Ensayo La Perra Pilar Quintana
Enviado por mariajoramos • 16 de Abril de 2021 • Ensayo • 1.356 Palabras (6 Páginas) • 448 Visitas
[pic 1]Ensayo académico
Situación problema: uno de los pilares en los que se edifica la historia de esta novela es el tema de la maternidad. Damaris, una mujer madura, afrodescendiente, del Pacífico colombiano, palía su incapacidad de ser madre adoptando una perra recién nacida. Esta situación de madre-hija (Damaris/perra) es el medio a través de la cual la autora explora los claroscuros del ejercicio materno y de las convenciones sociales y culturales que lo envuelven.
Pregunta problema: ¿Cuál es la visión ideológica acerca de la maternidad predominante en la obra y cuáles son sus principales rasgos? Esta pregunta eje puede complementarse con las siguientes: ¿qué implica para Damaris ser madre y más aún cuando ella es una mujer negra, pobre, cercana a los cuarenta años de edad?, ¿a qué visión o corrientes teóricas feministas se afilia la idea de la maternidad de la autora?
María José Ramos Gómez
Literatura colombiana
Universidad del Norte
Basada en la historia personal de una de sus amigas, después de haber vivido en el Pacífico colombiano y mientras lactaba a su hijo Salvador, Pilar Quintana narra la historia de una mujer llamada Damaris, levantada en el contexto de una familia disfuncional, y en ocasiones violenta, que vive con un hombre desde muy joven y cuyo fin último es ejercer la maternidad, consiguiéndolo finalmente a través de una cachorrita que adopta y nombra Chirli. En este relato, Quintana muestra la otra cara de la maternidad, y no solo por el hecho de paliar ese deseo que tienen muchas mujeres, con un animal en este caso, sino también dejando ver que esta no es una experiencia netamente positiva, sino que envuelve matices dados por diversas emociones, muchas veces contrarias entre sí. Por medio de este ensayo académico relacionaremos algunas propuestas feministas con esta narrativa y reflexionaremos en torno al tema de la maternidad.
Las propuestas feministas surgen desde la asignación, tiempo atrás, de este rol exhaustivo para la mujer como quien ejerce en su totalidad la maternidad, que no solo es difícil, sino también, se creía, estaba dado por la misma naturaleza, es decir, de manera instintiva, razón por la cual se le restaba importancia social a la misma; sin embargo, la propuesta de Quintana nos acerca a una visión posmoderna, en la que esta obedece a un constructo social, está institucionalizada y es la razón por la que hay frustración cuando es difícil de alcanzar, como en el caso de la infertilidad.
Saletti Cuesta recopila información de diversas fuentes que plantean la idea de que la maternidad resulta una imposición del sistema patriarcal, dado que, este mismo, se ha encargado de lo que corresponde a la educación de la mujer y dictamina que todas deben desearla y ejercerla, el llamado “eterno materno”, haciendo caso omiso al contexto en el que cada una se encuentra y estableciendo una regla general, para seres tan particulares. Damaris, la protagonista de “La perra”, después de percatarse de no poder quedar embarazada a pesar de intentar en múltiples ocasiones, decide convencer a Rogelio, su pareja, de intentar todo lo que estuviera en sus manos para cumplir su deseo, resultando fallido cada esfuerzo hecho por ellos y por otras personas conocidas en la región por resolver este tipo de casos. Damaris creció rodeada de mujeres que ejercían su maternidad, como su tía y su prima, y aunque no se deja ver que se le dijera textualmente que debía ser mamá, comentarios impertinentes y su crianza le hacían sentir que era un error de la naturaleza por no poder concebir lo que en definitiva marca su vida, el valor que ella misma se da, la relación con Rogelio, con su familia y sus vecinos.
Tras este fracaso, Damaris adopta a Chirli, como una forma de suplir el deseo de ser madre, y lo toma así, “Chirli”, es, de hecho, el nombre que había pensado ponerle a su hija, y eso confirma que, independiente de que fuera una perrita, ejerció de algún modo la maternidad con ella, hecho que más adelante le repudiarán conocidos y familiares.
El patriarcado que domina nuestra sociedad permite ciertas expresiones de feminidad, como la maternidad, sin embargo, excluye otras como el placer sexual, exponiendo que la mujer es quien debe sujetarse al hombre, estableciendo una relación similar a la dada por naturaleza versus cultura, donde la naturaleza debe ser dominada; lo cual resulta una paradoja en este contexto, en que se establece la maternidad como un deseo innato, infravalorado por esta razón, que a su vez, es una exigencia para la mujer, a quien se le vigila durante todo el tiempo que la ejerce y quien es juzgada si se sale del lineamiento del amor maternal que se mantiene dentro del modelo patriarcal, bien obligándola a reprimir cualquier otro tipo de emociones o pensamientos individuales que pueda tener, reduciéndola a una fábrica y guardería de niños.
...