Análisis temática "El túnel"

Dentro de la temática del libro “El Túnel”, podemos encontrar en gran medida la misantropía del personaje principal, Juan Pablo Castel, caracterizada principalmente por su odio y repulsión hacia la sociedad, la cual manifiesta mediante sus pensamientos y acciones a lo largo de la historia. A través de esto, es posible notar la incompatibilidad entre Castel y la sociedad, la cual evidentemente lo lleva hacia la aislación y la soledad, otro aspecto importante en la temática de la obra.

Desde el comienzo del relato, Castel nos deja claro el odio que tiene hacia las personas mediante la descripción que realiza de la humanidad, al decir que los seres humanos actúan casi siempre por mera vanidad. Por ejemplo, antes de comenzar su relato nos dice “Conozco bastante bien el alma humana para prever que pensarán en la vanidad. Piensen lo que quieran: me importa un bledo, hace rato que me importa un bledo la opinión y la justicia de los hombres.” Mediante esta cita, además de evidenciarse su misantropía, se evidencia la soledad que viene como consecuencia de ella, ya que su disgusto hacia las personas llega al punto en que no siente conexión con el mundo y por ende se aísla en sí mismo.

Por ejemplo, Castel explica por el comienzo del libro su especial odio hacia los gremios y los grupos de personas, el cual justifica ya que considera que en ellos se puede ver la vanidad de las personas de creerse superior a los otros, y porque en los gremios se da la instancia para que personas con iguales atributos se junten y por ende, éstos se amplifiquen, lo cual desagrada profundamente a Juan Pablo. A partir de esto, se puede notar otra evidencia de su misantropía, pues no soporta estar frente a conglomerados de personas que compartan intereses. Además, Castel no solo siente un odio por los gremios en general, sino que lo siente en específico por el de los pintores, a pesar de ser esta su profesión, ya que no tolera el hecho de que personas menos expertas que él critiquen su trabajo.

La misantropía de Castel viene como consecuencia de la incomprensión que existe entre él y el resto del mundo. Tal como se expresa a lo largo del relato, Castel siente que nadie lo entiende y que por ende está solo en el mundo, con lo cual viene ligada la repulsión que tiene hacia la sociedad. Esto lo podemos ver reflejado mediante su relación con María, ya que cada vez que están pasando por un buen momento, Castel se inunda de amor y alegría con respecto al mundo. Por el contrario, cuando su relación empeora y Castel se enoja, inmediatamente vuelve a sentir la repulsión y odio hacia todos. Por ejemplo, por los comienzos de su relación, cuando Castel logra llamar a María y ambos acuerdan reunirse al día siguiente, Castel explica que siempre ha odiado a la humanidad y a la gente amontonada, incluso llegando al punto en que no puede ni comer ni pintar por ello, sin embargo, pese a esto, nos dice “Esa noche, pues, mi desprecio por la humanidad parecía abolido, o por lo menos, transitoriamente ausente.” Es decir, debido a la felicidad que su conversación con María le produjo, fue capaz de dejar de lado su misantropía, e incluso nos cuenta sobre cómo fue al café Marzotto a escuchar tangos, una actividad que se aleja muchísimo de la personalidad habitual de Castel, pues le implica estar rodeado de personas.

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