Ensayo de Anna Karenina

Unidad Educativa Municipal Sebastián de Benalcázar

Programa del Bachillerato Internacional

Literatura

Ensayo de Ana Karenina

¿En qué medida la estructura social de la Rusia del siglo XIX ocasionó que el actuar de Anna Arcadievna fuera negligente para con la sociedad?

Kevyn Jiménez

Segundo BI G

Licda. Marcia Barros

25 de abril de 2020

"La felicidad de una persona casada, depende de las personas que no se han casado con ella". - Oscar Wilde

Liev Nikolaievich Tolstoi nació en Yásnaia Poliana, Tula (Rusia) en 1828 y murió el 20 de noviembre de 1910, hijo del Conde Nikolai Ilich Tolstoi y la Princesa Maria Nikolaievna Volkonski. El joven Tolstoi demostró ya desde temprana edad una sensibilidad superior y un espíritu crítico algo fuera de lo común. Sin duda, la temprana muerte de sus padres marcaría el carácter sensible y apasionado del novelista. En 1862 contrajo matrimonio con Sonia Andréievna Bers, una influencia decisiva en las obras del novelista. Junto a ella escribiría sus obras principales, “Guerra y Paz” (1869) y “Anna Karenina” (1877). En “Anna Karenina”, el autor ahonda profundamente en el sentido de los personajes y el “anhelo de libertad” enmarcado en un contexto social común, donde la exuberancia de la obra deja paso a un pesimismo muy marcado al mostrar que el autor ha perdido la fe en poder lograr la libertad, hecho que remarca el objeto del siguiente ensayo que buscara determinar la influencia de la estructura social de la Rusia del siglo XIX en el actuar, negligente para con la sociedad, de Anna Arcadievna.

En una sociedad zarista, Anna Arcadievna, mujer casada, dedicada a su hijo y su marido fue llamada a la ciudad de Moscú por su hermano, Esteban Oblonsky, para ayudarlo con problemas conyugales causados por su infidelidad.  En este lugar, Anna conoció a un hombre llamado Wronsky, capitán del Ejército Ruso, quien influyó en la percepción que tenía Anna del mundo, llegando a entablar una relación secreta con él. En esta faceta de la obra identificamos que Anna y Wronsky tienen doble moral, frivolidad y pomposidad funcionaria. Sin embargo, este adulterio es desenmascarado por la propia Anna cuando no logra controlar sus emociones instantes después de que Wronsky sufriera una caída en las carreras de caballos. Luego de esto Alekséi Aleksándrovich Karenin, esposo de Anna, la insta a dejar las aventuras atrás para centrarse en el papel que estaba “obligada” a cumplir, hecho que no remarca mas que el amor excesivo de Alekséi por las apariencias y cuyas decisiones no resolvieron absolutamente nada. Así, se presenta un escenario donde la tal llamada moral jugo un papel contraproducente en la vida de quienes la desafiaron, la defendieron y en quienes aún no la conocían.    

Además, a lo largo de la obra Anna recalca de manera continua que su situación no la lleva a avergonzarse, porque su amor es verdadero y, por lo tanto, legítimo. Para ella, la verdadera humillación habría sido permanecer en su matrimonio con Karenin, con el solo fin de conservar las apariencias. Así, lo que realmente es intolerable para los censores de la sociedad rusa es el desafío que Anna plantea a través de su rechazo a la hipocresía, puesto que la sociedad rusa prefiere el cinismo de Dolly, quién a pesar de tener un amante a vista y paciencia de todos, jamás rompería con las estructuras familiares para dejarse llevar por sus sentimientos. Ante esto se remarca que la historia se desarrolla en un mundo y un tiempo injustos, donde los hombres no pagan ninguno de los precios a los que las mujeres sí están obligadas, basta mencionar la falta de represalias ante la infidelidad de Stiva y la libertad con la que Wronsky se desplaza por los círculos de la sociedad sin recibir reproche alguno mientras que Anna es discriminada en cualquier lugar al que va y hasta llega a ser insultada en el teatro por una mujer del palco contiguo.

Este marco funesto que envuelve el amor que comparten los amantes se extiende cuando Wronsky va al casino a encontrarse con Levin y Oblonski en una fiesta llena de hombres influyentes y cargada de vodka, mientras que Anna permanece en la penumbra de sus habitaciones, donde solo los indóciles a las reglas imperantes se aventuran a visitarla y donde, además, debe soportar la agonía de dar luz y criar a la hija de Wronsky. El encierro y la inacción quizá sean las peores condenas en vida que podemos imaginar, estado que ocasiona el aumento de la repulsión de Anna hacia la sociedad y que a la vez pierda el juicio a razón de celos irracionales y mal fundamentados ante el pánico que sentía por la posibilidad de una infidelidad y el abandono de Wronsky. Es así que, en la estación de trenes donde conoció por primera vez a Wronsky, al no soportar mas la idea de la “traición” se lanzó a los rieles para acabar con su desastrosa situación. Aquí está la mayor reivindicación de Anna Arcadievna debido a que muere porque es víctima de esos ojos que la juzgan con una vara distinta a aquella con que juzgan a Wronsky, porque siendo mujer, tuvo la pretensión de ser libre de decidir a quién amar.

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