Ideología, Alienación E Identidad NacionalIDEOLOGÍA, ALIENACIÓN E IDENTIDAD NACIONAL Una Aproximación Psicosocial Al Ser Venezolano Maritza Montero Belkys Marisol Ramírez De R.

La dependencia como fenómeno global que afecta a una sociedad, ha sido estudiada por autores como Cardozo y Faletto, quienes manifestaron hace varios años que la situación de subdesarrollo nacional dependía tanto de factores externos como internos que tienen que ver con comportamiento social, político, económico y a la estructuración de los grupos sociales que implica una situación de dominio con el exterior.

Son números los aportes que desde su aparición ha recibido la teoría de la Dependencia, inclusive por parte de de latinoamericanos que han tratado de explicar la realidad latinoamericana y casi todas las producciones provienen del campo de la economía, la sociología o la historia; pero no se ha estudiado el comportamiento social en una forma sistemática.

Para estudiar estos factores internos que determinan la dependencia, es necesario “estudiar las actitudes, las creencias, los valores y, en general, los mecanismos psicosociales que asume la ideología en los sujetos de ella” (pág.10).

Desde hace más de cuatro décadas son muchas las hipótesis, las teorías y los aportes empíricos que analizan las causas, consecuencias y características de la conducta humana en aquellos individuos o grupos carentes de seguridad o que no tienen poder. Este hecho, ha sido estudiado por los científicos sociales.

Maritza Montero en su obra, seguirá una línea de pensamiento según la cual la dependencia no solo será vista como un fenómeno económico y social, sino también como fenómeno psicosocial que afecta tanto a las sociedades, como grupos restringidos y por ende, a cada uno de sus integrantes que son los actores.

La relación entre el nivel del comportamiento individual y el socioeconómico y político de la dependencia puede explicarse por la teoría de la ideología por el concepto de alienación que Marx empleó en sus manuscritos Económicos y Filosóficos de 1844.

Maritza Montero manifiesta que esta necesidad de crear una teoría explicativa de ciertas formas de comportamiento, a nivel psicosocial tiene sus precedentes en Luis Escovar (1979), quien se esforzó por formular una teoría sobre el desarrollo social en función del control que el hombre ejerce su ambiente. Y para alcanzar ese control, debe actuar para evitar caer en la apatía y la desesperanza. El problema reside en que no solo basta con motivar el desarrollo del individuo para que asuma el control del producto de su trabajo. Y el concepto marxista de alienación suministra la clave.

Los seres humanos buscan desarrollarse en todos los sentidos para alcanzar su bienestar, pero esta búsqueda puede desequilibrar las relaciones humanas dado que la división del trabajo y la apropiación de los medios de producción bloquea el desarrollo humano de una gran parte de la población, lo que constituye la base del fenómeno de alienación, el cual Marx define como la relación en la cual el producto del trabajo se opone al trabajador, lo que entabla una ruptura entre el sujeto y el objeto de trabajo.

Seeman (1959) llamó a este fenómeno”alienación normativa”, y explica el hecho de que el individuo al sentirse incapaz de obtener satisfacción por medios aceptados socialmente, lo hace a través de comportamientos socialmente reprensibles”.

Seligman (1975), califica el descenso de la motivación ante la incapacidad del individuo de prever las consecuencias de sus propios actos en el marco de una normatividad en la cual el ejercicio del control está limitado a la clase dominante. La pérdida del objeto da lugar, a la pérdida de la iniciativa que deja de ser reforzada y esta a su vez, da lugar a una tercera pérdida: la del sentido de los actos mismos que conduce al individuo a rechazar nuevas formas de conocimiento o a ser indiferente ante ellas.

Maritza Montero, expresa que en una situación de alienación, los sujetos alienados orientan su gratificación hacia fuentes externas, sustitutas de aquellas que lo relacionen con el producto de su trabajo. Aquí aparece otro efecto, la depresión, que Seligman llama paradigma de la desesperanza adquirida. Esta manera de interpretar al mundo ha sido descrita por Rotter (1966), mediante una escala que contiene dos dimensiones. La primera, donde los individuos atribuyen las consecuencias de sus actos a circunstancias exteriores: Dios, el destino, el azar; y en la segunda, se hacen responsables de sus actos, por lo tanto, son capaces de actuar en forma creadora sobre el medio y transformarlo.

Según Rotter y una serie de investigadores que han utilizado su escala, el foco de control externo predomina en las mujeres, los pobres y los habitantes del Tercer Mundo. Es decir, que los grupos minoritarios, la clase dominada, parecen estar sujetos al aprendizaje de la desesperanza. Lo cual resulta “lógico si se analiza el problema a partir del concepto de alienación, de la ideología como mecanismo social de transmisión y sostén de ciertas maneras de actuar y de pensar, del lugar que estos sujetos ocupan en las relaciones de producción y, por ende, de la posibilidad o de su imposibilidad de acceder al poder” (pág.14)

A esto, se le agrega el despojo que resulta de la alienación y de la acción de una cierta ideología lo que conlleva a la pérdida de memoria social del grupo alienado y de la conciencia de su potencialidad como grupo, lo que se traduce en un bloqueo de la formación de una conciencia nacional.

El fenómeno que Maritza Montero pretende describir en este libro, está presente en los casos en que hay una pérdida de poder o una imposibilidad de acceder a él, y donde existe una re1lación de desequilibrio entre los individuos. La pérdida del poder significa la pérdida del dominio del bienestar y de la posibilidad de acceder al mismo. Esto se produce tanto en el marco de las relaciones internacionales, entre diferentes clases sociales de una nación, en los grupos secundarios, entre instituciones, y hasta en el seno del grupo familiar. El objetivo general, de esta publicación es, proporcionar una explicación de la conducta social en situaciones de distribución y de ejercicio desigual del poder. Hacer un trabajo integrado de observaciones y hallazgos realizados y datos trabajados psicológicamente por diferentes autores. El resultado es un estudio teórico que trata de explicar el comportamiento estudiado y cuyas raíces se encuentran en una sociedad específica, a la vez que toma en cuenta factores sociales, económicos e históricos que lo condicionan.

Este ensayo socio-psicológico, trata de situaciones de distribución desigual del poder describe y analiza la identidad del venezolano, trabajando tres niveles: uno de revisión y análisis crítico de teorías, paradigmas, hipótesis y explicaciones originadas de la sociología y la psicología social, aplicadas a la identidad nacional

...