La Mujer Latinoamericana Según Ma. Luisa Bombal

María Luisa Bombal es conocida por ser una innovadora escritora chilena que propulsó el uso de una nueva forma de escritura en la literatura latinoamericana. Ella empleaba lo onírico como técnica narrativa con el fin de retratar el rol y los sentimientos de la mujer en una sociedad donde se le da importancia al hombre. Esta temática se encuentra presente en una de sus obras, La Última Niebla, en la que la protagonista vive toda su vida deseando a un amante que le entregue el amor que no recibe de su esposo. El objetivo de este ensayo es dar a conocer un punto de vista en cuanto al tipo de mujer que se ve representada en uno de los libros de esta autora.

A fines de la década del 30 varios autores latinoamericanos, entre ellos Bombal, iniciaron este cambio en la literatura hispanohablante, utilizando la pérdida del realismo y el uso de los sueños de sus protagonistas para mostrar el deseo de los mismos, en una forma de criticar los estratos sociales burgueses que estaban presentes en la época.

En los escritos de esta autora podemos notar que las mujeres protagonistas recurren a la naturaleza como un escape de sus solitarias y decepcionantes vidas. En La Última Niebla, la protagonista se ve resignada a una vida en la que tiene que complacer los deseos de su esposo de parecerse y actuar como su difunta mujer que a sus ojos era perfecta. Al igual que en sus historias, la mujer latinoamericana busca el matrimonio como una forma de escapar de la soledad, así como también para encontrar el deseado amor y estabilidad en la complicada sociedad burguesa en la que no conseguían encajar del todo gracias a los límites puestos por la misma. Es por esto mismo que la mujer siente una enorme frustración al verse sofocada por todo lo que la rodea y sin tener un lugar ni persona al que recurrir, y en este momento entra María Luisa Bombal usando la naturaleza como la voz portadora de la interminable lucha entre los pensamientos y los “deberes”.

Tan sólo con un recuerdo se puede soportar una larga vida de tedio. Y hasta repetir, día a día, sin cansancio, los mezquinos gestos cotidianos. (Bombal: 1934)

En toda época, la mujer es vista como un ser que tiene que surgir en ciertos ámbitos. En los tiempos de Bombal, la mujer era el núcleo familiar, era dependiente y dócil mientras que el hombre era lo contrario. El hombre sentía la necesidad de tener una mujer a su lado, en mi opinión, como un apoyo o quizá para enfatizar el sentimiento de superioridad y honor. Es por eso que Daniel en La Última Niebla, se casa con su prima que le recuerda a su antigua esposa, no sólo utilizándola y dándole una identidad que no le pertenece, sino que también porque la soltería era mal vista en la sociedad burguesa. “Mi cuerpo y mis besos no pudieron hacerlo temblar, pero lo hicieron, como antes, pensar en otro cuerpo y en otros labios. Como hace años, lo volví a ver tratando furiosamente de acariciar y desear mi

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