ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Ensayo hombre duplicado


Enviado por   •  12 de Febrero de 2019  •  Ensayo  •  1.432 Palabras (6 Páginas)  •  242 Visitas

Página 1 de 6

Producción y comprensión de textos I Grupo: 301

Cristian Leandro Romero Galeano Código: 20182578061

EL HOMBRE DUPLICADO

En el siguiente ensayo se verá reflejada una idea tomada del libro: el hombre duplicado, escrito por el portugués José Saramago, ganador del premio nobel de literatura en el año 1998.

Desde que nacemos, con el pasar de los años vamos creciendo y formando nuestra propia identidad, esta que nos hace distintos en todos los sentidos. Creemos que cada ser es incomparable en cualquier sentido descriptible, pero qué pasaría si por alguna razón encontramos a nuestro duplicado; aquella persona que tanto física como mentalmente sea igual a nosotros, donde todas las coincidencias desde el tipo de sangre, hasta el día de nacimiento coincidieran y que por alguna casualidad en nuestra vida no la topáramos. Esto es lo que nos quiere decir el libro y es lo que pretendo explicar más adelante.

Único y diferente: ¿lo seré realmente?

La identidad se define como: “una serie de rasgos, atributos o características propias de una persona, sujeto o inclusive de un grupo de ellos que logran diferenciarlo de los demás”. Según esto la identidad la vamos forjando desde el día en que empezamos a tener conciencia de lo que hacemos o inclusive mucho antes. Entonces desde que somos unos niños vamos buscando nuestra propia identidad; esta identidad de niñez por así decirlo es muy pasajera, ya que se rige por el cambio durante nuestro crecimiento personal. Una época donde la identidad toma fuerza y es decisiva para poder definirnos, es la adolescencia. Tomamos decisión propia y empezamos a ver qué nos gusta, tomando como referencia esto para encontrar nuestro propio yo y con esto llegar a ser personas disimiles.

Cuando hablamos de identidad, estamos hablando de dos factores muy importantes: El factor mental y el físico. En vista de que no solamente somos distintos en cuanto al aspecto, sino también en el pensamiento. Cada persona tiene su forma de pensar. Por esta razón es muy difícil saber qué está pasando en la mente de un individuo callado y distraído o del que golpea y abusa de los demás. Nadie sabe lo que pasa en su mundo de fantasías que crea gracias a su mente. Entonces podríamos decir que esta es la identidad que nunca podremos perder, puesto que es nuestro ser y sin importar nada este no podrá ser cambiado.

El factor físico por el cual el mundo conoce nuestra primera impresión y según eso nos clasifica. La sociedad toma como criterios para definir cada persona su forma de vestir, peinarse y clase social. Algo tan incoherente en nuestro mundo actual, donde “todo entra por los ojos”. Herbert Marshall McLuhan nos dice: “A la velocidad de la luz, todos se fusionan con todos. La identidad privada desaparece”. Entonces llegara el momento donde nadie tendrá su propia identidad y solo seremos el reflejo de unos cuantos, y en cuanto a la clasificación; el que no quiera seguir estos estándares será el “raro” o “antisocial”, porque esta es la maldición del siglo XXI, el criticar al diferente.

Por otra parte, el factor mental es el que en realidad nos define como seres auténticos y particulares (cada mente es un sinfín de historias y acontecimientos del día a día). Nadie sabe que pensamos en este momento, dado que la mente es una fosa profunda, donde nuestros más profundos secretos son guardados con llave para no ser descubiertos, con la única excepción que nosotros mismos los revelemos. Entonces según lo anterior, nuestra identidad está basada en el cómo pensamos y según esto podemos cambiar nuestro aspecto físico, para que sea por así decirlo el espejo de nuestra mente.

En otro sentido actualmente la identidad está muy regida por las redes sociales, estos pilares que nos da la sociedad y que debemos seguir. Es muy poca la población que es auténtica y distinta, y estas personas “únicas” son las que todo el mundo intenta copiar, entonces somos más que la imagen de algunos que sobresalen, aquellos que son expuestos frente a cámaras y por diversos medios publicitarios; por lo tanto, las personas del mundo actual no son más que la copia de otro, y cada día que transcurre perdemos nuestra identidad propia y solo nos regimos a la de algunos, como decía Andy Warhol: “Lo que cuenta no es quién eres, sino quien creen que eres”. En fin… esto es solo un motivo de controversia y discusión que parece no tener un desenlace.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (8 Kb) pdf (96 Kb) docx (10 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com