Análisis Fuente Ovejuna

Temas

Injusticia y abuso de poder: Encontramos al Comendador Fernán Gómez, un personaje tiránico y traicionero, quien viola y violenta sin remordimiento a las mujeres de los habitantes de Fuente Ovejuna- y otros pueblos- para alimentar su ego y para demostrar que él tiene el poder. Los Reyes Católicos son conscientes de que el Comendador tiene ese derecho pero no saben del abuso que él ejerce, por lo tanto, no actúan hasta que el pueblo unido acaba con la vida del Comendador y todo Fuente Ovejuna es llevado al Palacio de Fernando e Isabel para su juicio.

Fuerza colectiva: El pueblo de Fuente Ovejuna se une después de que Jacinta y Laurencia son ultrajadas. Hartos de los abusos y sometimiento del Comendador, el pueblo entero va a su palacio a matarlo. Cuando llega el pesquisidor que enviaron los Reyes Isabel y Fernando, ningún habitante dio otra respuesta que no fuera “Fuente Ovejuna lo hizo, señor”. A pesar de que se les torturó a algunos habitantes de Fuente Ovejuna, ellos permanecieron unidos, lo cual, les permitió hacer justicia.

Amor y honor: Laurencia y Frondoso son los enamorados en esta obra. Laurencia, una mujer que se distingue de las demás debido a su desinterés en el amor y su rechazo a las formas tradicionales, es quien mayor carga del honor lleva. Ella se rehúsa a satisfacer al Comendador cuando éste le exige irse con él a pesar de que ella conocía el riesgo de no cumplir la voluntad de su “superior”. Frondoso, un personaje desinteresado y valiente, defiende a Laurencia cuando Fernán Gómez trata de violarla. También encontramos en Frondoso la valentía de seguir digno a pesar de la tortura que recibe por parte del pesquisidor después de que Fuente Ovejuna asesina al Comendador.

Trama

El pueblo de Fuente Ovejuna es un pueblo pequeño, bajo el mando del comendador Fernán Gómez, un tirano abusivo, egoísta y cruel que explota al pueblo con altos impuestos y maltratos. Un día después de una batalla victoriosa se dirige a Fuente Ovejuna, donde ve por primera vez a la bella Laurencia. En esa época los señores feudales podían tener relaciones sexuales con las esposas o prometidas de sus vasallos debido al Derecho de Pernada o Prima Nocte, por lo que el comendador se aprovecha de esto y trata de llevarse a Laurencia con él. Ella, al ser una mujer bastante independiente y orgullosa, se niega los deseos del tirano, lo cual, lo enfada y lo deja enganchado a la frustración por el rechazo de una mujer. El comendador, acostumbrado a obtener lo que quería, regresó por Laurencia, sin embargo, en un intento fallido por violarla, Frondoso- el enamorado de Laurencia- llega a salvarla.

Esteban, padre de Laurencia y alcalde de Fuente Ovejuna, recibió una visita del comendador para reclamarle la “mala educación” de Laurencia y pedirle que la case con él, a lo cual, éste se niega. Más tarde, un soldado llamado Cimbranos llega a darle la noticia a Fernán de que en Ciudad Real se encuentra el ejército de Fernando e Isabel, así que éste va a defenderlo, traicionando así a los Reyes Católicos. Mientras tanto, Frondoso le pide matrimonio a Laurencia, ésta acepta pero le pide que primero hable con su padre. Frondoso pide la mano de su hija al alcalde, él acepta y le ofrece una dote a cambio de ella pero Frondoso la rechaza pues se siente ofendido. En poco tiempo la boda de los enamorados es celebrada, sin embargo, después de ser derrotado frente al ejército de los Reyes Católicos, Fernán regresa a interrumpir la ceremonia, aprehende a Frondoso y rapta a Laurencia.

Laurencia llega después de ser ultrajada a una reunión donde los hombres de Fuente Ovejuna discutían sobre los abusos de Fernán. Ella se alza como mujer ante un concejo de hombres, manifiesta su hartazgo y su deseo de venganza. Llama a los pobladores “ovejas”, pues han permitido que el Comendador los humille y se lleve a sus mujeres sin defender su honor. Tras un emotivo discurso, hombres y mujeres de todas las edades siguen a Laurencia en busca de venganza; gritan que mueran los tiranos, y al mismo tiempo, planean la muerte de Fernán Gómez. Con la llegada de los pobladores al palacio de Fernán, se frustra el plan del tirano de colgar a Frondoso de una torre. Cuando el pueblo enardecido irrumpe en el castillo, el comendador pide clemencia al igual que sus criados. Sin dudarlo, los pobladores de Fuente Ovejuna actúan como uno mismo y acaban con la vida del tirano, ponen su cabeza en una lanza. Flores, uno de los criados, alcanza a escapar para pedir ayuda a los Reyes Católicos. Basados en mentiras a conveniencia de Flores, los Reyes mandan a un juez a Fuente Ovejuna para castigar al responsable de la muerte de Fernán. El pesquisidor se encuentra con un pueblo unido, indoblegable, que no responde a torturas. Más de 300 fueron interrogados, se les preguntó ¿quién mató al comendador? y ni Mengo, el miembro aparentemente más débil que parecía iba a ceder, contestó más que “Señor, Fuente Ovejuna”. Ante tal negativa, el juez regresa con los reyes, les comenta lo sucedido y entran algunos villanos a contar las atrocidades cometidas por el difunto. Una vez enterados los reyes del abuso que ejercía Fernán Gómez y al no poder encontrar un responsable, deciden perdonar a Fuente Ovejuna y así, el pueblo viviera bajo su mandato directo hasta que llegue otro comendador.

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