Frankenstein

“FRANKENSTEIN”

En la obra de Mary Shelley vemos una historia de ciencia ficción que nos muestra a lo largo de la narración temas como el de la obsesión con la ciencia y el conocimiento, la creación de la vida, así como del asesinato. Además se perciben algunos valores como lo es la responsabilidad de un creador o padre frente a sus invenciones o hijos respectivamente.

Se aprecia que el contexto en que se desarrolla la historia es regularmente triste de acuerdo a los relatos de Víctor y del monstruo, pues se ven en constantes desgracias desde el nacimiento de este último. En lo que respecta a Frankenstein, en su niñez se ve como un niño normal y entusiasmado siempre por el conocimiento (a pesar de la muerte de su madre a temprana edad), por lo que podemos decir que no siempre su vida fue lúgubre. Y en cuanto a la creación, desde su primera impresión del mundo uno se puede imaginar un lugar lúgubre, oscuro y cruel, ya que fue abandonado a su suerte.

La novela se basa en la vida del personaje principal llamado Víctor Frankenstein, quien, al verse obsesionado con la filosofía, la ciencia, y la curiosidad que le infundía la pregunta del origen de la vida, realiza un invento innovador después de aislarse de la sociedad durante varios meses. Crea con sus propias manos a un hombre viviente de dimensiones muy grandes, y que a partir del inicio de su existencia aparecen las desventuras constantes de Víctor que lo marcarían hasta el día de su muerte.

La creación de la que habla la historia, es un ser que a pesar de ser hecho con tanta minuciosidad es horrible y desproporcionado, compuesto de diversas extremidades e intestinos de cadáveres recolectados. Pese a que era un engendro horripilante nació teniendo buenos sentimientos, hasta que, al verse constantemente rechazado, agredido y temido por la sociedad (en especial por su creador), se da cuenta de lo desdichado que es como ser viviente y emprende un viaje para encontrar a Frankenstein, y exigirle alguna solución a su situación tan desesperada y lamentable, como reposición al abandono en que lo desamparó.

Este ser sin nombre resulta, a pesar de todo, una magnífica creación, pues posee cualidades mucho mayores a las de un ser humano, goza de gran fuerza, rapidez, agilidad, incluso resulta ser mucho más inteligente que los seres humanos, es capaz de retener más fácilmente conocimientos, y constantemente se le ve en un crecimiento intelectual. Así mismo, se observa que la criatura es mucho más sensible que el hombre, por lo que se ve afectada su integridad emocional por el rechazo, y constantemente maldice a su creador, haciendo siempre una comparación con Dios, el cual no desamparó a Adán al inicio de su vida.

Se ve como la criatura sufre de una constante descomposición se sus sentimientos nobles y bondadosos al verse repetidamente atacado por la raza humana, hasta que en un momento dado de desesperación, declara al hombre como su enemigo existencial, y es a partir

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