Análisis del libro "Los Cuatro Acuerdos"

Índice

Introducción2

Primer Acuerdo3

Segundo Acuerdo6

Tercer Acuerdo8

Cuarto Acuerdo11

Conclusiones13

Introducción

En este documento se hará un análisis del libro “Los Cuatro Acuerdos” del autor mexicano Miguel Ruíz. En este análisis no sólo hablaré del libro en general, también incluiré varias frases del autor que me parecieron muy interesantes y me hicieron reflexionar sobre cosas pequeñas que puedo hacer para mejorar mi vida considerablemente.

Al principio, cuando se asignó la tarea, el primer pensamiento que me vino a la mente fue “¡¿más tarea?!” e inmediatamente pensé en no hacerla. Sin embargo, el fin de semana se cancelaron mis planes y recordé que había tarea y decidí darle una a oportunidad al libro. No voy a mentir, no lo leí todo pero sí leí una buena parte.  En general, el libro me pareció muy interesante. Este se divide en cuatro partes o acuerdos  y en este documento se analizará cada una de estos.

Primer Acuerdo: Se impecable con tus palabras

“Las palabras son la herramienta más poderosa que tienes como ser humano, el instrumento de la magia. Pero son como una espada de doble filo: pueden crear el sueño más bello o destruir todo lo que te rodea.” es una de las primeras frases que me llamaron la atención en todo el libro y casualmente es una de las primeras del primer acuerdo. Yo siento que esta frase en general resume todo lo que trata este primer acuerdo. El nivel de comunicación que tenemos los humanos es una de las cosas que nos diferencia de los animales. Una sola palabra nuestra puede cambiar por completo la vida de alguien más, lo cual me parece sorprendente. Antes de realizar esta lectura, jamás me había puesto a pensar en lo poderosas que son nuestras palabras.

“Estoy gordo. Soy feo. Me hago viejo. Me estoy quedando calvo. Soy estúpido, nunca entiendo nada. Nunca seré lo suficientemente bueno. Nunca seré perfecto». ¿Ves de qué modo utilizamos las palabras contra nosotros mismos? Es necesario que empecemos a comprender lo que son las palabras y lo que hacen. Si entiendes el Primer Acuerdo (Sé impecable con tus palabras), verás cuántos cambios ocurren en tu vida. Tu opinión no es más que tu punto de vista, y no tiene por qué ser necesariamente verdad. Tu opinión proviene de tus creencias, de tu ego y de tu propio sueño. La impecabilidad de tus palabras también te proporcionará inmunidad frente a cualquier persona que te lance un hechizo. Solamente recibirás una idea negativa si tu mente es un campo fértil para ella.” Es otra frase (o más bien, párrafo) que en verdad me parece muy bonita ya que siento que todos, en algún momento en nuestras vidas, nos hemos sentido inseguros por diferentes motivos como nuestra apariencia, peso, mentalidad, etc. A lo largo de este primer acuerdo, el autor Miguel Ruiz habla mucho sobre las inseguridades de una persona y cómo las palabras pueden tener un efecto negativo sobre nosotros mismos.

El autor menciona que “tu opinión no es más que tu punto de vista, y no tiene por qué ser necesariamente verdad” lo cual es muy cierto, pero puede que tu opinión sí sea verdad; sin embargo volvemos a lo mismo, la manera en la que las cosas se dicen puede cambiar todo.

 “Puedes medir la impecabilidad de tus palabras a partir de tu nivel de autoestima. La cantidad de amor que sientes por ti es directamente proporcional a la calidad e integridad de tus palabras. Cuando eres impecable con tus palabras, te sientes bien, eres feliz y estás en paz.” es la última cosa que quiero mencionar de este primer acuerdo. Según Ruiz, tu autoestima se puede medir con tus palabras y creo que tiene razón y  en la mayoría de los casos es cierto, sin embargo no creo que siempre lo sea.

En conclusión, el primer acuerdo es bastante simple de entender, sin embargo no encuentro las palabras para hacer énfasis en lo importante y poderosas que son las palabras; como dije anteriormente, una sola palabra puede cambiar por completo la vida de una persona, o tu propia vida.

Segundo Acuerdo: No te tomes nada personalmente

Este segundo acuerdo es bastante sencillo de recordar y creo yo que es algo que escuchamos siempre pero si nos ponemos a reflexionar, ¿lo ponemos en práctica? Este segundo acuerdo se denomina “no te tomes nada personalmente”.

Todos vivimos en nuestro propio mundo, pero a veces es difícil recordar que no todo gira a nuestro alrededor; a lo que el autor dice que “la importancia personal, o el tomarse las cosas personalmente, es la expresión máxima del egoísmo” con lo cual no estoy cien por ciento de acuerdo ya que muchas de las veces que pensamos que algo tiene que ver con nosotros (sea cierto o no) no lo hacemos intencionalmente. A veces, creo yo, que nuestras inseguridades nos hacen estar siempre al pendiente de las cosas que pueden decir de nosotros.

La gente siempre va a hablar, sean personas que no nos agradan o personas que amamos, pero siempre van a hablar y puede que lo que digan no sea lo que queremos escuchar. Miguel Ruiz menciona en el capítulo 3 que no solo tenemos que aprender a escuchar o no lo que nos dicen los demás pero también nuestras propias voces: “tienes derecho a creer o no lo que esas voces te dicen y a no tomártelo personalmente. Tenemos la opción de creer o no las voces que oímos en nuestra propia mente.”

Tenemos que aprender a escucharnos a nosotros mismos, pero a escuchar lo que en verdad debemos escuchar, no las cosas negativas sin utilidad que inevitablemente pasan por nuestra mente. No debemos esperar que los demás nos digan la verdad porque ellos también se mienten a sí mismos. Debemos confiar en nosotros y decidir si creemos o no en lo que alguien nos dice y no tomarnos todo personalmente, que es la idea principal de este capítulo.

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