"El Gaucho Insufrible" O El Último Viaje De Roberto Bolaño
Enviado por Dugiteo3 • 17 de Julio de 2013 • 3.265 Palabras (14 Páginas) • 1.412 Visitas
El Gaucho Insufrible o el último viaje de Roberto Bolaño
Ser poeta es más que un destino literario.
Raúl Gómez Jattin.
La escritura como profesión, o más exactamente, el ejercicio de la poesía como profesión, tiene implicaciones que abarcan todas las esferas del ser. No se puede ser parcialmente poeta, se es o no se es, no hay término medio ni estrategias atenuantes para allanar el camino, o te acostumbras a sus cuchillos, o simplemente escoges otro camino. Este asumir existencial, el del terrible llamado de la poesía, tomando estas primeras letras de la obra poética de Gómez Jattin, la comprendió muy bien y la asumió totalmente Roberto Bolaño. Así lo sobrellevó hasta el último momento de su vida, sin rehusar a su destino, plantándose sin reticencias frente a ese terrible espejo que no nos esconde el horror.
El Gaucho insufrible, la última obra preparada en vida por Bolaño para su publicación, a mi parecer, y conociendo poco de la totalidad de lo que escribió el chileno, es una demostración sin ambages de esa apuesta total de un escritor, que no se limitó a devorar libros y escribir otros, sino que lo entregó todo, lo asumió todo, hizo de la poesía, es decir, del acto creador y transformador que ella en esencia exige, el fondo inalienable de su existencia, de su vida.
La obra en cuestión, consta de cinco relatos ficticios y dos transcripciones de conferencias o discursos escritos por Bolaño. El texto aparece en el mismo año en que murió su autor, quien ya enfermo y totalmente consciente de su destino, redacta una suerte de despedida, cifrada simbólicamente en los relatos ficticios y descarnada, como un San Vicente despellejado, en el ensayo Literatura + enfermedad = enfermedad.
El libro inicia con un epígrafe de Kafka: Quizá nosotros no perdamos demasiado, después de todo, en el cual ya hay qué decir, porque se trata de un autor que como Bolaño nunca renunció a su destino, además considerado por Bolaño como el novelista más importante del siglo XX. Después de todo el sufrimiento, después de todo el horror, después de la muerte, quien lo entregó todo y se jugó toda la vida en ese hado irreparable, ¿qué puede perder? Así como Pepe el Tira es sobrino de Josefina la Cantora, Bolaño entraría a ser parte de la familia de Kafka (la de los viajeros de verdad), donde entrarían Borges, Baudelaire, Rimbaud, Mallarmé, etc.
El presente trabajo se concentrará básicamente en tres textos del libro. El primero de ellos, El gaucho insufrible, y el segundo, El policía de ratas, porque plantean un diálogo directo con otros relatos de ficción escritos por dos de los escritores más admirados por Bolaño: Borges y Kafka. El tercero de ellos, Literatura + enfermedad = enfermedad, por ser una reflexión acerca de la poesía y del qué hacer del poeta en el mundo contemporáneo, donde se plantea un diálogo intertextual con poemas de dos grandes poetas franceses del siglo XIX, Baudelaire y Mallarmé.
El gaucho insufrible
El Gaucho Insufrible, el relato que titula la obra (la cual, a mi parecer, debería estar titulada como Literatura Ɨ enfermedad = enfermedad), es un contrapunto al cuento El Sur de Borges, con un propósito de mejoramiento, de ironía y de humor. Trata sobre una parte de la vida de Héctor Pereda, un abogado viudo y citadino que llegado a cierta edad y después de haber criado a sus dos hijos, haber viajado por Francia e Italia, se había convertido en un hombre prematuramente avejentado. Ante ello, su hijo, que para entonces era un escritor de éxito, lo introdujo en las tertulias a las que asistía en la cafetería El Lápiz Negro. Aquí Pereda empieza a vivir una transformación en todos sus hábitos, tanto que a sus viejos amigos de siempre a veces les costaba reconocer en el nuevo Pereda al antiguo. Luego acontece el corralito, la crisis financiera argentina de principios de milenio, que se constituye en un detonante para la trama de la historia, puesto que entonces Pereda, quien solía decir que el campo no era lugar para gente como él, decide marchar a la estancia Álamo Negro, de su propiedad, ubicada en la pampa argentina.
En Sur el detonante es el accidente que tuvo el protagonista del cuento, Juan Dahlmann, secretario de una biblioteca municipal, quien luego de sobrevivir a una septicemia se marcha a su estancia ubicada en el sur por recomendación de su médico. Tanto Dahlmann como Pereda van al cumplimiento de su destino, pero en este último está el antecedente de haber leído el cuento de Borges:
…Recordó, como era inevitable, el cuento El Sur, de Borges, y tras imaginarse la pulpería de los párrafos finales los ojos se le humedecieron. (Bolaño, 2003: 24).
Por ello aquí hablamos de un mejoramiento, puesto que Dahlmann parece estar sometido completamente al arbitrio del azar y para él se cumple una de las primeras frases con las que inicia el cuento: Ciego a las culpas, el destino puede ser despiadado con las mínimas distracciones (Borges, 1956). Pereda, por el contrario, tomará sus precauciones cuando por primera vez entre a una pulpería sureña.
La ironía y el humor en El gaucho insufrible, se presentan también como relectura del cuento de Borges. Mientras Dahlmann lee en el camino la edición de Las Mil y Una Noches, Pereda se queda dormido y al despertar ve a un tipo aindiado que lee un comic de Batman; mientras Dahlmann ve jinetes en los caminos, Pereda ve una carrera de conejos (Un indio le dice a Pereda: Aquí ya no quedan caballos…, sólo conejos. Pereda pensó que era un chiste y soltó una risa seca y breve…, los gauchos habían vendido sus caballos al matadero y ahora andaban a pie o en bicicleta o pedían autostop por las interminables pistas de la pampa); mientras Dahlmann queda hechizado ante el gaucho viejo y pensaba que gauchos de ésos ya no quedan más que en el Sur, los gauchos que ve Pereda no tenían caballo y en vez de sombrero de ala usaban gorros hechos por ellos mismos con pieles de conejo. Además cuando Pereda entra una pulpería donde todo era tal como había leído en Borges los tres jóvenes feroces y burlones de El Sur, en el cuento de Bolaño dieron un salto no más vieron entrar el caballo. Para finalizar esta parte, que en El Sur conlleva al final del cuento y muy seguramente a la muerte de Dahlmann, vale la pena citar la última frase de este párrafo, pues aquí Pereda logra el tour de forcé o la peripecia respecto al cuento de Borges y cambia su destino:
Al marcharse, después de pedirle al pulpero que le anotara la consumición en su cuenta, mientras pasaba junto a los gauchos jóvenes, para reafirmar su autoridad, les pidió que se hicieran a un lado, que él iba a escupir. El gargajo, virulento, salió casi de inmediato disparado de sus labios y los gauchos, asustados y sin
...