Los Juegos Del Hambre

Los Juegos del Hambre

1. La novela cuenta con un narrador en primera persona singular. La historia está contada en tiempo presente:

“Doy un salto cuando noto que alguien me mira a pocos centímetros, y me doy cuenta de que es mi propio reflejo en el cristal: ojos enloquecidos, mejillas huecas, pelo enredado; rabiosa, salvaje, loca. No es de extrañar que todos se mantengan a una distancia prudencial de mí.”

Estar en primera persona significa que los verbos, como por ejemplo “doy” y “noto” están en primera persona singular, porque expresan lo que está haciendo el personaje que narra la historia.

Cuando dice que está narrada en presente, significa que los verbos están en tiempo presente, a no ser cuando narra algún suceso del pasado.

2. En una fecha futura inconcreta, Estados Unidos fue devastado por un conjunto de desastres naturales, inundaciones, desordenes sociales, hambruna… y de sus ruinas surgió la nación de Panem: dividida en trece distritos productivos, con una todopoderosa y tiránica cuidad central llamada Capitolio que rige los destinos de los distritos a su antojo. Cuando el distrito 13 se reveló contra el Capitolio, éste lo destruyó, y así demostrando que nadie es capaz de desafiar el poder del Capitolio. Como recordatorio y castigo anual de la autoridad que ejerce el Capitolio, surgieron los Juegos del Hambre. Los Juegos del Hambre es un sangriento torneo continuamente televisado donde un chico y una chica de cada uno de los doce distritos restantes, deben luchar a muerte, en el que sólo uno de los 24 “tributos” puede ser el ganador. Los competidores se eligen mediante un sorteo que están obligados a participar cada joven que tiene entre 12 y 18 años. Mientras el ganador recibirá una vida de lujo no habitual en los distritos, los perdedores no sobrevivirán

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