La técnica. El hombre se reconoce como un ser técnico, no solo pretende adaptarse a su entorno como lo hacen los demás seres vivos

El hombre se reconoce como un ser técnico, no solo pretende adaptarse a su entorno como lo hacen los demás seres vivos, sino que también busca transformar este medio para adaptarlo a sus necesidades, pero no solo a sus necesidades biológicas, también necesitamos de lo superfluo, aquellas que no cumplen ni desempeñan una función.

Al ser humano desde que nace, se presenta como un ser lleno de carencias, de manera que para sobrevivir, ha de cultivar la tierra, hacer fuego, construir, formar su hogar, etc. A diferencia de los animales, cuando no encuentran en la naturaleza lo que necesitan, lo producen, por esto el animal es atecnico, se conforma con simplemente vivir y con lo necesario que la naturaleza le entrega para sobrevivir.

Por otro lado, vivir humanamente no significa únicamente estar en el mundo, sino estar bien, por esto el hombre es técnico, creador de lo superfluo para alcanzar así la felicidad. El hombre no se le impone la necesidad de vivir a la fuerza, vive porque quiere vivir, porque desea vivir y lo hace. Vida significa para el no simplemente estar, sino bienestar. Sin embargo al ser humano se le da la posibilidad de vivir, pero, no se le entrega todo en una bandeja de plata, sino que debe mantenerse, ganarse la vida.

La técnica en cada época, pueblo, y para cada individuo es distinta, puesto que cada ser humano es diferente tanto en los motivos e intereses que poseen para mantenerse convida como de la idea de bienestar que presenta en todo momento a lo largo de su evolución, por ejemplo: el mundo de un carpintero con el mundo de ingeniero, son muy diferentes aunque tengan mucho en común.

Ortega en su texto “Meditación de la técnica”, nos presenta dos nuevas características de la técnica: En primer lugar, trata de lograr la satisfacción de las necesidades con el mínimo esfuerzo. En segundo lugar, trata de crear posibilidades nuevas, produciendo objetos que no hay en la naturaleza como el barco, el avión, el teléfono, entre otros. Así también explica que todas estas creaciones del hombre y variados elementos, le permiten enfocarse en los demás quehaceres, favoreciendo el ahorro del esfuerzo.

Hasta ahora la técnica se ha presentado como una de las mejores capacidades del hombre, que le permite que su transcurso en la vida sea más sencillo y más tolerable, pese a esto el hombre se ha vuelto tan dependiente de la técnica, que ha perdido el rumbo y el sentido de su vida, actualmente solo busca satisfacer sus necesidades en el presente y no aquellas que lo motiven al bienestar de esta. Ha contribuido a que el hombre no sepa ya quien es, que sienta un vacío en su vida. La técnica en la actualidad que hecho creer al hombre que su poder es ilimitado, cualquier cosa que él pueda imaginarse puede ser realidad, de esto nace la existencia de objetos creados para realizar los quehaceres más básicos, con la finalidad de demostrar el gran avance de la tecnología y para satisfacer la necesidad de conformidad del hombre, de manera que el esfuerzo y la energía que utiliza al realizar la acción sea el mínimo. Otro factor en contra de la influencia de la técnica en la vida actual: Las generaciones de hoy en día, nacen con una gran cantidad de elementos capaces de satisfacer variadas necesidades y/o inquietudes, hasta tal punto que un individuo a medida que se vaya desarrollando se acostumbra a ellos, e incluso puede llegar a pensar que estos objetos están ahí por sí mismos, sin que sea necesario un pequeño esfuerzo por parte de la persona.

Tal como nombramos anteriormente, existe una gran variabilidad de los intereses y motivaciones entre cada una de las personas que conforman una comunidad, por lo tanto existe una técnica en específico para cada individuo, la cual puede ir perfeccionando y mejorando en base a la práctica y a la experiencia, entonces debido a la gran variabilidad que existe por ejemplo entre un carpintero y un ingeniero, suele menospreciarse el trabajo del carpintero, por el hecho de utilizar recursos más básicos o no tan elaborados como lo hace el ingeniero. Este es un “sello” que la sociedad ha generado y utilizado para menospreciar más de un trabajo, puesto que se valora más el trabajo realizado por un ingeniero que por un carpintero. No se tiene consideración del común que presentan ambos labores, como por ejemplo: ambos contribuyen al beneficio de la sociedad, ya sea desde diferentes perspectivas, ambos trabajos son realizados por personas que tienen los mismos derechos que los demás y que merecen ser tratados con respeto de la misma manera.

Pese a las diferentes consecuencias que genera la técnica en la vida actual de las personas, este ha generado grandes avances en diferentes contextos, ya sea en el la salud, en el ámbito escolar, en el hogar, entre otros. Permitiendo de alguna facilitar aún más la vida en sociedad. La técnica en conjunto con las personas se ha ido evolucionando y perfeccionando. El tecnicismo moderno es más distinto del que ha actuado en todas las técnicas anteriores. Ortega por otro lado entrega una relación entre la inteligencia, la memoria y la imaginación, dice que es en la imaginación y no en la inteligencia donde propiamente hay que buscar la posibilidad de la técnica. Es decir la posibilidad de adquirir la técnica es tan sencilla, como “poner nuestra imaginación a volar” para resolver algún problema que inquiete la vida de la persona, hallando los medios necesarios para llevar a cabo una solución, es ahí donde inicia la principal función de la técnica: es hacer posible que el programa humano se realice.

En relación con la educación, ha aumentado la cantidad de instituciones tanto infantiles, como universidades, en comparación con las épocas anteriores, era mínima o nula, y las posibilidades que tenían las personas para acceder a una educación, era aún más complicado, puesto que solo las personas que poseían mayores recursos, tenían el privilegio de ser escolarizadas. De esta manera la gente debiera sentirse más satisfecha con el desarrollo de la educación. Ocurre todo lo contrario, Victor García Hoz, en su libro  “La educación y sus máscaras” establece: “Se tiene la impresión de que a medida que se extiende la educación se extiende también el descontento. A más educación, más insatisfacción, más frustración”.

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