La ambición que lleva a la traición: Macbeth

La ambición que lleva a la traición: Macbeth

La lucha constante entre el bien y el mal, ha estado presente en todo momento dentro de la literatura. Shakespeare, un genio teatral inglés, nos transmite las condiciones en las que el humano de la época del Renacimiento y Barroco se desenvuelven en su entorno. En el Renacimiento se sustituye la omnipresencia divina por la afirmación de los valores del mundo, la valoración de lo humano y la búsqueda de la perfección ideal. Sin embargo esto no es una negación a la religión, por el contrario, Dios sigue siendo la perfección y por eso mismo el hombre busca reflejar esa perfección que Dios transmite mediante su inteligencia y sus habilidades. Las características más importantes de esta literatura renacentista es el amor, la naturaleza y el comportamiento humano.

El Barroco, por otra parte, retoma los temas renacentistas pero también nos deja ver la reflexión moral sobre el paso del tiempo, los temas que son derivados del desengaño, así como el análisis de los defectos humanos.

Dicho esto, podemos decir que Shakespeare a lo largo de sus obras fue evolucionando conforme a la corriente que se vivía. Tuvo la fortuna de poder representar estas dos corrientes. Sus obras han recibido el reconocimiento que merecen en el mundo entero. Casi todas sus obras continúan hoy representandose y son fuente de inspiración para numerosos experimentos teatrales.

La ambición, que es el tema central, es definida por la Real Academia de la Lengua Española (RAE) como el deseo ardiente de conseguir algo, especialmente poder, riquezas, dignidades o fama; el poder es definido como tener expedita la facultad o potencia de hacer algo. Esto se considera sano cuando promueve el desarrollo de proyectos, pero cuando el deseo es más fuerte que quien lo posee, se vuelve riesgoso.

Otro de los temas principales es la traición, que se trata de una falta que quebranta la lealtad que se debería guardar hacia alguien. Traicionar supone entonces, que se rompen valores como el respeto, compromiso y fidelidad que pueden existir entre dos personas. Normalmente, la traición representa un posible daño para quien lo sufre.

La búsqueda de poder, crea vicios sin alma que buscan a cualquier costo permanecer en la cima de la supremacía.

Esta es una historia llena de ambiciones y traición, pero no todo comienza así. Macbeth empieza como un excelente guerrero, valiente, honorable, leal, y esto lo demuestra luchando en el campo de batalla para el rey de Escocia. Uno de los sucesos más importantes para el cambio de su personalidad, es la aparición de tres parcas, que parecen gustar de jugar con las personas y ser muy vengativas, le dicen, a él y a Banquo, que tendrán ambos futuros muy buenos. Macbeth parece estar escéptico ante las profecías y se puede observar, que ahí empieza la ambición pero como algo sano, promoviendo el desarrollo de proyectos, aunque en esta situación serían metas o ideales.

Macbeth muestra una personalidad débil, es ambicioso, violento e idealista, esto nos lo muestra al dejarse persuadir por su esposa y al ser capaz de cometer asesinatos para lograr sus objetivos, comenzó a tomar una personalidad egoísta y diferente, no pudo dejar de desarrollarlo pues nunca tenía suficiente, eso lo llevaba a desear más cosas en reflejo de sus carencias, como lo es la falta de descendientes que heredarán sus títulos y lo engrandecieran aún más.

Podemos apreciar que cuando Macbeth es persuadido por Lady Macbeth, su esposa, quien muestra ser una mujer bastante ambiciosa, para matar al rey Duncan durante su estadía en su castillo y comete un acto de traición que quebró la lealtad que decía guardarle a su rey. Shakespeare (1623): "Ya están mis manos del color de las vuestras; pero me avergonzaría de tener un corazón tan blanco... ¡No os dejéis perder tan miserablemente en vuestros pensamientos!” en esta cita Lady Macbeth demuestra no tener remordimientos y ser sumamente ambiciosa y frìa, tratando de tranquilizar a su esposo para no sentir ninguna culpa. Aquí se muestra por primera vez en la obra el tema de la traición. Lo único que se vuelve importante para Macbeth y su esposa es la ganancia de títulos y riquezas, es decir, no importa qué acción o delito realicen, el resultado debe ser ganar; en estas acciones ponen en práctica que el fin justifica los medios, saben que asesinar es la forma de obtener más poder, y para encubrir sus malas acciones culpan a personas inocentes.

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