EL AMOR COMO SINONIMO DE LUJURIA EN LA LITERATURA ANTIGUA Y MEDIEVAL

Al mencionar la palabra lujuria, lo primero que llega a la mente es, hablar de deseo y

de placer sexual, concepto que ha sido satanizado por la misma sociedad y la religión por

considerarlo pecado mortal. Sentir placer es parte de la respuesta sexual del ser humano, es

muy normal tanto de los hombres como de las mujeres, es decir, que este tipo de contestación

carnal, se da a fuera o dentro del matrimonio con fines distintos porque placer se responde con

placer, aunque la religión diga:<<que algo es pecado, no necesariamente lo es>>, tantas

personas en la historia que fueron catalogadas como impuras, lujuriosas, inmorales han

utilizado esta estrategia para proteger a un imperio, ejemplo Cleopatra “Reina de Egipto”, que

aun estando casada tenia romances con Julio Cesar, amor utilizado para su propio bien, aunque

para otros es producto de instinto carnal, de perversión y de pecado por el simple motivo del

roce de los genitales, el placer sexual se da con todo el cuerpo, si fuese así, todos ya

hubiésemos pecado por presentar debilidad, vinculo a los deleites de la pasión.

El amor, la pasión y la lujuria están concatenados a formar un solo vicio, el placer inmediato,

sinónimo de instinto carnal, que aparece cuando se intenta poseer a otro sujeto para obtener amor

fuera de las leyes divinas, por lo tanto es una deshumanización del ser humano que se da de manera

racional, ni una persona lo hace inconscientemente, siempre se tiene la noción de las consecuencias

de sus actos, aun que estos sean desagradables y no esperados. En la actualidad los jóvenes se han

predispuesto a que la vida humana y la sexualidad son inseparables y sagradas, sin embargo se han

llevado al límite, el deseo de tener a una mujer o a un hombre con características físicas atractivas,

han incitado a la juventud actual a que recurran a manías no adecuadas para enganchar a el

“Son los condenados a tormentos,

Los pecadores de la carne presa,

Que a instintos abajaron pensamientos” (Dante, 2000, pág. 28)

estereotipo de pareja ideal marcado por los medios de comunicación, que han bombardeado a la

sociedad actual.

Si nos remontamos a la época antigua nos daremos cuenta que la Lujuria y el Amor han

jugado un papel importante en el devenir histórico, ya que la seducción integra y cautiva a través de

estas. Las grandes seductoras de la historia antigua, Eva, Cleopatra y las sirenas mitológicas fueron

capaces de tentar a los hombres de honor y virtud, la seducción no es solo física, si no también es

mental, ya que esta se alberga en el cerebro, punto débil para el hombre y mayor ventaja para las

mujeres. El aroma es una de las influencias subconscientes más poderosas que afectan al juicio sobre

el sexo opuesto, el adecuado aroma es el único que puede incitar a la lujuria de un hombre e inclusive

de la mujer, liberando el animal sexual que uno lleva dentro, provocando un apetito incontrolable por

parte de alguno de los dos sexos o por default ambos:

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