y por el Sr. Pérez Caballero.

• Marruecos, representado por Sidi Mohamed ben Larbi Torres y por Sidi Mohamed el Mokri.

• Reino Unido, representada por Sir Nicolson.

• Imperio Austrohúngaro, representada por los Condes Redolph de Welzersheimb y Bolesta-Koziebrodzki.

• Estados Unidos, representados por los Sres. White y Gumneré.

• Bélgica, representada por el Barón Joostens y por el Conde de Buisseret.

• Reino de Italia, representada por el Marqués Visconti-Venosta y por el Sr. Malmusi.

• Países Bajos, representados por el Sr. H. Testa.

• Rusia, representada por el Conde Cassini y por el Sr. de Bacheracht.

• Portugal, representada por los Condes de Tovar y de Marteus-Ferrao.

• Suecia, representada por el Sr. Sager.

España, con el gobierno de Francisco Silvela, abandonó la política germanófila para acercarse a Francia y contrarrestar la presencia británica en Gibraltar. Además cederá posiciones porque necesita aliados en su creciente enfrentamiento con Alemania.

Algunas de las consecuencias son cuando menos, contradictorias. Por una parte, la “independencia” de Marruecos es afirmada allí, pero los principales puertos caen bajo el control de Francia y de España y a

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