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Eran Las 3 De La Mañana


Enviado por   •  9 de Septiembre de 2014  •  1.178 Palabras (5 Páginas)  •  271 Visitas

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Eran las tres de la mañana y no podía dormir, pensaba que el mundo sin ella sería una gran decepción y que no podría seguir con mi vida desde ese día tan trágico. Era una tarde lluviosa, a ella y a mí siempre nos han encantado los días así, muchas personas no salen o se cubren para que la lluvia no los moje, nosotros no, nosotros salíamos y hacíamos la lluvia nuestro espacio-tiempo de amor eterno, un amor que era inquebrantable, un amor que era verdadero, un amor que brillaba incluso más que el sol, y que bajo la lluvia se confundía con la misma, quizá era por eso que nos encantaba mojarnos, de alguna forma la lluvia nos daba amor, un amor que nos abrazaba con lagrimas, sí con lagrimas, son de esas lagrimas que sabes que se derraman por ti, lagrimas que ayudan a esconder las tuyas, lagrimas que cuando tocan tu cuerpo lo sientes caliente y que de alguna u otra forma sin decir ni una sola palabra puedes expresar todo lo que sientes y esas lagrimas lo entenderán, no te sientes vacio, te sientes feliz, te sientes feliz de que puedes sonreír sin razones, puedes sonreír sin tener que fingir, muchas personas no saben lo que esconde la lluvia, pero nosotros sí, nosotros dos sabíamos y quizá era por eso que nos uníamos tanto.

Soy un chico normal, tengo el pelo un poco largo. Soy un poco acuerpado, tengo mis ojos cafés y mido 1.72 de estatura con 15 años. Eran las 6 Am de la mañana y tenía que levantarme para irme a el instituto, era un nuevo año, y después de las vacaciones no te dan ganas de nada, solo te dan ganas de levantarte tirar el despertador a la parte más lejos que se te ocurra y dormir de nuevo, ese es el sueño de muchos adolescentes cada nuevo día antes de “levantarse” a veces los adolescentes pensamos que no vale la pena estudiar pero si te pones a cumplir ese sueño de tirar el despertador donde sea créeme, el único trabajo que encontraras será de vendedor de cajitas de chicle ambulante, y bueno no creo que ningún adolescente quiera ser eso, algunos desean ser abogados para ganar dinero, otros desean ser políticos para ganar dinero, otros se vuelven mafiosos para el mismo fin y claro también hay chicos o chicas que deseen ser doctores, veterinarios o ingenieros ambientales, no lo sé, en fin… yo no soy de esos, no sé lo que quiero ser, ni siquiera sé si seguir con mi vida, porque la verdad no es interesante.

Luego de pensar y alistarme para ir al instituto sabría que sería todo normal, levantarme cada día y hacer la misma rutina de siempre, encontrarme con mis amigos estar con ellos salir con ellos y así al final del día llegar a casa, dormir, bañarme, sentarme al frente del ordenador y de vez en cuando salir. Muchas cosas pasaban por mi cabeza de camino al instituto, ya había tenido unas cuantas novias, pero no quiero amargarme el día pensando en ellas y tampoco quería conseguir a otra chica, después de que te rompen el corazón solo te quedan ganas de arrancártelo, muchos sabrán por qué y los que no, pronto lo descubrirán.

En la entrada del instituto veo a mis amigos, uno se llama Zed y el otro se llama Juan, son mis mejores amigos con los que hago todo pero aunque no lo crean zed, juan y yo somos muy diferentes, zed es un chico frio que le causa daño a las personas pero si ama, ama con todo su corazón entregándose

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